Taoísta y zorrito 19

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A la medianoche, aparecieron los demonios, haciendo que toda la Capital pareciera un pantano fangoso y dejando atrás solo el viento aullante y las nubes densamente oscuras. Tranquilo y sin prisas, Ling Si se sentó en la cama. Su Tang, sin embargo, se escondió nerviosamente detrás de un gabinete, esperando en silencio la llegada de los demonios.

Solo había un dedo de arena en el reloj de arena, pero la calma dentro de la habitación era algo extraña. El sonido del viento envolvió el sonido de la arena que fluía y provocó que la agitación en el corazón de Su Tang se agitara.

"Ziiii—" La puerta se abrió de repente y el viento exterior fue instantáneamente atraído hacia adentro, llevando un toque de aire frío y espeluznante. El corazón de Su Tang se apretó y quería ver a través del espacio del gabinete, pero al final, solo pudo ver un par de zapatos manchados de sangre.

Las dos piernas caminaron muy lentamente, paso a paso, dejando un rastro de huellas ensangrentadas en el piso color ceniza. Los latidos del corazón de Su Tang se aceleraron, lo que hizo que se aferrara con fuerza al borde del gabinete. En su corazón, trató de consolarse a sí mismo: No tengas miedo, no tengas miedo. Sin embargo, sus ojos no pudieron apartar la mirada de esas manchas de sangre.

La habitación de Sun Rouwan era muy grande. Al entrar en la habitación, habría una pantalla larga obstruyendo el camino. A medida que esa cosa se acercaba más y más hasta llegar a la pantalla, la respiración de Su Tang se estancó.

Mientras diera un paso más hacia adelante, todas las formaciones de hechizos dentro de la habitación se activarían de inmediato. Su Tang miró atentamente ese par de zapatos, incapaz de decir si estaba nervioso o emocionado. Por un momento, el tiempo pareció haberse detenido antes de que pronto volviera a fluir rápidamente. Mientras Su Tang estaba aturdido, toda la habitación hizo un ruido fuerte y una luz blanca inusual brilló cuando todas las formaciones de hechizos dentro de la habitación se activaron y cuerdas rojas que parecían una gran red revolotearon hacia la cosa.

"Aoooo—", vinieron los aullidos agudos y roncos de esa cosa, la vibración casi capaz de destruir los tímpanos. Su Tang de repente abrió las puertas del gabinete y vio a Ling Si patear la pantalla para revelar el cuerpo detrás de ella.

"¡Ahh!" En el momento en que pudo ver a la persona claramente, Su Tang no pudo evitar gritar. Incluso Ling Si no pudo evitar fruncir el ceño porque la cosa en realidad tenía la cara de Li Ping.

O tomó prestado el cuerpo del verdadero Li Ping.

Todo el cuerpo de Li Ping se estaba pudriendo y cubierto de sangre, aparentemente ya había muerto durante bastante tiempo. Sin embargo, innumerables demonios ocuparon su cuerpo, apoyando sus movimientos. Su boca ensangrentada estaba muy abierta como un cuenco de sacrificio mientras aullaba e intentaba romper la red roja en pedazos.

"¡Rapido!" Ling Si habló apresuradamente y Su Tang inmediatamente sacó la linterna de loto que domina al demonio de antes. Al encontrar una oportunidad, la presionó sobre la cabeza de Li Ping. Las luces se encendieron de repente y los pétalos de la linterna de loto se hicieron más y más grandes, girando y cubriendo a la persona que estaba debajo. Luego, los pétalos se fusionaron y la llama desapareció abruptamente después de que todas las criaturas malvadas fueran reunidas en la lámpara.

La linterna de loto comenzó a temblar incesantemente, incapaz de volver a su tamaño original. Su Tang, apenas capaz de respirar un suspiro de alivio, acababa de apoyar su cuerpo contra el costado de la ventana con un golpe suave cuando grandes garras negras se estiraron repentinamente hacia él.

“Ling…” Su Tang ni siquiera fue capaz de gritar su nombre a tiempo cuando sintió dolor en la parte posterior de la cabeza. Lo último que vio antes de perder la conciencia fue una cara que era de siete a ocho puntos similar a Ling Si.

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