Pequeña hada del melocotón 02

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Su Tang extendió las manos y las encontró carnosas y delicadas. Se tocó la piel con un dedo, lo que dejó una pequeña marca.

Se acababa de convertir en su forma madura y todavía no llevaba ropa, sin embargo, afortunadamente, el aura en el bosque de melocotones era abundante. Utilizó un pequeño hechizo y se hizo un cárdigan verde musgo.

El color de esta túnica le sentaba muy bien; era un poco verde, pero tenía más un soplo de vida: la brisa soplaba y las esquinas de la ropa revoloteaban, pareciendo mezclarse con este bosque de melocotones.

Pero Su Tang no estaba satisfecho, porque todavía tenía la mentalidad de un niño.

Según su apariencia, era como si solo tuviera alrededor de seis o siete años. Lindo era lindo, pero era demasiado joven.

"Sistema, dijiste que he estado en tantos mundos; ¿cómo puedo tener cientos de años en total si tengo que vestirme como un niño?" Preguntó Su Tang, sentado en la rama con una expresión agraviada.

"Ven, déjame decirte la verdad. Aunque tu apariencia es joven, de hecho, a esta edad, puedes matar al menos a la mitad de los dioses en los cielos". Dijo el sistema.

"¿De Verdad?" Su Tang inmediatamente sintió que el sistema no era confiable y preguntó: "Si ese es el caso, ¿por qué soy todavía tan joven?"

"Porque eres vago y no sabes cómo practicar. Con usted bebiendo rocío y durmiendo todo el día, es lo suficientemente bueno que pudo transformarse en una forma adulta. También elegiste esta apariencia. Lo que estás haciendo es ver la reunión de protagonistas masculinos y femeninos, no ir a una cita a ciegas". Afortunadamente, Su Tang parecía pequeño esta vez; de lo contrario, el protagonista masculino lo vería y podrían terminar llorando y muriendo en el ciclo de la misión.

Tan pronto como el sistema pensó en esto, se asustó un poco. Quería decirle a Su Tang algunas palabras, pero luego vio la cara despreocupada de la otra persona y no supo cómo hablar.

"No completó sus tareas en los dos mundos anteriores. En este mundo, es necesario trabajar más duro", dijo el sistema.

"Oh." Su Tang asintió y descubrió que no podía recordar lo que había sucedido en el mundo anterior. No a quién había conocido, qué había sucedido o qué tipo de sentimientos había tenido, no podía recordarlos en absoluto.

Quería preguntarle al sistema, pero recordó que la otra parte le había dicho que sus recuerdos se borrarían si fallaba en la tarea. No había nada que pudiera hacer al respecto.

Su Tang estaba un poco triste, y su estado de ánimo pronto se deprimió hasta que el sistema murmuró junto a él para hacer desaparecer estas emociones.

"Sé feliz, ahora eres el gran jefe en este bosque de melocotones. Todas esas pequeñas hadas melocotón te escuchan. Haz que te busquen en el futuro. Cuando aparezca el protagonista masculino, te darán un informe de inmediato y, cuando llegue ese momento, harás bien la tarea". El sistema hizo sugerencias por un lado, y después de su charla, también imaginó la alegría de la siguiente tarea.

"Está bien, iré allí". Su Tang asintió. Trató de saltar del árbol, pero luego quedó un poco aturdido. Si saltaba así, se lesionaba.

Su Tang estiró los pies y descubrió que no podía alcanzar el suelo. Quería bajar por el tronco, pero no pudo sostenerse y estuvo a punto de resbalar. Dio vueltas y finalmente se sentó en el árbol sin moverse.

"Sistema, ¿qué hago?" Preguntó Su Tang.

"¿Por qué no saltas? No es tan alto, no caerás a tu muerte", dijo el sistema.

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