Paquete adorable

Pequeño vampiro 19

"Oh, eso es cierto." El príncipe Ravel obviamente no esperaba que Shen Lan se entrometiera, y mucho menos el tono burlón del otro. La comisura de sus labios se tensó y tomó una bocanada; Efectivamente, el olor de Shen Lan estaba en Su Tang.

Su hermano menor, lo disfrutaría cada vez más. Esa sangre dulce y fresca, si la ingiriera, qué deliciosa sería. 

El príncipe Ravel sonrió, aparecieron algunas arrugas en su rostro pálido y estaba especialmente sombrío bajo la luz. Mientras miraba a la pareja durante mucho tiempo, nadie podía decir lo que estaba pensando.

Su Tang no podía soportar sus miradas indiscretas y, sin embargo, al mismo tiempo, no podía apartar la mirada. Él y el príncipe Ravel tenían la misma sangre fluyendo por sus venas, pero cuando se enfrentaron, pudo sentir la intención asesina de la mirada del otro.

De hecho, el príncipe Ravel había querido matarlo desde hacía mucho tiempo, pero el crimen de matar a un pariente no era algo por lo que quisiera ser conocido, por lo que puso a dormir a Su Tang y luego dividió sus propiedades y derechos.

Pero ahora todo es diferente. El cuerpo de Ravel ha llegado a su límite. Necesitaba la sangre de uno de sus parientes más cercanos para sobrevivir. Cuando renaciera, todos sabrían lo que había hecho y alguien se presentaría para condenarlo. ¿Y qué? Habría ganado la fuerza más poderosa, y esos humildes humanos y equipos policiales no podrían detenerlo.

En cuanto a Su Tang, lo fue aún más.

Ravel pensó en esto y apartó la mirada, las intenciones asesinas también ocultas en sus ojos rojo oscuro. Sonrió y retiró la mano. Era casual pero elegante, y hablaba de su noble educación. Amablemente, dijo: "Parece que lo estás pasando bastante bien".

Su Tang vaciló por un momento antes de asentir en afirmación.

"Entonces no te molestaré. Espero que pases una agradable noche aquí ". El príncipe Ravel terminó, luego se volvió y miró a An Shiyu a un lado.

"Te pareces mucho a alguien que conozco, eres muy hermosa". Dijo el príncipe Ravel.

"Gracias." An Shiyu sintió que había intenciones ocultas en las palabras de la otra parte, pero no podía ver a través de ellas. Los ojos rojo oscuro de la otra parte la miraron fijamente, dándole escalofríos.

"Tengo una foto de ella, ¿quieres verla?" Preguntó de nuevo el príncipe Ravel.

"No..." An Shiyu quiso negarse, y escuchó al príncipe Ravel decir de nuevo: "Se llama An y viene del país Z".

El cerebro de An Shiyu se sintió como si hubiera sido golpeado con fuerza por un martillo. También era del país Z y había tomado el apellido de su madre, aunque nunca había visto a su madre. Desde la infancia, fue criada por su abuelo y su abuela, y todo lo que tenía de sus padres eran algunas fotografías viejas y amarillas.

Siempre que preguntaba por sus padres, su abuelo y su abuela siempre evitaban hablar de eso. Cada descriptor que Ravel le proporcionó le recordaba a su madre. Sabía que la otra parte tenía un propósito, también sabía que estaría en peligro cuando fuera allí, pero no pudo encontrar la razón para rechazar su oferta.

"Vete ba , te esperaremos aquí". Su Tang de repente habló desde su lado cuando ella dudaba.

"Gracias." An Shiyu asintió y siguió a Ravel escaleras arriba.

La fiesta continuó. Su Tang y Shen Lan no hablaron, pero ambos sabían muy bien que An Shiyu era en realidad el anzuelo en su plan para capturar al príncipe Ravel. Incluso si era muy peligroso, tenía que irse.

En ese momento, Shen Lan no estuvo de acuerdo con esto, es solo que no había una mejor manera. Afortunadamente, An Shiyu quería ir hoy, de lo contrario, incluso si la detenían, la organización enviaría a alguien para que la dejara ir.