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Cuando Jeno y Jaemin dijeron que estarían observando a Renjun desde lejos, Donghyuck pensó que estarían metros atrás de ellos. Pero los alfas caminaban detrás de ellos con una distancia que ni siquiera podría considerarse distancia. Donghyuck estaba seguro de que podía sentir sus calientes y celosas respiraciones en su cuello y se estaba empezando a poner incómodo.

Renjun no parecía molesto en lo absoluto. Hablaba con Donghyuck como si estuvieran solos, ignorando completamente a los alfas que lo seguían pegados a sus talones. Debía estar acostumbrado a tenerlos pegados como chicles. Donghyuck lo encontraba tedioso, pero en lo profundo de su corazón él quería lo mismo. Quería que alguien lo siguiera así pero no de la forma extraña. Quería a una persona protectora y que se preocupara por él como los amigos de Renjun.

—Primero, necesitas controlar esa mirada tuya. Da miedo cuando miras a las personas así —Renjun habló mientras caminaban por los pasillos. Donghyuck se sentía como una celebridad cuando todos los estudiantes abrieron un camino para que pasaran. Pensó que era por él, pero resultó ser por Jeno, el alfa de sangre pura al que veneraban. —Trata de suavizarla tanto como puedas. ¿Puedes intentarlo?

Donghyuck se detuvo y volteó a Renjun e intentó mirarlo feo pero no pudo porque Renjun no le molestaba para nada. ¿Cómo podría enojarse con alguien con un rostro tan inocente? Renjun lo volteó para que viera a Jaemin. El alfa miraba a Donghyuck sin emoción alguna en su rostro. Donghyuck odiaba ese tipo de miradas horribles que pronto se podían tornar en crueles y de miedo así que decidió regresarla.

—¡Oh por dios! Jaemin debe estar asustado de ti —Renjun cubrió los ojos de Jaemin haciendo que se sonrojara. —¡No lo asustes así!

Donghyuck estaba asombrado por el efecto de Renjun en el alfa. Simplemente había tocado a Jaemin y el contrario ya se veía fascinado. Sentía un extraño y maligno sentimiento pero se deshizo de él rápido para reemplazarlo por emoción. Donghyuck quería ser como Renjun. La vida sería mucho más fácil.

—Intenta mirarlo de manera más suave.

—No creo poder.

No sentía simpatía alguna por ninguno de los alfas excepto por su hermana y padre. Veía a los demás como pervertidos sedientos que nomas les importaban sus deseos.

—Inténtalo.

Donghyuck miro a Jaemin y luego la suavizó.

—Un poco más —guio Renjun con una expresión seria. —Perfecto. Ahora intenta mirar a todos así.

—¿Así? —Donghyuck jadeó. La mirada que tenía en el rostro era demasiado tierna y los demás podrían malinterpretarla. —¡No! Las personas pueden pensar que me los quiero llevar a la cama.

Jeno entró en pánico y cubrió rápidamente los oídos de Renjun como si no hubiera escuchado nada por el estilo en su vida. Jaemin chasqueó la lengua irritado y observó perezosamente a Donghyuck.

—No queremos que tus palabras lascivas dañen los oídos inocentes de Renjun.

—No creo que sea así de inocente —Donghyuck rodó los ojos. ¿Cómo podría un chico de dieciocho años no haber escuchado nunca de eso? Era un omega, debería saber más sobre ello que los alfas.

—Deberías porque es la personificación de inocencia —Jaemin afirmó. Donghyuck se quería reír en su cara, pero la expresión seria del alfa lo contuvo.

Renjun removió las manos de sus amigos de sus oídos y miró a Donghyuck con sus ojos vírgenes brillantes.

—Los omegas deben verse así. Fuimos creados para ser dulces y tiernos mientras que los alfas son fuertes y sólidos. Los omegas usualmente no hacen las cosas como tú.

MATCH MADE IN HELL 》markhyuckDonde viven las historias. Descúbrelo ahora