𝓥𝓮𝓲𝓷𝓽𝓲𝓽𝓻𝓮́𝓼

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¡¿Tú?!

XXIII. Al menos que sea queso o vino, la edad no es un factor.

LOS DÍAS PASARON RÁPIDAMENTE Y  MAÑANA YA SERÍA EL DÍA DEL BAILE

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LOS DÍAS PASARON RÁPIDAMENTE Y  MAÑANA YA SERÍA EL DÍA DEL BAILE. Sin planearlo, ninguno de nuestros diez estudiantes estrella tenían idea de lo que se pondrían y cinco de ellos ni siquiera tenían una pareja aún.

Extrañamente, los diez estaban sentados en la misma mesa de cafetería, sin quererlo se habían convertido en un grupo.

—¿Ya tienen pareja para el baile? Recuerden que tenemos que bailar el vals inicial —preguntó Caroline con una sonrisa pues ella ya tenía una muy hermosa compañía.

—Yo ya lo resolví —aseguró Nicolás causando que Zack se quedara estético y su hamburguesa cayera de sus manos, los demás se miraron entre sí, ¿Smith invitando a alguien?—. No voy a bailar y así no necesito una pareja, fácil.

La respiración de Black se tranquilizó y volvió a armar su comida caída en su bandeja roja.

—Lamento decir que mañana el director regresará y ya no tendrás el poder de decidir si bailarás o no, tu reinado de terror acaba —dijo Johann tomando de su petaca de plata, Caroline lo miro extrañada.

—¿Todavía tienes? —cuestionó al darse cuenta que pronto cumpliría un mes desde la última vez que miro la petaca con el mineral anti lobos.

—No —aclaró haciendo un puchero, ganándose miradas confundidas de todos los de la mesa que pensaban que el híbrido era alcohólico—. Esta es sangre de ciervo, es deliciosa, pero prefiero mil veces la de hombre lobo..

Los licántropos que compartían mesa se quedaron pálidos, exceptuando Nicolás que en más de una ocasión le había regalado de su sangre a Johann.

—La sangre de los hombres lobos es más fuerte que la de los animales, porque tiene ADN humano y ADN de lobo, tiene más proteínas para un vampiro.. —habló Noah ganándose una sonrisa de parte de Meyer.

—Exactamente.

—¿Cómo pasamos a hablar del baile a hablar del tipo de sangre que le gusta a Johann? —preguntó burlona Samantha, que estaba haciendo trabajos de matemáticas como pasatiempo.

—Samantha, ¿sabes que te ves muy bonita el día de hoy? —halago Daniel ganándose una mirada celosa.

—¿Qué quieres Roux? Advierto que no voy a hacerte tu tarea.. 

—Quiero ir al baile de navidad con esa rubia, y de paso que sea la madre mis hijos —apuntó a una mesa del fondo donde una linda chica Beta estaba leyendo un libro de contabilidad, era de segundo año.

¡¿Tú?! © [BLACKVERSE #2] ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora