𝓥𝓮𝓲𝓷𝓽𝓲𝓸𝓬𝓱𝓸

413 34 53
                                    

¡¿Tú?!

XXVIII. Edward Stroker

━━ poner la canción de arriba cuando salga " -[🥀] "

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

.━━ poner la canción de arriba cuando salga " -[🥀] "

「❛ omnisciente ❜」

SE QUEDÓ TODA LA NOCHE ESPERANDO a que Nicolás regresará para pedirle disculpas y que le asegurará que no volvería a irse de esa forma que causaba pequeñas punzadas en su gran corazón, no dormiría hasta que su mate volviese. Pero para la mala suerte de Zack, Nicolás no volvió en toda la noche y el se quedó ahí, sentado al lado de una estatua de mármol esperando a que el omega de su corazón pasase por el umbral.

Al final del día anterior decidieron que era buena idea acampar en los jardines, así que Zack estaba rodeado por tres casas de campaña y logró escuchar cuando alguien cayó de un colchón hacia el piso.

—Maldito híbrido —el albino miró hacía la tercera casa donde salía Christopher con cara de pocos amigos y su cabello hecho un desastre, el vampiro miró a los alrededores.

—¿No deberías quemarte? —preguntó al ver la piel del primo de Johann intacta y según su conocimiento, los vampiros no-diurnos deberían brillar con el sol e instantánea les debería quemar.

—Johann me colocó un encantamiento de protección para el sol —mintió pero al parecer Zack le creyó porque asintió sonriendo ligeramente pensando que Johann era un muy bueno con su primo.

Entonces el nombrado salió de la carpa de color azul mientras trataba de peinarse sus rulos inconfundibles, lanzándole miradas asesinas a Christopher que sonrió nomas verlo salir.

—Ya te vas —dijo más como una orden, el vampiro levantó sus brazos en señal de inocencia y Johann miró a Zack con cara de "¿no regresó?" El alfa negó mirando al suelo.

—Aún me debes algo.. —murmuró tomando el brazo del híbrido que lo miró poniendo sus ojos en blanco al recordar que se había sentenciado el sólo al aceptar algo de Christopher.

—Mañana —Meyer falso pareció aceptar porque lo soltó y sonrió abiertamente hacia él.

—¡Hasta mañana! —exclamó e inmediatamente se teletransporto, alejándose de la vista de Johann y alejándose del olor a licántropo en el ambiente.

Johann miró a la fuente, dándose cuenta que Zack miraba curioso a la escultura en el medio, tratando de descifrar quien era.

—Hebe —aclaró y Zack lo volteó a ver confundido el movió su cabeza a la estatua para seguir—: Hebe era la personificación de la juventud, hija de Zeus y Hera, era la ayudante de los dioses en el Olimpo.

¡¿Tú?! © [BLACKVERSE #2] ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora