Raised by Wolves ©

Capítulo Veinte: Situaciones Incómodas.

N\A:

¡Hola, chicos! ¿Cómo estan? Creo que ya salí de mi bloqueo mental y todo eso, así que podré continuar publicando dos veces a la semana. Los vengo a invitar a que se pasen por mi nueva novela, se llama Rojo, como en venganza y la pueden econtrar el perfil. Así que, espero que les esté gustando como van las cosas entre Jayden y North (o exasperándose cada vez más, jaja), ¡las cosas cada vez se ponen más intensas! Muchas sorpresas y nuevas personas llegan del pasado. #Spoiler

Y bueno, eso es todo por mi parte. Espero que estén bien y gracias por su apoyo continuo, me siento genial cada vez que sus lindos mensajes :3

Los quiere, su amiga no-licántropa,
-Gi.

*********

-No quiero decir que crea que ellos fueron.- North agregó al ver mi cara. -Lo que quiero decir es que ellos serían nuestros principales sospechosos, y seguro como el infierno que iremos a confrontarlos si es así.

-North...

-Y en todo caso de que ellos fuesen los que mataron a Fury,- él me dio una gélida mirada, mientras caminaba hacia mi con parsimonia. -no tendré piedad con ellos.

-¡Estás hablando de mis amigos como sin fueran los criminales en esto, cuando bien sabes que Fury se lo merecía!- mi voz hizo eco en la gigante casa, y vi cruzar en su cara una chispa de sorpresa. Mi pecho subía y bajaba con rapidez, y los puños en lo que mis manos se habían convertido estaban temblando. -Él junto con Wrath me atacaron sin razón alguna, ¿por qué debería mostrarme simpática ante eso?

Hablar sobre el licántropo me hacía recordar las asquerosas imágenes del lobo muerto, siendo carroñido por insectos y aves, ese asqueroso olor dulzón de la putrefacción. Lo que me ponía enferma nuevamente.

No tenía estomago para tal situación.

Llevé una mano a mi vientre, doblándome cuando las arcadas amenazaron con hacerme vomitar sobre el reluciente y recién pulido piso blanco. North se acerco con cautela, quitando mi cabello fuera de mi cara.

-Por favor no vomites. No creo que a Agnes le agrede limpiar eso.

-¿Quién es...- tomé una fuerte respiración, sintiendo las náuseas alejarse mientras olía el bosque en la esencia de North. -...Anges?

-Nuestra ayudante de servicio.

¿Tenían una ayudante de servicio? Eso sí que era desbordar dinero.

-Eres suciamente rico, ¿sabías?

-Trabajo, Jayden. Puedo hacer lo que quiera con mi dinero.- replicó sin emoción.

Lo podía imaginar. Su único trabajo era mover un dedo para que sus súbditos hicieran el trabajo sucio. Ser el alfa traída ventajas.

-Puedo ver...

-¿Necesitas algo? ¿Comer? ¿Beber?- preguntó con voz más suave.

-Necesito una ducha.- estoy apestando a vómito, en tu hermosa casa, y frente a ti. Joder, incluso aunque no quiera verte me pone en una situación embarazosa estar de esta manera.

-Una ducha entonces será.- antes de que pudiera moverme por mi misma, North me estaba tomando en sus brazos y cargándome con su fuera una niña. Automáticamente me tapé la boca, evitando que mi asqueroso aliento llegara a su cara tan cercana a la mía y mi otra mano se enrolló en su cuello. Mechones de su cabello negro y sedoso rozaban mis dedos.