𝗾𝘂𝗲́𝗱𝗮𝘁𝗲, 𝗁𝗈𝗌𝗌𝗅𝖾𝗋

13

El origen de mi molestia bajó de las
escaleras y fue cuando Jaden
sospechó. Me miró con los ojos
entrecerrados mí y luego a su papá.

 —¿Fue él?  —volvió a susurrar en mi oído.

 —Por favor Jaden, hablemos en
otro momento —supliqué en un susurro,
viéndolo a los ojos.

Solo asintió con la cabeza y en cuanto
el señor Hossler  tomó asiento
el desayuno fue servido. Y así el
desayuno transcurrió en una plática
familiar donde ni el Señor Pablo ni
hablábamos.

Por las miradas de Jaden, sabía
que quería saber que estaba pasando
y no me equivoqué, ya que terminado
el desayuno de mis manos lo más
rápido posible.

— Nosotros nos marchamos ya que
tenemos trabajo y vamos tarde, si
desean que nos veamos otra vez, llamen
a mi hermosa secretaria y ella arreglará
todo —dijo apresurado Jaden.

 —Fue un placer querida — habló la Señora
Raquel desde su lugar.

 —El placer fue mío —respondí
cordialmente saliendo del comedor con
Jaden.

Y el camino no fue nada interesante,
pues nadie habló. Y me sorprendió
que Jaden no me atacara con
preguntas, pero era lo mejor. Tenía la
poca esperanza de que ya lo hubiera
olvidado. Aparcó enfrente de mi
edificio, rompiendo mis pensamientos.

 —Tienes 40 minutos para llegar a
la empresa, se puntual Elena— dijo
con aquel tono frio que asustaba a
cualquiera.

Tengo un jefe bipolar.

 —Está bien — dije y me baje del carro, sin
decir más.

Veinte minutos después ya estaba lista
para salir caminando de mi edificio. Me
había cambiado el vestido por algo más
"formal". Mi caminata fue de lo más
normal, y sin darme cuenta ya estaba
frente aquel edificio.

***

Sin saludar a nadie, entré. Subí al
último piso y me encontré con aquella
sonrisa radiante.

 —Bienvenida Elena —saludó Claudia.

— Hola Claudia- Saludé.

 —El jefe me dijo que en cuanto llegaras
pasaras a su oficina— me informó.

 —¿No dijo para qué?— pregunté.

Ella negó con la cabeza. Tomé valor y
me encaminé a su oficina.

Toqué la puerta y un sexi "adelante" fue
dicho.

 —¿Quería hablar conmigo Señor Hossler ?— pregunté en cuanto entré.

Su mano señaló el asiento frente a su
escritorio, indicándome que tomara
lugar.

 —Basta de formalidades Elena, eres mi
novia y me llamaras Jaden— dijo su
tono de voz frio.

Solo asentí con mi cabeza.

 —Me dirás en este momento porque en la
mañana estabas tan molesta —ordenó.
Mierda, no se había olvidado.

 —No creo que sea lo más correc... —
empecé a decir, pero fui interrumpida
por mi jefe.

 —No pregunté si era correcto o no.

Tomé aire lista para hablar.

 —Tu padre sospecha de nosotros, ya
que en la mañana antes de bajar al
comedor, me exigió que le dijera que
pasaba entre tú y yo, y que me estaba
dando la oportunidad de decirle la
verdad para irme, porque él piensa
que no soy lo suficiente para ti. Y me
molesta el hecho de que piense eso de
mí. Si esto falso o real no es su maldito
problema — me molesté mientras
narraba los hechos.

Él tomó la cabeza entre sus manos.
Lucía desesperado.

 —Necesito hablar con él, porque no

tiene derecho a dos cosas: Cuestionar
mi relación y hablarte de la manera en
que lo hizo. Si tenía algo que arreglar,
primero tenía que hablar conmigo — dijo
mientras se ponía de pie y caminaba
hacia mí.

 —Tranquila, esto no volverá a pasar—
mencionó mientras tomaba mis manos
y me obligaba a ponerme de pie.

Nuestros rostros casi rosaban, sintiendo
la respiración del otro. Y note que el
era más alto que yo, ya que
bajaba un poco la cabeza para verme
a los ojos aparte que tenia unos ojos hermosos, unos labios deseables.

Sin darme cuenta nuestros rostros
se empezaron a acercar de manera
inconsciente, como si un imán nos
atrajera.

«Final del capitulo»

Ay hOla geNte.👋
AdivinEn qUe mE gusTa deJarlEs cOn la intrIga .