𝗾𝘂𝗲́𝗱𝗮𝘁𝗲, 𝗁𝗈𝗌𝗌𝗅𝖾𝗋

37

La primera entrada estaba servida.
Solo comíamos en silencio. Nadie decía nada, todos estaban concentrados en degustar tan maravillosa cena, sin
embargo, yo no había probado ni un
bocado. Los nervios me habían cerrado el estómago y me habían hecho pensar muchas cosas.

-¿No vas a comer?- preguntó Jaden
susurrando a mi oído.

-No tengo tanta hambre-respondí.

-Por favor, esta buenísimo. Solo prueba
un poco- pidió.

Suspiré. Tome un poco de la comida y la lleve a mi boca.

Poco a poco el delicioso sabor me
invadió. Si que estaba buenísimo.
Y por arte de magia, el hambre había
regresado.

-¿Para cuándo está planeada la boda?-
preguntó el tío de Jaden.

-Será en dos meses- respondió
Jaden

-Será por el civil y por la iglesia, ¿cierto?
- ahora habló Tyler -Tienes que ser
legalmente casado para heredar la
empresa

-Obviamente así será. Dejen de creer
que todo esto es una farsa- respondió el abuelo Bruno.

Y regresó el silencio.

Los platos ya habían sido retirados. La
comida por fin había llegado a su fin.

Nadie había dicho nada desde que el
abuelo Rafael había aclarado las cosas
y le agradecía mucho, no tenia ganas
de escuchar la discusión entre los dos
primos.

-Pablo, Alessandro y Jaden
acompáñenme a la oficina- dijo el
abuelo Bruno mientras movía su silla
de ruedas.

-Ahora vengo- mencionó Jaden en
mi oído, acto seguido me dio un beso en la mejilla.

Me sonroje. No era normal para mi
mostrar afecto enfrente de las personas,
y menos con la familia de mi "novio".
Los hombres se retiraron, y nos
habíamos quedado solo las mujeres,
bueno, con Tyler.

-¿Puedo usar su baño?- pregunté
poniéndome de pie.

-Claro que sí. En el pasillo a la tercera
puerta- aclaró la mamá de Jaden.

-Gracias- y comencé a caminar.

De verdad esta casa podía ser un
laberinto. Tardé un poco, pero había
encontrado al fin el baño, entré en
aquel cuarto y sin exagerar, era más
grande que la sala de mi apartamento.
Si esto solo era el baño, ¿Cómo estará el patio trasero?

Me lavé las manos. Alcé la cara y miré
mi reflejo.

Solo un poco más Elena.

Decidí salir del baño, pero en cuanto
abrí la puerta, una figura masculina no dejo que siguiera con mi camino.

Tyler

-Tú no vas a ninguna parte-dijo y
después nos encerró a ambos en el
baño.

-Déjame salir- pedí de manera firme. Su cuerpo se interponía entre mi cuerpo y
la puerta. Seria imposible incluso abrir
la puerta por fuera.

-Primero hablemos de mi primo y tu-
comenzó -Di de una buena vez que todo esto es una mentira, y déjame el camino
libre, preciosa-

-Todos están esmerados en que esto es
una mentira, ¿Qué te hace creer que
estamos mintiendo? - pregunté.

-¡Por favor! No sabíamos de tu
existencia hace un mes, y cuando
el abuelo dice las condiciones,
apareces- exclamó. Sino desviaba esta
conversación, acabaría mal.

-Es eso, o ¿aun no entiendes que tu no
vas a tener esa empresa? Acéptalo, no
eres suficiente para hacerte cargo de
algo tan grande- intentaba provocarlo,
tal vez así se movía de la puerta.

Su cuerpo reaccionó a mi comentario.
Los músculos de cuello y brazos se
tensaron, sus manos se hicieron puños y su rostro no parecía muy contento.
Si daba miedo, pero no tanto como
Jaden furioso.

-No juegues con fuego, porque te vas
a quemar- dijo mientras se empezaba
acercar a mí. Se había movido de la
puerta, pero comenzaba a acorralarme
contra la pared.

Carajo, tenía otro problema.

Su cuerpo chocó conmigo, sus manos
me impedían salir de ahí y se rostro
estaba muy cerca del mío. Podía sentir su respiración y oler su caro perfume.

-Yo ya me he quemado en el infierno-
dije y entonces clavé mi rodilla en
su entrepierna. Su cuerpo se dobló
del dolor, esa fue mi señal para salir
huyendo de ahí. Cerré la puerta a
mis espaldas y comencé a caminar
rápidamente por el largo pasillo.

Miraba para atrás, cuidando que
Tyler no saliera del baño. Sin darme
cuenta choqué con otra persona.

-¿A dónde tan aprisa?- preguntó
Jaden. Mi cuerpo agitado no
ayudaba en nada.

-Solo fui al baño- respondí -Mejor
vámonos a la sala- lo intenté jalar del
brazo, pero el solo se quedó estático.

-¿De ese baño?- señaló la puerta de
donde venia saliendo Tyler.

No respondí. Tyler se acercó a
nosotros.

-Mejor cuídala, no queremos que
vuelva a pasar-dijo pasando junto a
nosotros. Ni siquiera se detuvo y siguió
directo a la sala.

¿Qué volvería a pasar?

-Es hora de irnos-habló Jaden .

No pude decir nada, pues me estaba
llevando directamente a la salida.

-Pero tus padres- dije intentado
detenerlo.

Pero me ignoro. Ni siquiera se detuvo
y siguió caminando a la puerta. Me
lastimaba del brazo, pues estaba
ejerciendo mucha fuerza.

-Jaden -me quejé.

Salimos de la casa y comenzamos a
caminar al auto. El dolor en mi brazo ya era insoportable. Justo cuando llegamos
a la puerta del carro, me detuve.

-¡Me lastimas!-grité.

Entonces fue cuando comprendió lo
que me estaba haciendo. Me soltó y
ambos notamos la gran marca roja
que estaba ahí. Me hice para atrás
automáticamente.

-Elena- habló, pero solo me alejaba más
de él -Perdóname, no era mi intención-

-Llévame a mi casa- pedí enfadada. Él abrió la
puerta del auto bien apenado.

Narra Jaden

Habíamos llegado a su apartamento,
y de verdad me sentía muy culpable.
La había lastimado por culpa de mis
impulsos.

-Gracias por traerme-dijo ella muy enfadada en
cuanto llegamos a su puerta.

-De verdad perdóname- pedí.

-Nos vemos el lunes-dijo ignorando mi
comentario.

-Hasta el lunes-me despedí derrotado. Ella entró a
su apartamento y antes de que cerrara
la puerta, la detuve.

-¿Qué pasa?- preguntó ella
desconcertada.

Era hora de contar mi historia.....

«Final del capítulo»

Me despido .Arios y no c olviden de votar bolas de coco . 👋
Ahrequedecia