Déjenme Morir Como la Villana

capítulo 44: Eliseo Halley (2).

“ así que tu eres Eliseo Halley ”

Sonrió al saber su nombre.

De los cuatro pretendientes de Dulcinea, Halley es el más problemático aparte de Aran, él quien es mitad elfo, fue descubierto en la Academia por Dulcinea, quien después lo protege junto con los otros tres idiotas.

Fue uno de los primeros de los cuatro que escuche, el primero del cual me enteré.

“ ... ¿Sabes de mi? ”

Observo su rostro sorprendido y dejó de sonreír por instinto, era la primera vez que estaba de frente con Halley, pero me había decepcionado al saber que aquella apariencia que todos describían como perfecta.

Solo era bastante normal y no daba esa aura que los rumores decían, parecía un noble cualquiera, solo que era más bello que el noble común.

“ por supuesto, aunque no conocía tu apariencia, y ahora que se como eres... Creo que me desiluionaste, la mayoría de los elfos de la Academia son hermosísimos, entonces... ¿Por que tu no? ... ¿No que tu belleza era divina?... ¿No la comparaban con la diosa del amor? ”

“ ¿que?... ¿Mi belleza? ”

Su Iris se volvió pequeña, de alguna forma su expresión estaba más confundida que antes y me de tuve de hablar, al darme cuenta que había dicho los rumores de antes de regresar.

Mi vista se dirigió hacia un lado y observe a Drake que estaba mirándome con una sonrisa, al ver tal escena mi corazón latio un poco más fuerte y desvíe mi mirada.

¿Por que me miro de forma tan tierna?...

“¿lady Bethania?... ”

Al escuchar que me llamaban, mis ojos se dirigieron hacia la voz.

Halley estaba mirándome fijamente.

“ ... ¿Sobre sus planes? ”

“... Sigues siendo un desconocido Elíseo Halley, ¿por que debería de contarte si no confío en ti? ”

Había una razón del por que no podía confiar plenamente en Halley, y era su relación con Larisa.

Larisa y él han estado comprometidos desde los ocho, eso es mucho tiempo para que él conozca a Dulcinea y planeen algo en mi contra.

No es seguro confiar en lo que puedo decirle o lo que me diga, al menos se que puedo confiar un poco en él, por Silva que esta de mi lado.

“ ... Leila, no soy alguien de quien debas tener cautela, quiero que confíes en mi. Tenemos el mismo objetivo y el mismo enemigo, solo quiero salvarte a ti y a mis seres queridos ”

“ ¿el mismo enemigo? ”

“ ... Si, Dulcinea no es la única que quiere hacerte daño ”

Suspiro al escuchar a Halley.

Tenía alguna idea de que quizás Dulcinea no era la única que estaba buscando desaserce de mi, pero no había pruebas que aquello fuera cierto.

“ entonces... ¿Tu debes saber quienes son, no? ”

“ ... ”

Se quedó callado, con la mirada abajo, su rostro cambiaba de expresión mientras pasaba el tiempo, al ver que no hablaría durante un buen tiempo, suspire y comencé a comer mis verduras.

“ ... ¡Leila! ”

Una voz aguda grito mi nombre, por ello gire levemente mi rostro para ver quien era, y aquello me desánimo.

Claudia Bruna estaba enfrente de mi mesa, con su brillante cabello rubio y sus ojos únicos color esmeralda.

“ Claudia... ”

Dije su nombre con un poco de desagrado, había pasado tiempo que no la había visto, después de que le dije que no me buscara si no tenía una muerte dolorosa para mi.

“ ja!.. Pensar que nos veríamos otra vez, ¿no dijiste que no nos viéramos más? ”

“ .... ”

Me quedé callada al ver su sonrisa burlesca y sus ojos que me miraban como basura, Claudia había aprendido a mirar a las personas en menos, y por alguna razón aquello hacia latir mi corazón.

“ ¿que?.. ¿Te sacaron la lengua? ”

Sentía por alguna razón mis mejillas calientes, era extraño que me gustara esto, aunque me estaba tratando casi igual que mi madre.

“ ... No... Espera, deja tranquilizar mi corazón ”

“ ¿que esperé?... ”

“ ¡Leila! ”

Mire hacia otra parte para no toparme con la mirada de Claudia que hacia latir mi corazón, cuando un grito proveniente de atrás mío me exalta y terminó levantándome de la silla, para caer al suelo.

“ ... Eso dolió... ”

Mire hacia arriba mío y sin querer mis ojos se encontraron con los de Claudia, ella se sonrojo y salió corriendo gritando que era una idiota.

Por ello quede estupefacta ante la escena que acababa de pasar, no comprendía por que ella había salido corriendo de esa forma.

“ Leila, ¿estas bien? ”

La voz de Drake sonó al lado de mi oreja, lo mire al ver que estaba ayudándome a pararme y observe como casi todos los que estaban dentro del restaurante miraban donde estabamos nosotros.

“ si, lo estoy... ”

Cerré mis ojos y intente tapar lo más que pude mi rostro, estaba avergonzada de lo que había pasado recién, no había forma de que no llamara la atención si cada vez que estaba comiendo, alguien hacia una escena.

“ Drake... Vámonos... ”

Le dije en un susurro y comencé a caminar hacia la salida yo sola, al llegar a la puerta, espere a que los otros dos salieran.

“ ¿conocias a esa señorita, Lady Bethania? ”

Asiento a la pregunta de Halley, quien salió despues de Drake.

“ era alguien quien me molestaba, pero paro después de que le dije que no me molestara más si no planeaba asesinarme ”

Observe el rostro de Halley y me mostro una expresión de sorpresa al escuchar mi frase.

“ no diga tales palabras... Habrá algunas personas que se lo tomarían enserio ”

Detuve mi caminar y lo observe, él se detuvo a algunos pasos más y se giro para verme.

“ ¿cree que es broma? ”

Le sonrió al terminar mi pregunta, una vez más su expresión cambio a asombró, por ello me acerque lentamente a él hasta quedar a un paso de Halley.

“ ... ”

“ ahora... ¿Que tipo de muerte me daría usted? ”

La Iris de Halley temblaba y algunas gotas de sudor se mostraron en su rostro.

Mi sonrisa traviesa había aparecido sin avisar y río un poco al ver que él no reaccionaba a mi pregunta.

“ ... Le diré mi forma de morir favorita, para que lo piense... ¿Usted sabe que tan cálido y satisfactorio, es morir en una hoguera? ”

“ ... El escuchar la madera quemarse, que el olor a tu carne te llegue a tu nariz y que el dolor en tu cuerpo quemandose sea la mayor excitación que hayas tenido... Tal muerte... Es mi favorita ”

Mire a los ojos de Halley y mi mano tocó suavemente su mejilla, sentía su cuerpo temblar y sus labios se habían vuelto pálidos.

“ ¿sabe la satisfacción de morir, Sir Halley? ”

Sus ojos que tiemblan al mirarme estaban fijos en mi rostro, sentía mis mejillas cálidas y mi corazón latía al recordar aquel momento antes de morir, mis labios sonreían y por alguna razón, Halley no dijo nada.