Déjenme Morir Como la Villana

Capitulo 21 : Carta (2)

"Leila.. "

La carta todavía me tenia con las dudas, puesto que solo Drake y algunas personas, bueno... La reina de los espíritus y tormenta sabían solo de mi muerte. Observo al frente y mire a un Drake mirándome fijamente.

"Leila, ¿me estas escuchando? "

Le asiento y le prestó atención, justo ahora estaba en mi habitación con Drake, es el único lugar seguro en el que podemos hablar tranquilamente, todo por culpa de los tres idiotas que me siguen para todas partes.

"Te hablaba sobre nuestro compromiso, hable con mi padre y dijo que estaba de acuerdo, solo si ibas a conocerlo "

"Entonces podemos ir en las vacaciones "

"Si, le dije que te llevaría en las vacaciones. Aunque posiblemente nos tome un poco más de tiempo volver, puesto que iremos a hablar con la reina de los espíritus también, ¿no? "

"Si, dejemos esta conversación para antes de irnos. Quiero mostrarte algo que nuestro maestro me entregó "

Saque la carta de mi bolsillo y se la entregue con el sobre, observe como Drake mostraba distintas reacciones. Sin embargo su ultima reacción fue una de felicidad y sorpresa.

"se de quien es esta letra... es de mi maestro, parece que nos esta ayudando "

"entonces, Larisa realmente nos ayudara "

"¿hablaras tu con ella? "

"... .. "

Me quedo en silencio y le asiento, seria la primera vez que hablaría con Larisa. Tenia un poco de curiosidad sobre esta carta y gracias a Drake supe quien me la había enviado, estaba un poco preocupada, pero al final solo era ayuda que habíamos recibido. Sobre Larisa estaba un poco insegura de hablar, pero no tenia otra opción.

"bien, después de que hables con ella juntémonos. Estaré un poco ocupado con las clases y los asuntos del compromiso, te dejare a cargo eso, si necesitas mi ayuda o protección solo envía a tu bestia a avisarme, vendré inmediatamente a tu lado "

"esta bien, y espero que nos comprometamos luego "

"¿? "

Observe de reojo el rostro de Drake y había confusión en su expresión, solo me rió un poco y observo como sale de mi habitación.

°°°

Habían pasado dos días, hoy era 10 de Tagos, estábamos en la estación de otoño, muy lejos del día de mi muerte y muy cerca a la vez, faltaban tres meses para que el año se acabara y comenzara nuevamente mi tercer año en esta academia. Y hoy me encontraría con Larisa para hablar con ella, iba por los pasillos hacia el salón, al llegar a la entrada me quedo parada un momento en la puerta y observo la situación dentro del salón.

"Deja de en culpar a los demás por cosas que no han hecho "

"LEILA BETHANIA ME HA ESTADO MOLESTANDO DESDE EL PRINCIPIO Y ¿TU LA PROTEGES? "

Larisa y Dulcinea se encontraban discutiendo, dulcinea estaba gritando y con lágrimas, mientras que Larisa respondía de forma cortes y tranquila, daba un aura de noble elegante al solo mirarla, al observar esta situación me quede ahí parada sin moverme, no quería entrar y tampoco quería que se dieran cuenta de mi presencia.

"Leila! "

Sin embargo nada va como quiero hoy en día, había escuchado como alguien grito mi nombre desde atrás mio y había observado como todos los que estaban dentro del salón se dirigieron a mirarme. Esto cada vez se parece menos a una novela romántica, y eso desde que el principio pensaba que quizás podría escribirla y morir en paz.

"... .. "

Hubo un silencio, no lograba ni siquiera escuchar mi respiración, solo escuchaba mis latidos que pasaban lentamente y unos pocos pasos acercándose a mi. Observe como Dulcinea me observaba fijamente y Larisa estaba sorprendida por la situación quizás.

"¿puedo saber por que escuche mi nombre? "

Pregunte a todos los presentes y ninguno abrió la boca para responderme, los miraba y ellos a mi, cuando observe a dulcinea y sus lágrimas comenzaron a correr mas exageradamente y a sollozar mientras sus piernas caían al suelo y ella quedo sentada llorando.

"Leila, ¿que pasa por que no entras? "

"¿paso algo? "

"¿que sucede? "

Escuche la voz de mis tres seguidores atrás mio, giro mi cabeza para verlos y todos se quedaron parados ahí, ninguno me miro, solo dirigían su mirada al frente y observe como los tres se colocaban enfrente mio mientras entrábamos al salón.

"TODO ES TU CULPA... ELLOS DEBERÍAN DE ESTAR CONMIGO, ¡NO CONTIGO! "

Dulcinea me estaba gritando, estaba un poco confundida sobre esto. Mire al rededor y todos tenían una expresión de sorpresa, parecía que ellos tampoco comprendía muy bien todo el escándalo que hacia dulcinea.

"¿ellos?, ¿te refieres a estos tres? "

"¡SI!, SI SOLO HUBIERAS MUERTO ANTES "

Muerto antes... me acerque a ella y tomo con mis dos manos su vestido cerca de su cuello y acerque su rostro al mio, estaba un poco sorprendida por sus palabras, pero estaba mas enojada.

"entonces tu tienes que ver con mi muerte "

La mire fijamente a los ojos y ella al decir esa frase, solo se encogió y comenzó a mirar hacia otra parte. Estaba enojada, había apretado un poco mis dientes y tenia solo ganas de golpearla en este mismo momento, pero mi enojo fue quitado al sentir una mano en mi hombro.

"sera mejor que salgamos a fuera. Lady Bethania, Dulcinea "

Observe a la persona que había tocado mi hombro y era Larisa, la mire un poco y solté a dulcinea para girarme y comenzar a caminar a la salida.

"Las espero en el hogar del dragón, si no llegan mandare a alguien para que las vaya a buscar y no saldrán ilesas de eso "

Al terminar de decir eso salí del salón y comencé a dirigirme al hogar del dragón, tenia a los tres idiotas siguiéndome en silencio. Me detuve un momento y me gire para verlos de frente.

"¿puedo pedirles un favor? "

"... .. "

No escuche ninguna respuesta de parte de ellos, se quedaron mirándome, resople y sonreí. Sabia muy bien que ellos no me responderían, solo estaban esperando que les dijera el favor.

"¿pueden buscar a Drake y decirle que vaya al hogar del dragón, él solo?, después de decirle necesito que ustedes vayan a clase y me den sus notas sobre la clase para no perderme la materia "

Les sonrió por eso y los tres asintieron, ellos se giraron, para comenzar a caminar y perderles de vista del pasillo, al ver como su silueta ya no estaba comencé a caminar hacia el hogar del dragón.