Capitulo 20 : Carta (1)

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"Aran Jacinto.. ¿crees que haga algo, en contra de ti? "

"no lo creo, pero tampoco podemos estar seguros. Aran es capaz de matar lo que mas atesora su persona favorita "

"... ah~.. ¿como es que con viviste con ese loco? "

"no fue por que quisiera "

"pero te hiciste amiga de él y ni siquiera te diste cuenta de que le faltaban algunos tornillos "

"tenia ocho años y él nueve "

"já, ahora utilizas la edad como escusa "

"... mph "

Gire mi cabeza para dejar de mirar a Drake y escuche como solo él suspiro, suspire igualmente y volví a mirarlo, solo había pasado como mínimo una semana y ya estaba llena de problemas.

"Tormenta, ¿quien le hizo aquello a Dulcinea? "

Al decir eso en voz alta, una parte de mi sombra se separo de mi y de ella comenzó a parecer mi bestia, al estar completo él me reverencia un poco. Lo miro de reojo y espero a que me de la respuesta a mi pregunta.

"sobre eso maestra.. "

"solo di lo y ya "

"... fue la misma persona que hizo el escándalo y se hizo pasar por víctima "

".. ¿te refieres a Dulcinea? "

"si, maestra "

"mm.. "

"parece que esa chica no tiene nada de santa "

"nunca pensamos que lo tuviera "

Suspire, sabia perfectamente que Dulcinea no era la santa de la que pensaban que era como esos tontos. Pero tampoco pensé en la posibilidad de que Dulcinea se hiciera todo ella misma, mire a Drake y estaba mirándome fijamente.

"nos quedaremos sentados por el momento, primero esperemos que pase un poco de tiempo, no creo que sepamos todo inmediatamente "

"entonces.. ¿por mientras solo las vigilaremos? "

"no hay nada mas por hacer... Tormenta, quiero que vigiles todos los movimientos de Dulcinea, si pasa algo extraño deberás avisarme inmediatamente "

"como ordene "

""sobre Larisa.. "

"utilizare mi mascota para vigilar la "

"bien, solo esperemos y se revelara todo "

Tanto Drake como Tormenta me asintieron, Tormenta después se fue de la habitación para cumplir mi orden y Drake se fue hacia su dormitorio, me levante del sofá y camine hacia la ventana, observe un bello atardecer de color anaranjado.

"esto si se parece a ese día... " 

°°°

Ya habían pasado cuatro meses, tanto Larisa como Dulcinea no se hablaban y los ataques hacia Dulcinea no pararon. Tormenta me informo sobre todos ellos y logre no verme involucrada en la situación, por el momento los rumores de Dulcinea sobre siendo molestada por Leila Bethania fueron sofocados por los rumores de que alguien desconocido ataca a Dulcinea, pero a nadie le importa. También lo que mas cambio fue mi grupo, ahora Blas, Jordan y Venus pasan todo el día conmigo, me siguen hasta la entrada del baño de mujeres.

Lo que no se hablo fue mi compromiso con Drake, decidimos programarlo para hablar sobre eso este mes y poder casarnos lo antes posible, por ahora mi vida se ha vuelto mas pacifica de lo que había esperado.

"¡Leila! "

"¿donde vas? "

"¡MIERDA!... ¡DEJEN DE SEGUIRME! "

Había gritado en el pasillo, justo en este momento iba a la sala de maestros por que nuestro tutor me llamo y quería hablar conmigo... pero Blas, Jordan y Venus me seguían estando cinco pasos de distancia, ni siquiera Drake me sigue hasta este punto.

"pero Leila, si Dulcinea aparece te acusara de que la estas molestando "

"¡ENTONCES SIGAN LA A ELLA! "

"no me interesa otra mujer, mas que mi amiga "

Me respondía Jordan y dejaba de mirarme, sus mejillas se tornaban con un leve color rojo . Observe a los tres y suspire, los rumores sobre que estos tres ya no seguían a Dulcinea fueron los mas polémicos, sin embargo ahora yo soy su centro de atención y todos están fijos en mi.

"¡no seré mas tu amiga! "

"seamos amantes mejor "

"¿¡QUE!? "

"Hey!, yo quería decir eso. Te me adelantaste Blas "

"no sean tontos, Leila no los aceptara a ninguno de ustedes "

"AH!, entonces. ¿dices que te aceptara a ti? "

"Bueno... eso es decisión de ella...  "

Me quede mirándolos un rato por lo sorprendida que estaba, después de pensar que eso ya lo había vivido, observe a mi alrededor y recién me había dado cuenta de que estábamos en el pasillo y con hijos de los nobles paseándose. Mire el suelo y suspire nuevamente, nunca había querido que esto pasara, todos los que tenia enfrente mio los había tratado mal y los quería lejos de mi, pero ellos hicieron lo contrario.

"Lady Bethania "

Escuche mi apellido y me gire para ver quien era, ahí estaba el tutor de nuestra clase, camine hacia él y deje que los otros siguieran peleando. Me detuve a unos tres pasos de distancia y agarre lo que el profesor me estaba entregando.

"¿una carta? "

Me despedí del maestro después de que me entrego la carta y comencé a observar el sobre. Tenia mi nombre, también tenia un sello extraño, no era uno que conocía. Así que abrí el sobre y saque la carta, para comenzar a leerla.

"... .. "

Me quede en silencio, la carta contenía información sobre mi muerte y algunos detalles sobre mi familia. No contenía remitente y al finalizar la carta decía que nos veríamos luego, la letra no era una particular que conociera y no se parecía a ninguna que haya visto.

"... esto me tendrá ansiosa hasta un día antes de mi muerte "

Suspire por haber murmurado esas palabras, gire la carta y encontré un poco mas de texto atrás, eso me sorprendió y me dejo mas en duda desde que supe que Dulcinea intentaba acusarme falsamente. 

"Larisa Pía te ayudara "

Murmuré nuevamente y esta vez mas bajo, ahora menos comprendía. Desde siempre dude de Larisa, pero nunca había sentido una extraña vibra alrededor de ella, mas bien era suave y acogedora, y cuando siempre le preguntaba a alguien sobre que pensaba de Larisa me respondían.

- Lady Pía es muy amable.

Lady Larisa es un ángel.

- Lady Pía, es muy linda y tranquila. Ella nunca le haría daño a alguien.

"Leila "

Al escuchar que me llamaban, oculte la carta y me gire rápidamente para verlos, los tres me miraban sorprendidos y solo les dedique una sonrisa, comencé a caminar para comenzar de nuevo el juego de 'seguir a Leila'. ¿Cuando podre tener una vida personal oculta, nuevamente?, me preguntaba para intentar caminar lo mas rápido, para alejarme de todos. 

Déjenme Morir Como la VillanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora