3o Parte

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Al intentar Aylim, a través de la bola de cristal, de cómo iba a ser la campaña de la agencia, esta llama a  una amiga, de otra agencia que iba ha competir. Pero la idea, su plan se vino abajo, cuando él, dijo ella no le gustaba, y hizo que se la llevaran. Aderen, la coge, y se la llevó a su despacho. Por otro lado, Leyla y Embre, están juntos, y parecía que podían tener una bonita relación con él. Aquel acercamiento, podría ser el inicio. Mientras tanto, Can, y Sanem, van a un lugar donde ponen bocadillos de pescado. Mientras que Leyla y Embre, están viendo una serie, Osman llama, pero lo corta sin saber de quien era la llamada.
Ayham y Geygey, van a su cena, pero sólo él habla de las nutrias. Que no entendía lo que quería decirle. Y al intentar, cogerle de la mano, vuelca la vela, acabando metiendo fuego en la mesa del restaurante, acabando echandoles fuera. En ése mismo momento, Musafer, intenta abrir la puerta de su casa, pero al poder, llama a un experto en abrir las puertas. Pero de pronto, Aysum aparece, golpeando a Musafer, y tirandole al suelo. Ahora mismo, Leyla y Embre, están juntos en el jardín de la casa de Can.

-- Si hubiera girado, se había dado cuenta de todo. Pero, no lo hizo. Era muy emocionante.
-- Siempre, se cae? Qué, divertido.
-- Sí que era divertido. Cómo rodó, esa película? Las películas de acción, pueden estar llenas de escenas, son exageradas. Pero aquel, ya era, exagerado.
-- Es verdad.
-- Es la hora, de la crítica del cine? -- interrumpió él.
-- Jaja. Sí, señor Can.
-- Hola.
-- Hola, Embre.
-- Estuvimos viendo una serie, y luego, hemos pasado, a una película.
-- Eso es una buena forma, de entreteneros. Te veo, mejor.
-- Sí. Gracias, a ella.
-- Tengo que irme. Se ha hecho, tarde. Y usted, tieneque descansar. Debe de estar, cansado--!dijo Leyla.
-- Vale. Hasta pronto, enfermera.
-- Ja,ja.
-- Muchas gracias. Has sido, muy amable, quedandote con él-- dijo él.
-- No hay, de que. Es un placer. Buenas noches.
-- Te acompaño.
-- Gracias.

-- Pero qué, haces? Qué te has puesto? -- le preguntó Mezquive, a Nihad, que salió, con un camisón de ella.
-- Pues no lo sé. Eso quería, preguntarte.
-- Anda, quítate eso. Quítate eso, por el amor de Dios-- dijo Mezquive, riéndose.
-- Vale. Pero dime? Qué quieres, que me ponga, entonces? Qué no he encontrado, mí pijama limpio en el cajón.
-- Ahh...porque está, sucio.
-- Eso. Lo vi esta mañana, en la cesta de la ropa sucia, y ahora vuelvo, y está ahí.
-- Y qué, hago? No he tenido tiempo. Todos han venido, con los problemas del barrio. Y cuentan, conmigo.
-- Sí...Mezquive. Y yo también vivo, en éste barrio. Pero muy cerca, de ti. También quiero, que me ayudes.
-- Holaaaaa, mamá. -- interrumpió ella--papá-- dijo ella, al ver a su padre. -- Qué, pasa?-- preguntó.
-- Tenemos problemas. Una emergencia. Anda, preguntaselo, a tú madre?
-- Sabes una cosa? Tú también, podrías hacer la colada, de vez, en cuando. Tienes lavadora, ropa, detergente, y suavizante. Ah...que ni siquiera sabes, donde está to.
-- Vale, Mezquive. Voy ha lavar, ha cocinar, ha lavar, los platos, ha limpiar la casa, y hacer la colada. Y tú, serás, el marido-- le dijo furioso.
-- Nihad...
-- Papá...
-- No me interrumpas. Se acabaron, las interrupciones. Soy el cabeza de familia. Soy el más, importante. Respetadme.
-- Uuuhhh...Nihad -- dijo Mezquive, tocándose el pecho.
-- Ten cuidado. -- dijo ella.
-- Es que, ya está bien. La presidencia, de la asociación, es una cosa. Y otra, estar en casa.
-- Deberías tener, cuidado. -- dijo ella.
-- Y dale, con cuidado. Con qué, tengo que tener cuidado?
-- Papá!
-- Nihad...cierra, la boca-- le dijo Mezquive, con un gesto.
-- Ah... El voto, de silencio-- dijo ella, dando una palmada. -- te lo dije. Ojalá mí hermana, estuviera aquí. Ella sabe lo qué es hablar su idioma. Yo entiendo algo, pero son expresiones básicas, papá.
-- Ahhh...Mezquive, Mezquive. No me hagas caso. Es que me ha dado, un calentón. Claro que puedo hacer la colada, una vez metí la ropa en la bañera, y le di un palo. Así se quedó la ropa, superlimpias y relucientes.
-- Déjalo. Es demasiado grande. -- dijo ella.
-- Ahhh, no te preocupes. Ya me encargaré de todas las tareas del hogar. Y cuando veas la casa, verás que está como nueva. Mezquive, Mezquive, Mezqui...?-- Mezquive, no respondía y estaba de morros.
-- Mezquive, no está disponible. Inténtalo de nuevo, más tarde-- dijo ella.
-- Llámala, otra vez. Mezquive, Mezquive, Mezqui...?
-- Ah! Comunica. -- dijo ella.
-- Comunica, otra vez. Mezquive, Mezquive, Mezquive.
-- Da tono, pero no responde. Mejor, dejadla tranquila. Vamonos de aquí, poquito, a poco. Venga. Tú deja que relaje. Ven conmigo y sigueme. Vámonos  --dijo ella, escurriendose bajo la mesa.
-- Mezquive...No responde-- dijo Nihad, levantándose de la silla.

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