2a Parte

663 12 0
                                    

Sanem, que se creía ser culpable de que Can fuera detenido, decide ir a hablar con Fabryk, para pedirle que retirarse la denuncia, a cambio de su perfume, y Fabryk accede. Eso sí, con la condición de que él, no se enterarse de nada. Sin embargo, todo eso, es una trampa para hacer que la agencia quiebre con Aylim dentro, como espía. Por otro lado, Nihad, que había escuchado la conversación de Mezquive, con Menahad, decide coger su ropa e irse de la casa entre los cotilleos de la gente del barrio.
Ahora Mezquive, llega a la tienda, con un taper de comida.

-- Qué es, todo esto? -- preguntó Mezquive, al ver toda la ropa por el suelo.
-- Solo es mí ropa. No es nada, de tu incumbencia.
-- Cómo has conseguido, sacarlas de casa? Te han ayudado, las niñas?
--No...aún tengo las copias de mis llaves, Mezquive. Pero si quieres, puedo devovertelas.
-- Así que planeas, quedarte aquí, una temporada.
-- Sí...gracias a ti.
--Qué culpa, tengo yo? Acaso, te he echado de casa? Fuiste tú, quien se mudó a la tienda. La gente, ha visto todo esto. No te da vergüenza, verte así?
-- Ah...Así que crees que debería sentirme avergonzado, eh?
-- Tu estás intentando desprestigiado, mi imagen, en éste barrio.
-- Pues yo, creo lo contrario. Te oí cotillear, por teléfono hacia mí. Dijiste que ya no podías aguantar más, mis caprichos.
-- Pues es que yo quería decir, que...
-- Pues dijiste, que ya estabas harta de mí. Te lo oí decir, con estas orejitas. Eh, Mezquive? Te enteras?
-- Es que ya estaba furiosa, porque me estabas sacando de mis casillas.
-- Buenos días, Nihad. Vengo, a por los callos.
-- Sí...Aquí, los tienes. Pero pedí, por tres. Se os olvidó, mandarmelo.-- dijo Nihad, mientras que Mezquive, se los comían con los ojos.
-- Es que, no nos quedaba nada.
-- No os quedaba nada? Está bien, no pasa nada.
-- Hasta luego.
-- Sí...gracias, adiós.
-- Así que estás encargando platos, a restaurantes, primeros, segundos y postres? Veo que tenías decidido, vivir sin mí, hace mu...cho tiempo. Lo tenías, muy bien organizado. Y yo...qué te traía un pastel, porque creía, que tenías hambre. Qué idiota eres, Mezquive. -- se dijo.
-- Pues sí. Tengo hambre. Tengo mucha hambre. Pero tengo hambre...de sinceridad. Es un pastel, de espinacas?
-- Mm, sí. Pero si tienes hambre, de sinceridad, no te hace falta, mí pastel. Sigue pidiendo comida, a los restaurantes. No pienso, preocuparme por ti. Haber si ellos, te preparen esto. Adiós-- dijo Mezquive furiosa, saliendo de la tienda.
-- La verdad, es que estoy lleno. No necesito, tu pastel de espinacas.

-- Toma esto, cielo. Uff, que ricos que están. Me los como, todos. Me encanta, el pescado que cocinan aquí -- dijo ella.
-- Sí...le ponen mucho cariño, a la comida. Lo hace todo, con amor.
-- Sí...con mucho, amor.
-- Sí.
-- Can... Me preocupé mucho, sabes? Cuando te vi, detrás de esos barrotes, es como si yo misma, estuviera dentro. Como pueden meter, a un albatros, en una jaula?
-- No pienses mas, en eso. Sabes que es lo que mas me preocupaba?
-- Que?
-- Tu.
-- Porqué?
-- Porque...estaba preocupado, por ti. Me preocupaba que te culparas, a ti misma.
-- Es que fui, mi culpa. Yo fui, quien trajo a Fabryk, aquí.
-- Por favor. No menciones, a ese nombre.
-- Las piedras de luna, se rompieron.
-- Y bien?
-- Bueno. Yo fui quien rompió, las piedras de luna. Nos traía, buena suerte. Y ahora, por mí culpa, han perdido, su poder.
-- Sanem...Olvídate, de eso. Mi piedra de luna. Mi ángel de la guarda, eres tú. No te preocupes. Todo va a estar bien. No va a pasarme nada. Ahora quiero, abrazarte, muy fuerte.-- dijo abrazandola.
-- Sí, abrazame. Y no me sueltes, nunca.
-- No lo haré. Nunca, te dejaré. Y si te suelto, mi corazón, seguirá aferrado a ti. Los corazones fuertes, nunca se abandonan.

-- Me alegro, de que hayas salido temprano-- dijo Osman.
-- Hoy todo el trabajo, se ha paralizado, por lo que ha pasado con el señor Can. Así que, me he ido, antes.-- dijo Leyla.
-- Bien echo. Cómo es que le han soltado? Ese italiano, era muy obstinado.
-- Lo sé. Pero resulta, que hay gente, mas obstinada que él. Aylim...ya la conoces. Descubrió un negocio turbio, de Fabryk y lo chantajeo. Así que consiguió, que le traspasara las acciones de la agencia.
-- Aylim? Os ha traspasado las acciones? Aylim? La qué, conocemos?
-- Sí. La ex novia, de Embre. O novia. No lo sé. Bueno...me da igual. Lo importante, es que Fabryk, haya desaparecido.
-- Pero Aylim...ha vuelto...a la agencia. Eso no, te preocupa?
-- Sí...Aylim, es la nueva accionista de la empresa. Pero yo...solo soy, una empleada. El señor Can, y Embre, se ocuparán de ella. Lo único que me preocupa, es Sanem. No quiero, que sufra. No quiero que mí hermana Sanem, lo pase mal, por culpa de él.

 Soñando Contigo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora