23.

1.4K 163 11
                                    

- Aún no lo creo, esto es muy gracioso, deberías ver tu cara ahora mismo, Chaeng. - se dejó caer de espaldas a la cama riéndose sin parar de mi
                     
- ¡Para ya, Lisa!
                     
El fin de semana había llegado a paso veloz, así que estaba disfrutando de él en compañía de la persona más castrosa del mundo. Resulta que luego de estar insistiendo por media hora con que le contará como me fue hace unos días en mi cita no cita terminé aceptando y le conté todo lo sucedido, incluyendo la parte de como me volvió a friendzonar Jennie.
                     
- Maldición, deja que mamá se enteré.
                     
- ¡Ni se te ocurra decirle a Ann, Lisa, porque te juro que te mató! - le advertí - Ahora deja de reirte, eres molesta y te odio.
                     
- Awww, pobre Chaeyoung bebé.
                     
- Déjame sola, idiota. - extendí mis piernas contra el cuerpo de la rubia que seguía burlándose de mi y la tiré de mi cama.
                     
- ¡Chaeyoung! - se quejó
                     
___________________________
                     

Narrador omnisciente.
                     
Residencia Kim, Nashville.
             
El auto color negro se detuvo frente a la enorme casa color blanca que correspondía al número 765 de una de las zonas más caras de Nashville. Casa la cual era habitada por Kim Ji Chul y cuatro de sus hijos.
                     
- ¿Por qué estamos aquí?
                     
- Necesito arreglar unos asuntos pendientes con un viejo amigo. ¿Me acompañas o te quedarás aquí?
                     
- Prefiero quedarme aquí.
                     
Sin decir nada más al respecto el hombre de traje color azul marino se bajó del auto, arregló su corbata y caminó hasta la puerta.
                     
Nashville era el único lugar al cual tenía considerado no regresar jamás en toda su vida, pero luego de recibir aquella carta anónima de un tal "N" decidió que era buena idea venir a buscar respuestas personalmente.
                     
- ¿Isaac?
                     
La sonrisa que se formó en su rostro al oír su nombre era sin duda de enmarcar. Esa sonrisa ladina que tantas veces había hecho cuando era joven regresó a su boca.
                     
- Hola, Ji Chul.

__________________________

Rosé's P.O.V
                    
Lisa continuó molestándome un buen rato más hasta que su padre la mandó en busca de Luca, quien milagrosamente había salido temprano de su entrenamiento de fútbol y necesitaba que alguien lo llevará a su cita con el dentista para continuar con su tratamiento.
                     
Al principio fuí yo quien se ofreció amablemente a ir por él, y el motivo principal era porque tenía la intención de darme una escapada y ver a Jennie, sin embargo Marco dijo que necesitaba mi ayuda en algo que Lisa no sabía controlar: la cocina.
                     
- ¿Cómo vas con esos ahorros? - me preguntó Marco tirando el tómate que había estado picando en la sartén - ¿Crees tener suficiente para tu auto?
                     
Hasta hace unos días había decidido que en esta ocasión no usaría mis ahorros para cambiar de ciudad, si no que más bien los usaría para comprarme un auto, así ya no tendría que estar pidiendo el auto de Lisa prestado para salir.
                     
- Bien, creo. - di un salto hacia atrás al sentir como el aceite brincaba sobre mí - Maldición.
                     
- Nunca tires la chuleta de golpe, Chaeng. - tomó la espátula y volteó con cuidado aquel maldito pedazo de puerco que me había tirado aceite caliente en los brazos - ¿Ves?                                  
                       
- ¿No sería mejor hacer esto en el asador que está en el jardín? Es menos peligroso, ya sabes.

it girl [chaennie]Onde histórias criam vida. Descubra agora