Capítulo 53

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Rebeca

Me aleje de Dylan lo más rápido que pude. Él seguía en la cama sentado, mirándome con desilusión, más bien con una expresión de que ya se esperaba lo de mi reacción.

—¿Entonces con quien quieres hacerlo? —pregunte aterrorizada. Me cubrí la boca con ambas manos y no pude sentirme más tonta. ¿Cómo que no quería hacer esto conmigo?, ¿por no ser lo suficiente?

Dylan se colocó de nuevo su playera tranquilamente mientras yo me lamentaba y avergonzaba aun sentada sobre el acolchonado.

—No puede ser—me reí irónica—Soy una idiota por venir contigo, de conocerte y... —al verlo mirándome con una ceja arqueada, tome una almohada y se la lance para borrarle tal gesto—Eres un maldito, O'Neal.

Estaba por tomar mis cosas cuando siento que él toma mi cintura, solté mi mochila y estuve a punto de darle un merecido golpe pero él tomo mi muñeca en el aire, y la otra la sujeto por si se me ocurría hacer algo. Pego su cuerpo con el mío, acorralándome en la pared de su habitación cuando me hizo retroceder algunos pasos.

—Quiero hacerlo contigo—vi como paso grueso y volvió a mirar mis ojos estando incomodo por el tema—Pero no ahora. No así.

Fruncí el ceño.

—¿Conmigo?...¿pero no ahora? Pero si yo estaba dispuesta, idiota.

Una sonrisa se escapó de sus labios.

—Sí, pero...no eres otra del montón, no quiero tener sexo contigo...contigo haría el amor...quiero que sea en un momento mejor...algo especial. —de nuevo paso grueso, me gustaba que para ser romántico conmigo le costara. Oh, Dylan.

—¿Y si te aburro?

—No necesito hacer ese tipo de cosas como para estar satisfecho de nuestra relación, si quiero estar contigo es porque me gusta estar contigo...no te busco por tus pros o tus contras. Solo...tu.

Afloje mi fuerza en y el agarre de mis muñecas.

—Creo que el solo estar contigo, y que sea contigo, sería el momento especial, ¿no crees? —aporte yo. Probando si de verdad él era el chico que esperaba en mi vida.

Dylan se acercó a mis labios algo dudoso, como si yo fuera a rechazarlo. Pero al ver que no me moví, entonces beso mi boca muy suavemente. Un beso cortó.

—No por ahora... —susurro.

Mire la hora del reloj en la pared que estaba en el escritorio de Dylan: 11:00 pm, y me encamine a su cama sin decirle nada y levante las cobijas para meterme debajo ellas hasta que me cubrieran por los hombros. Cerré los ojos.

Sonreí cuando sentí que alguien se acostó a mi lado, y después una mano deslizarse por mi cintura hasta pegar su cuerpo al mio. La respiración de Dylan se sentía en mi cuello.

—¿Estas enojada? —pregunto. Gire el rostro para encontrarme con el suyo.

—No...solo estoy...pensando.

Entrelazo los dedos de su mano con la mía y recargo su mentón en mi hombro.

—Andas muy pegadizo—reí un poco y pude sentir como besaba mi hombro sonriendo.

—No muy seguido puedo tenerte en mi cama y abrazarte así.

Suspiré.

—O simplemente lo hacer para que no me enoje contigo por lo ocurrido.

—No. Se cuándo estas enojada, cariño. —hablo, enredando nuestras piernas en una guerra por conseguir la calidez del otro.

—¿En serio? —pregunte y el hizo un "mhm"—¿Como soy cuando me enojo?.

Intocable ➳ DO'B©Where stories live. Discover now