Capítulo 28

73K 4.5K 1.1K
                                    

Rebeca

Dylan me miro con total tranquilidad, pero aun así pude detectar un dejo de sorpresa. Una sonrisa de lado se asomó por sus finos labios y sus ojos castaños demostraban un brillo especial, uno color miel.

— ¿Qué quieres que seamos? —me pregunto sereno.

Nunca separe mi mirada de la suya. Pero ahora era yo la que me cuestionaba, ¿qué es lo que en realidad quería ser yo de Dylan? Solamente sabía que quería ser más que una amiga, quería que la gente me viera a su lado y supieran que él era mío, pero no quería lastimarlo y no quería lastimarme, porque eso es lo que pasa con las parejas jóvenes.

Sonreí avergonzada, y aunque nadie más se percatara de ello: un nudo en mi garganta se hizo presente.

—No sé... —agache la cabeza para ocultar cualquier señal de angustia en mí—Es complicado ahora que lo veo de cerca, tener una relación no es un juego, y puede ser realmente cliché o cursi...pero quiero alguien con quien pueda pasar el resto de mi vida atada a él. Y si no, quiero que sea algo inolvidable.

Él suspiro y se sentó mirando para la cancha, me sentí bastante patética, ¿qué tal si ahora me cree tonta o se enojó conmigo?

Deje mi emparedado de lado, el cual no había probado casi nada,

—Lo siento—susurre demasiado suave, porque ni la voz me salía—pero no creo que estés dispuesto a hacer eso por alguien como yo.

Dylan despego su mirada del frente para mirarme a mí.

—¿Por qué? —preguntó frunciendo el ceño de una forma confusa. Lamí mis labios después de apretarlos juntos en un gesto de nerviosismo.

—Mírame... —coloque un mechón de cabello detrás de mi oído—no tengo una vida perfecta y tampoco lo soy: depresiva por dentro y doble cara ante los demás—sonreí en mi sitio de una forma sarcástica—No es que le mienta a los demás sobre quien soy, no del todo, pero es difícil fingir que estas bien por fuera cuando por dentro te sientes una basura. Suelo demostrar que estoy bien cuando todo se derrumba, y finjo que lo que pasa a mi alrededor no me lastima...Dylan, mis padres están a punto de divorciarse y esta vez es por definitiva, nunca he tenido un padre y no sé qué es lo que implica uno, y ahora que lo tuve de cerca no me dejo un buen sabor de boca. Mis expectativas para una pareja son diferentes. Puede que quiera estar contigo, pero tienes que prometerme que durara, y si terminamos, que no me lastimaras hasta el punto que quiera yo misma desecharme.

Dylan me sonrió de una forma suave, como si comprendiera mi dolor y estuviera de acuerdo conmigo. Me encantaba que me sonriera, porque solo lo hacía conmigo, de una forma me hacía sentir espacial.

—Creo que somos igual, pero opuestos. ¿Por qué me cuentas esto?

—¿Cómo?, ¿Por qué te lo cuento?, ¿acaso no debía?

Ahora él se sentó de nuevo como yo estaba, ambos nos mirábamos.

—No es eso, solo quiero saber por qué me lo contaste.

Pensé las cosas, probablemente él no lo decía porque no le interesaba para nada mi vida. Dijo que éramos parecidos, y lo que yo siento es que solo quiere confirmar que nos tenemos confianza.

—De alguna forma, me agrada tu compañía—conteste—y siento que tú me comprendes...aunque a veces eres un dolor en el trasero—le codee por aquello—Pero siendo maduros: veo que tú ya has pasado por algo así...tal vez algo donde te hayas sentido a ti mismo despreciado y por eso te comportas así.

Intocable ➳ DO'B©Where stories live. Discover now