Capítulo 58

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El tono de mi celular me sobresaltó, haciendo que dejara las cosas de la mudanza que sostenía en mis manos y casi corriendo dirigiéndome hacia donde se encontraba.

Efectivamente, era un mensaje de voz y sabía perfectamente de quién se trataba.

Era más de media noche y no podía dormir, me sentía como un hueco… sin corazón y alma.

Llevé el móvil a mi oreja, tomando asiento en la cama.

El mensaje comenzó a reproducirse, y la música era tan alta que casi no podía entender lo que decía.

Después de varios minutos, el mensaje llegó a su fin y yo me encontraba en shock ¿Qué carajos había sido todo eso?

Un sentimiento de preocupación me inundó por completo, Michael estaba en un estado etílico bastante avanzado y aunque no quisiera admitirlo, temía por él.

Y como la gran tonta y masoquista que era, le devolví la llamada. Contestó al segundo tono.

-¡___!- exclamó demasiado alegre

-¿Dónde mierda estas?- pregunté directamente, apretando mis labios

-En un bar, duh- me respondió, arrastrando exageradamente las palabras.

-¿Qué bar?- pregunté, sabiendo que me arrepentiría de esto a la mañana siguiente

-¿Vendrás a buscarme?- preguntó juguetón, casi logró sacarme una sonrisa por su tono de voz… casi.

-¿Dónde está tu maldito culo, Clifford?- pregunté más ruda, tratando de sonar molesta. Pero la verdad es que con cada palabra que salía de su boca, borracho o no, me ablandaba el corazón ¿Por qué debía de ser tan confuso todo esto?

-Un bar cerca de la casa de tu abuelita, bebe… pero no estoy seguro, la verdad- comentó divertido, lanzando una risa incoherente. Rodé los ojos.

Hace apenas un día me encontraba en esta ciudad y ahora debía buscarlo en un bar y no tenía idea de hacia dónde ir o qué calle tomar, pero no me importa, porque lo iría a buscar.

Y lo haría por dos estúpidas razones fundamentales: la primera, me preocupo más por su bienestar que por el mío. La segunda: lo amo, así de simple. A pesar de que me rompa el corazón cada semana, nuevamente es él el que vuelve a unir las partes, es el único que me hace sonreír por horas con sólo llamarme “amor”, y es el único chico por el que estaría dispuesta a hacer cualquier cosa.

Pero estaba demasiado confundida, porque ni siquiera sabía lo que quería y eso era un maldito gran problema.

Hace tan sólo unas horas estábamos follando y diciendo que nos queríamos, luego discutimos y lo mandamos al carajo todo, y ahora aquí estaba yo vistiendo el traje de heroína para ir a salvarlo… y sabía que lo dejaría abrazarme de nuevo toda la noche mientras dormíamos.

Pero simplemente así era y así se sentía, y no podía hacer o decir nada al respecto.

Todo esto fue tan complicado desde el principio y lo seguía siendo ¿Pero quién dijo que sería fácil? ¿Quién dijo que esto era imposible?

Los sentimientos y la razón definitivamente no iban de la mano, y yo a lo largo de estos meses perdí la coherencia.

Si pudiera tener un borrador mágico, borraría a Nicole de la historia.

Pero puedo conseguir un arma y… sólo bromeo.

Pero no sería justo sólo culpar a esa maldita perra cuando en primer lugar, fue Michael quien se acostó con ella aquella vez cuando no lo consiguió conmigo.

Michael's groupie? | mgcWhere stories live. Discover now