Capítulo 19

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La ducha de agua caliente me había relajado un poco. No quería seguir con este tema de Michael y las putas con las que folla porque al final de todo él estaba aquí conmigo, había volado horas y horas para estar conmigo, conmigo y con nadie más, y estaba segura que esto no lo haría si yo no le importara, y yo sentía que le importaba, le importaba más de lo que pensaba y eso me hacía feliz, inmensamente feliz.

Me vestí con un vestido casual azul, digamos que amaba usar vestidos. Era un poco corto pero tenía un estilo de niña inocente. Me coloqué perfume y solté mi cabello, que caía en ondas. Me senté en la cama esperando a que Michael terminara de ducharse. Después de varios minutos lo hizo. Cuando su mirada encontró la mía sonrió, dando grandes zancadas hasta llegar a mí. Se posicionó encima de mí, tumbándome en la cama haciéndome reír, dejando besos húmedos por todo mi cuello, se separó de mí no sin antes besar desesperadamente mis labios, definitivamente nunca me cansaría de hacer esto.

Se acomodó bien la toalla que tenía atada por la cintura y se dirigió hacia donde estaba su equipaje, rebuscó algo y cuando finalmente lo encontró me miró y sonrió ampliamente

–Cierra tus ojos- pidió, rodé los ojos y obedecí. Sentí como se posicionaba en frente de mí –Puedes abrirlos- susurró.

Obedecí de nuevo, abriendo mis ojos lentamente. Solté un grito cuando vi que me extendía el disco de 5SOS autografiado por todos los integrantes, Michael se echó a reír. Tomé el disco en mis manos y lo pegué a mi pecho, abrazándolo

–Ey ¿qué es lo que te causa tanta gracia?- dije entrecerrando mis ojos

–Eres demasiado tierna- agregó riendo. Reí y le di un leve golpe en su hombro–Ey- se quejó, riendo aún

–Esto es un gran detalle Michael, gracias- se encogió de hombros y se acercó a mí, pasando sus brazos por mi cintura

–Qué te puedo decir, tienes suerte de tenerme- dijo jugando

–Soy afortunada- sonreí.

Me separé de él y me tiré en la cama a observar detalladamente los autógrafos, pasando mis dedos por encima de cada firma

–Bebé, hemos follado como unas 10 veces pero comienzas a gritar cuando te doy un disco con mi autógrafo- rió, reí con él

–Calla, que estoy aguantando no echarme a llorar o a gritar por la emoción- confesé, el se sentó a mi lado, tomó mi mano y se la llevó a los labios, depositando un delicado y tierno beso en ella

–Nunca cambies amor- susurró

Amor

Amor

Amor

Amor

Me sonrojé, ese momento no podría ser más perfecto.

Michael's groupie? | mgcWhere stories live. Discover now