Bloody Drops || Nomin

Introducción

El mundo y lo que las personas creían saber de este podía cambiar de un día para el otro. De hecho, podía ocurrir en tan solo un segundo. Eso había ocurrido el 30 de Junio del 2002 en la ciudad de Yokohama en la final de una copa mundial que compartía locación en Corea del Sur y Japon.

Habían sido semanas de una gran tensión, turistas internacionales y una cobertura de los medios de nivel mundial. La tierra misma había estado observando aquel evento televisivo deportivo de gran alcance. El resultado había finalizado con Brasil ganando por sobre Alemania en un partido más que extenuante.

Nada hubiera estado mal si no fuera porque durante las celebraciones posteriores fuera del enorme estadio las cosas se hubieran salido de las manos debido a algunos fanáticos que habían bebido una cantidad excesivamente elevada de alcohol y que, dicho sea de paso, no fue del todo legal. Las cámaras captaron lo que en un comienzo fue el inicio de una pelea normal entre dos aficionados de equipos adversos pero las cosas se distorsionaron rápidamente en un parpadeo.

Los ojos tornándose rojos y los colmillos creciendo de las encías del europeo causaron los gritos de horror de muchos espectadores. El desenlace fue terrible, el otro ni siquiera tuvo una oportunidad cuando se lanzaron sobre su cuerpo y los afilados dientes desgarraron su cuello. Un asesinato captado en cámara pero eso ni siquiera lo fue todo. El enardecido hombre solo pudo ser detenido por algunos de sus compatriotas quienes mostraron los mismos y sobrenaturales rasgos.

El video fue visto en cada país del mundo bajo una enorme y terrorífica primicia. Los cuentos de hadas no eran solo cuentos y entre ellos caminaban seres que en la antigüedad se los llamaba como muertos vivos salidos de una historia terror. O en palabras más sencillas, vampiros.

Fue un escándalo, el terror llenó las calles pensando en que cualquier individuo podía ser un monstruo. O así era como los humanos les catalogaban, presos del miedo y una palpable ignorancia.

Ni siquiera eran como figuraban en viejos relatos. No se quemaban con el sol, no rechazaban el ajo y otras torpes creencias. Eso causó mayor temor pues los humanos no conocían forma con la cual pelear contra esos seres.

Aquel primer infractor, y por quien el gran secreto había sido sacado a la luz, fue aprisionado. Durante los primeros días se buscó sacarle tanta información como fuera posible pero tenía más resistencia al dolor de lo que pensaban y los sujetos a su cargo no pudieron estar seguros de si eso podía llegar a morir, así que debían de mantenerse en un nivel bajo para no arriesgar al sujeto.

Se buscó su nombre, familia o algún dato pero todo se borró antes de que alguien pudiera saber algo. En cuestión de horas, quien estuviera por encima de él le había convertido en nadie.

Se creyó que ese iba a ser su destino pero el mundo volvió a ser sacudido por un fuerte golpe cuando un abogado se dispuso a hacer un trato para él. La comunidad vampírica, representada por una de las familias más antiguas registradas, iba a ofrecer información sobre su raza mientras que aquel hombre fuera liberado y entregado a ellos para el correcto castigo bajo sus propias normas.

No fue sencillo pero las personas estaban dispuestas a entregar a un asesino a cambio de la información.

No hubo una verdadera oportunidad de dialogo, el mundo debió de conformarse con lo que se le dijo. Vagas historias sobre sus remotos origines que partían desde la misma concepción del hombre y también algunas rupturas en base a los mitos sobre ellos. Como el de su supuesta inmortalidad, ellos nacían, crecían y morían como cualquier otro ser en la tierra, la diferencia radicaba en su longevidad. Su cuerpo envejecía mucho más lento y podían llegar a vivir hasta seis veces más que el ser humano promedio.