11

4.1K 585 778
                                    

Durante lo que restó de la semana no volvió a ver a Haechan. Eso le angustió un poco pero Mark y Chenle le dijeron que, si había sido citado con el concejo, era algo normal. Le aseguraron de que el menor estaba seguro y que nada le pasaría estando allí. No ayudó a cómo es que estaba sintiéndose.

Menos aun cuando no entendía qué se suponía que el concejo era. No lo diría en voz alta pero tenía un poco de vergüenza de preguntar sobre ello. Por la forma en la que hablaban de eso frente a él asumía que era importante y un dato que en realidad debería de saber pero estaba en blanco.

Bueno, puede que no tanto. Creía hacerse una idea de lo que era al menos con su nombre. Suponía que tenían que ser los sujetos que ahora impartían la ley entre ellos... o al menos esa era su conjetura más coherente.

Por otro lado, Jeno había aparecido realmente poco. Le vio apenas un par de minutos en cada día y, en su mayoría, solamente era para saber si había noticias de su hermano. Había ofrecido que almorzaran juntos pero este amablemente había negado aquello. Eso le molestaba pero no podía obligarle.

Había días en los que entenderle era realmente difícil y en más de una ocasión quería golpearlo por actuar de formas tan contradictorias. Haechan seguramente le diría que no le prestara demasiada atención porque nació idiota pero igualmente no le agradaba. Eso le tuvo bufando durante todos esos días.

Y ahora estaba allí, el viernes por la tarde abriendo algunas bolsas extra grandes de papas fritas mientras que podía escuchar a Jisung pelear con Yang Yang desde la sala. No estaba muy seguro pero creía que discutían sobre las reglas de un maldito juego de cartas. Honestamente le hubiera gustado poder estar sorprendido de ello pero no lo estaba.

Solían reunirse en su casa por lo general. En la casa de Jisung sus hermanos menores siempre estaban rondando y, aunque adoraba a los pequeños, muchas veces era un poco molesto cuando les interrumpían. Yang Yang vivía en una pequeña pensión por lo cual no era una opción. Y sus padres, mientras no rompieran nuevamente el televisor de la sala de estar, no tenían problemas en que se vieran allí.

Su teléfono vibró con la notificación de un nuevo mensaje sacándole de sus pensamientos. Llevándose una papa a la boca y limpiándose la grasa de la otra con su pantalón, se dispuso a ver quién era. Sonrió ante el mensaje de Ren Jun. Estaba mostrándole su nuevo violín y parecía emocionado de tocarlo pero aún se encontraba mal de la lesión en su muñeca. Según lo que le había dicho la última vez que se vieron en el café de siempre, los doctores no estaban seguros de cuando sanaría por completo y él no ayudaba haciendo prácticas que no debía con sus instrumentos.

Realmente no lo pensó mucho cuando terminó invitándole a su casa, el chico aún se encontraba un poco desanimado por no poder hacer lo que amaba y, aunque no estaba del todo seguro, parecía no tener más amigos en Corea. Le recordó un poco a Yang Yang en sus primeros meses allí y creyó que quizás este podría entenderle mejor para que pudiera adaptarse bien.

La respuesta afirmativa de que estaría allí en cuanto pudiera le hizo sonreír nuevamente y llevó los tazones con papas hacia la sala donde estaba por desatarse una guerra. Solo deseaba que los vecinos no vinieran a quejarse nuevamente de sus gritos.

— Muy bien, ustedes dos se calman. Vendrá un amigo y espero que no lo espanten en los primeros treinta segundos. — Dejó las papas sobre una pequeña mesa en el centro a la vez que los dos chicos se detenían en el acto al escuchar lo que estaba diciendo. —

— ¿Es uno de los vampiros? — Yang yang preguntó de inmediato, casi ansioso por la respuesta. Jisung a su lado solo suplicó que no fuera así pues no estaba preparado para ello. —

— No, no lo es. Traten de recordar los buenos modales que quiero creer que sus madres les enseñaron.

Yang yang fue el primero en quejarse diciendo que él sabía cómo comportarse perfectamente justo antes de eructar frente a ellos, ganándose las risas de los otros dos. Sí, no podía contar con ellos en cuanto a cosas como elegancia.

Bloody Drops || NominWhere stories live. Discover now