SOY UN IMPOSTOR

Capítulo 103

        Zhao Yu pudo escuchar la frialdad y la dureza en las palabras de Lu Wanghe a través del teléfono.

        Conocía mejor al artista que él mismo había criado, no se fijaba en el habitual aspecto sonriente y educado de Lu Wanghe, parecía que era muy educado y agradable.

        De hecho, una vez que se ha decidido o ha tocado fondo, nadie podrá persuadirle de que cambie de opinión, es tan terco que ni siquiera diez vacas pueden hacerle retroceder.

        Sus artistas pueden confiar en su fuerza, no en negocios sucios.

        Zhao Yu ralentizó su tono: "Entonces está bien, inmediatamente me pondré en contacto con la tripulación para rechazar ...... que, Xiao Lu ah, te dije que  cp este asunto, no se le deje saber ah Fu".

        La reacción de Lu Wanghe al enterarse del despido del cp es tan grande, y no digamos la del director general Fu.

        Tendría que tener su salario descontado durante unos meses después de descubrirlo.

        Lu Wanghe, que estaba en el altavoz, miró de reojo a Fu Jingmo.
El color frío del rostro del joven se había desvanecido un poco y sus labios estaban fruncidos antes de relajarse un poco.

        Cuanto más se piensa en Zhao Yu, aunque la propuesta de rechazar a un cp no es realmente buena, pero después de todo, desde el punto de vista de un gerente, por supuesto, la esperanza de que los más fans que tiene, más caliente es la persona, mejor, no hay nada malo en ello.

        Así que Lu Wanghe meditó una mentira: "No te preocupes Zhao, Fu no está a mi lado ...... no se lo diré".

        Un momento después, se dedicó a engatusar a los celos convertidos en gancho para perros.

        El olor de los celos casi se difunde fuera de su cuerpo Fu entrecerró sus ojos de fénix, levantó ligeramente las cejas y observó a su novio decir una torpe mentira sin decir una palabra.

        Zhao Yu dio un suspiro de alivio: "Eso es bueno eso es bueno ...... no está bien ah, ¿no te estás quedando en el mismo hotel con el Sr. Fu? ¿No comparte habitación contigo?"

        Lu Wanghe, que acababa de dormir con el gran gancho de perro en sus brazos toda la noche, no cambió su cara.

        "Por supuesto que no comparte habitación conmigo".

        "Oh, cuelgo entonces, iré mañana por la mañana a buscarte y te llevaré a los estudios Hengdian".

        Lu Wanghe vio que los ojos de Fu Jingmo se oscurecían unos grados y se apresuró a replicar: "No hace falta hermano Zhao, Fu Jingmo me llevará hasta allí".

        "Está bien, cuelga".

        Lu Wanghe dejó su teléfono móvil y se lo metió en el bolsillo del pantalón en cualquier momento, todavía interpretando mentalmente el guión, cuando oyó el "chisporroteo" de una silla que se retiraba.

        El joven alto y largo que estaba a su lado se levantó lentamente, dio dos pasos detrás de él, se inclinó cerca de su cuello, apretó las manos contra el tablero de la mesa y lo encerró completamente en sus brazos.

        "¿Cp. frito?"

        La voz grave parecía reír, y la cálida exhalación se derramó sobre la piel del cuello de Lu Wanghe.

        "¿No estoy a tu lado?"

        El tono de la cola bajó otros dos grados, casi ronco.