Play with me | Taekook

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Jungkook se encontraba en plena clase de inglés, pero simplemente no lograba concentrarse en nada que saliera de la boca del maestro. Tenía su cabeza apoyada en el escritorio, ya ni siquiera intentaba prestar atención, su mente no se encontraba presente. No podía dejar de pensar en lo que había pasado el día anterior con Taehyung, se sentía triste, pero también se sentía dolido; no había tenido problema alguno en esperar a que el mayor tomara una decisión, pero si desde el principio sabía que no podría estar con él por qué no lo rechazó desde un comienzo, así Jungkook no hubiera tenido tanta esperanza como la tuvo ayer. Se sentía de cierta forma traicionado, era probable que Taehyung tuviera sus razones para actuar de la forma en que lo hizo, pero eso no evitaba que se sintiera utilizado, como si todo este tiempo el castaño estuvo jugando con él.

Cuando el timbre sonó Jimin se acercó a él para que fueran juntos a comer, probablemente también en la compañía del rubio, pero el menor no tenía ánimos de compartir con nadie, así que se negó y ante la mirada confusa de su amigo, se excusó diciendo que se sentía cansado. No le había contado a nadie que había sido rechazado, no se sentía listo para que el resto opinara sobre como debería sentirse, solo quería estar en paz consigo mismo. Sin mayor insistencia el pelirrojo decidió abandonar la sala, Jungkook se quedó en la misma posición que estuvo gran parte de la clase para al final dejar escapar un pesado suspiro.

El resto del día se mantuvo igual de desganado para el pelinegro, incluso al llegar a casa fue directo a su cuarto para dormir, actitud que no pasó desapercibida para Jimin, quien insistió un par de veces en que le dijera que estaba pasando, pero Jungkook no tenía ganas de hablar, así que solo le pidió que lo dejara solo y luego hablarían.

Al día siguiente durante el primero receso el pelinegro decidió contarle a su amigo lo que había pasado con Taehyung, no le dio mucho detalle porque no quería hacer la situación incomoda entre ellos en el futuro, después de todo ellos seguían siendo amigos y sabía que Jimin podía ser sobreprotector con él, no quería que el pelirrojo tuviera algún rencor por el mayor. Pero ahora Jimin podía comprender por qué su amigo se encontraba tan desanimado, así que, sin forzarlo más, ese día también dejo al menor estar solo durante los recesos.

El día posterior Jungkook ya se sentía un poco mejor, aun se sentía dolido, pero ahora quería tener la compañía de sus amigos. Así que cuando llegó la hora del almuerzo siguió a Jimin hasta la cafetería, donde se encontraba Yoongi esperándolos.

- Vaya, estabas vivo. -comentó el rubio cuando los otros dos chicos llegaron a la mesa.- Ya te daba por muerto.

- Para tu mala suerte hyung, sigo vivo. -bromeó Jungkook.- Solo admite que me amas y estabas preocupado por mí.

- No realmente, Jimin me mantuvo al día de tu estado depresivo.

- Wow, ahora que oficialmente son novios ya no se guardan secretos, ya veo.

- ¿Acaso no es normal que pregunte por la rata mascota de mi novio?

Jungkook abrió su boca y llevó la diestra a su pecho, completamente ofendido frente a las palabras del mayor.- ¿Vas a dejar que me trate así Jimin?

Jimin soltó una risita y dio un pequeño golpe en el brazo de su novio.- Yoongi, no seas malo, no es mi mascota, es mi amigo.

- ¡Te faltó mencionar que no soy una rata! -se quejó el menor, haciendo al par reír.

- Como sea, por cierto Jungkook, ¿Has hablado con Taehyung? No ha venido hace tres días a clases, nunca había faltado tanto tiempo.

En cuanto el nombre del castaño salió de la boca del mayor Jungkook pudo sentir su corazón apretarse, quizás no sería tan fácil olvidarse de él después de todo. El menor pudo ver de reojo como Jimin le hacía señas a su novio para que se callara, pero el mayor parecía no comprender, así que solo se mantuvo observando al menor esperando una respuesta.