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Era ya casi medio día cuando el estómago de Jungkook comenzó a reclamar por algo de comida, aquella mañana había dormido más de lo debido y no tuvo tiempo suficiente para tomar desayuno, por esa razón se dirigía a la tienda de la escuela en busca de algo que pudiera calmar su hambre. Una vez cuando estuvo frente a la gran cantidad de golosinas y comida chatarra que el lugar ofrecía se tomó unos cuantos segundos para decidir que comprar, finalmente sacó una leche de plátano que tanto le gustaba, era lo mejor comer algo ligero o de lo contrario no tendría hambre a la hora del almuerzo. Ya con la botella en sus manos se encaminó de vuelta al salón.

Mientras caminaba miró la hora en su reloj, aún quedaban minutos antes de que la próxima clase comenzara así que se detuvo a mitad del pasillo, apoyándose sobre sus codos en una de los bordes de las ventanas que daba hacía el patio principal, lugar donde algunos alumnos se encontraba jugando un partido de football, se mantuvo mirando como jugaban mientras daba sorbos a su leche, simplemente porque no tenía nada más interesante que hacer. Estaba tan absorto observando como avanzaba el partido que no escuchó los pasos acercándose a su espalda, dejó escapar un fuerte grito cuando un par de manos se posaron en los costados de su abdomen al mismo tiempo que daba un pequeño brinco en su lugar, rápidamente giró sobre sus talones para encontrarse con Taehyung, quien claramente estaba conteniendo su risa.

- No creí que te asustaras tan fácil. -dijo el castaño dejando escapar al final una risita ahogada. El mayor alejó las manos de su abdomen y se movió hasta quedar a su lado, recostando su cuerpo contra la pared, en todo momento manteniendo la mirada en el menor.

- Eso no es cierto, solo estaba distraído. -se defendió Jungkook soltando un bufido, claro que se había asustado, su corazón palpitando más rápido de lo normal se lo recordaba, pero prefería pretender que nada había pasado.

- Si eso te hace sentir mejor.

- Que malo eres hyung. -se quejó abultando ligeramente sus labios, pero solo recibió otra risa como respuesta.- De todas formas, ¿Qué haces por aquí? Tu salón esta al otro lado de la escuela, tendrás que correr para llegar a tiempo a clases.

- Tranquilo, solo venía a la enfermería.

- ¿A la enfermería? ¿Por qué? ¿Te sientes mal?

- No me pasa nada Jungkook, solo tengo asuntos que atender ahí.

- ¿Estás seguro? -solo para asegurarse el pelinegro llevó su mano a la frente ajena, para confirmar que no tuviera fiebre, o quizás solo era una excusa para sentir al mayor.- ¿Acaso debería ser yo tu doctor esta vez?

- De verdad estoy bien. -la respuesta vino en un tono bajo, que probablemente no hubiera sido capaz de oír si hubiese estado más lejos, pero ahora toda su anatomía estaba a escasos centímetros del cuerpo ajeno. Fue entonces cuando su mirada conectó con la del mayor, su mano aun se encontraba sobre la frente del castaño, Taehyung no hizo gesto alguno de querer quitarla de ahí, Jungkook tampoco se movió.- De todas formas creo que serías un pésimo doctor Jungkookie, siempre te golpeas y lastimas.

Jungkook ahora bajó la mirada hasta los labios del mayor, que se movían mientras hablaba, y nuevamente vino a él ese deseo de querer sentirlo, el mismo sentimiento que experimentó aquella noche de sábado en su casa. Pero la diferencia caía en que no se encontraban en su casa, sino que en medio de un pasillo en una muy transcurrida escuela, así que decidió alejarse, en un intentó de calmar el calor que había nacido en la boca de su estómago.

- Que cruel eres Tae. -el pelinegro tuvo que aclarar su garganta antes de seguir hablando, su mano ahora descansaba a un costado de su cuerpo.- No soy tan torpe como crees.

Play with me | Taekookحيث تعيش القصص. اكتشف الآن