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Todos en la sala estaban en completo silencio, mirándose unos a otros, fue entonces cuando Jungkook se acercó a su madre para susurrarle que por favor se llevara al hermano de Jimin, la mujer estuvo de acuerdo con la idea así que le ofreció al niño ir a comprar algo, a lo que el niño si comprender que pasaba aceptó sin reclamar, quizás conseguía que la mujer le comprara algunos dulces. Una vez que ambos estuvieron abrigados dejaron la casa, dejando a los cuatro jóvenes en su interior.

- Creo que llegó el momento en que hablen. -rompió el silencio Jungkook, tomando a Yoongi del brazo para llevarlo hasta le sofá.

- No hay nada que hablar. -dijo Jimin a la defensiva. Pero Jungkook ya estaba harto de todo el drama entre sus amigos, así que no les dejaría más opción que aclarar sus cosas de una buena vez.

- Ya basta Jimin, si realmente quieres que volvamos a ser amigos debes como mínimo disculparte con Yoongi hyung. 

El mencionado solo observaba al peli naranjo, quien aun se mantenía estoico en su lugar.

- Por mi está bien. -pronunció el mayor de todos, soltando un pesado suspiro.- Jimin, por favor, tenemos que hablar.

Todos dirigieron su mirada al chico, esperado una respuesta, al cabo de unos cuantos segundos este asintió con la cabeza y se dejó caer sobre el sofá frente a Yoongi, entonces Taehyung hizo un movimiento de cabeza como indicándoles que era mejor retirarse y dejarlos solos, el menor acepto y llevó al menor hasta su cuarto, así tendría también la oportunidad de darle el regalo al mayor.

- Espero que puedan arreglar sus cosas. -comentó Taehyung una vez estuvieron dentro de la habitación, Jungkook se dejó caer sobre su cama dejando su mirada vagar por el techo.- ¿Qué piensas conejito?

- Que Jimin es un cobarde. -con su antebrazo cubrió sus ojos.

- ¿Un cobarde? -replicó Taehyung, tomando asiento a su lado, dejando centímetros de distancia  entre ellos.

- Sí, es un cobarde, por no aceptar lo que siente por Yoongi. -soltó, pero ¿quién era él para juzgarlo? él también era un completo cobarde, no era capaz de enfrentar a Taehyung y decirle lo que sentía por él, solo se guardaba sus sentimientos, solo por el miedo a ser rechazado.- Soy un hipócrita. 

- ¿Uhm? ¿Por qué dices eso? -Taehyung le miró con extrañeza, no sabía a que venia eso.

- Porque es la verdad. -con frustración se levantó de la cama, comenzando a moverse de un lado a otro dentro de la habitación.- No puedo decir nada de Jimin, soy igual de cobarde que él.

- Claro que no lo eres conejito.

- Si lo soy Taehyung, claro que si.

- Jungkook, ¿Qué sucede? ¿Por qué estas así? -el mayor se levantó de la cama para alcanzar al pelinegro, sujetándolo con suavidad por el hombro.

- Todo este tiempo le recriminé a Jimin su cobardía, pero soy igual que él. -comentó con rapidez, las palabras saliendo una tras otra sin descanso de su boca.- Claro que yo no traté mal a nadie, pero en el fondo es lo mismo.

- ¿A qué te refieres?

- Que soy igual de cobarde, no soy capaz de confesarme a la persona que me gusta porque tengo miedo a ser rechazado.

El silencio se instaló en el lugar, Jungkook miró directo a los ojos del mayor, estos decían algo que el menor no fue capaz de identificar ¿Tristeza? ¿Enojo? no estaba seguro.

- ¿La persona que te gusta? -preguntó el mayor, su voz sonando más grave de lo normal.

- Sí.

Otros segundos pasaron en completo silencio, Jungkook no sabía que más decir, pero se estaba comenzando a sentir incomodo. 

- Deberías decírselo... -murmuró Taehyung con voz suave, casi inaudible. 

- No puedo, simplemente no puedo, estoy seguro que me rechazará.

- No lo creo, cualquier chica caería rendida a tus pies Jungkook... -la manó que reposaba sobre el hombro del menor cayó, quedando a un costado de su dueño.- Eres un chico dulce y además atractivo, esa chica es afortunada.

- No es un ella hyung, es un chico.

- Oh.

Algo se sentía extraño en la habitación, Jungkook lo podía sentir, pero no era capaz de identificar que era, quizás sus nervios le estaban jugando una mala pasada y le hacían doble interpretar todo, quizá.

- Aun así, deberías decírselo, no es bueno guardarse sentimientos. 

Jungkook no sabía que hacer, se sentía atrapado en el borde de un precipicio, acorralado, sin muchas opciones, podía saltar directo al abismo, declararse a Taehyung y ser correspondido o rechazado, pero al menos sabría si rendirse si su amor resultaba ser unilateral. O podía guardar silencio y dejar todo como estaba, seguir siendo el amigo de su hyung, y quizás ver como él es feliz con alguien que no es él... esa opción parecía demasiado dolorosa, si era rechazado al menos sabría que debía rendirse, pero quedarse en esa incertidumbre del que pasaría si lo volvería loco. Debía armarse de valor, solo treinta segundos, para expresar todo lo que sentía. 

- Eres tu Taehyung. -soltó al fin, bajando un tanto la cabeza, lo suficiente para cortar el contacto visual con el contrario.- Tu eres la persona que me gusta, desde hace un tiempo, me gusta la forma en la que sonríes, como tu cabello siempre está un poco desordenado, el que seas tan listo pero tan amable a la vez... me gustas Taehyung, y sé que probablemente tu no te sientas de la misma manera que yo, porque vi como mirabas al doctor Byun, entiendo completamente si me rechazas, pero por favor, al menos seamos amigos.

Lo único que pudo sentir al terminar de hablar fue la carcajada que soltó Taehyung, ¿Se estaba riendo de él? ¿Eso significaba que no sentía lo mismo? Era obvia la respuesta, estaba siendo rechazado. Pudo sentir las lagrimas acumularse en sus ojos, pero no quería no llorar, al menos no frente a él. Cuando estaba a punto de derramar las lagrimas que estaba conteniendo sintió como el mayor lo rodeaba con sus brazos, de inmediato un gesto de confusión se instaló en su rostro.

- También me gustas conejito. -murmuró Taehyung sobre su oído.

Le tomó unos cuantos segundos al menor procesar las palabras que acaba de oír. ¿Estaba siendo correspondido? Aun con la sorpresa instalada en su rostro reaccionó lo suficiente para devolver el abrazo que el mayor le estaba dando. Se quedaron así un momento, fundidos en un cálido abrazo, pero entonces recordó la risa que el mayor había soltado.

- Espera. -dijo el menor alejando al azabache unos centímetros, lo suficiente para poder observarle el rostro.- ¿Por qué te reíste? 

- El doctor Byun es mi tío, no puede gustarme mi tío Jungkook.

El menor se sintió completamente avergonzado en ese momento, había sido un tonto al sacar conclusiones. Ahora entendía porque todo el mundo le llamaba torpe. Otra realización llegó a él, había sido correspondido, él le gustaba a Taehyung, fue entonces que su rostro ardió en colores.

- Eres adorable conejito. -fue lo que dijo el mayor al verlo tan sonrojado.

Aun sintiéndose avergonzado, Jungkook tomó otro poco de valor para tomar la mano del mayor y entrelazarla con la propia, sintiendo su calidez, ambos sonriendo ampliamente.

- Oh, acabo de recordar algo. -el menor soltó la mano contraria para ir hasta su escritorio y tomar el paquete que tenía ahí, volvió a pararse frente a el mayor extendiendo el regalo hacía él.- Feliz cumpleaños hyung.

- Muchas gracias Jungkook. -el mayor tomó el regalo, ambos con tímidas sonrisas en sus rostros.



*****

a que no se esperaba esto jaja no crean que lo apresuré para terminar pronto la historia, lo tenía planeado hace mucho, y tampoco crean que esto se va acabar luego, aun queda un poco de trama por desarrollar, esperen por ello~

extra fluff vkook para todes, gracias por siempre apoyarme a mi y a esta historia<3

nos leemos pronto!

Play with me | TaekookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora