A Dos Coronas de Ti

Capítulo 13

En ese instante, Alexia sentía una mezcla de ira y sorpresa con un toque de dolor por los malos recuerdos que vinieron a su mente nada más ver el rostro de Martijn.

-¿Qué estás haciendo aquí? -preguntó con enfado Alexia.

-Instalarme. Voy a estudiar aquí -respondió como si nada Martijn.

-¿Sabes que para poder estudiar aquí tienes que pasar una prueba de acceso y tener un mínimo de IQ, verdad?

-No te pongas tan agresiva, vengo en son de paz. Sé que la cagué en su momento, pero esta vez quiero hacer las cosas bien.

-¿Hacer las cosas bien? Tú nunca has hecho nada bien. Acéptalo Martijn, no estás hecho para las relaciones. No quiero saber nada de ti y espero que aquí tengamos el mínimo contacto, si es posible ni me saludes.

-He cambiado, te lo prometo. No me puedo creer que lo único que sientas por mí es odio, ni tampoco creo que me hayas superado tan rápido. A no ser que tengas a alguien más aquí.

¿Quién se creía que era este tío? Alexia alucinaba con cada palabra que soltaba Martijn, porque parecía que vivía en los mundos de Yupi. Se veía a relucir su comportamiento egoísta y egocentrista, al igual que su desinterés en los sentimientos de los demás.

En la lejanía, vio la silueta de Leonor, con su cabello rubio alborotado y su cara de desconcierto -estaría igual de confusa que Alexia-, observando la escena. No era muy probable que hubiera escuchado la conversación debido a la distancia a la que se encontraba.

La española se percató que Alexia posó su mirada en ella y salió corriendo para evitar que la identificara. Se fue de allí recordando la expresión de la holandesa, esa mirada de dolor... Era evidente que eran ex, pero algo en Leonor le decía que Alexia aún sentía algo por este chico y no descartaba que fuera amor.

No sabía porqué le molestaba tanto que alguien que fue importante en la vida de Alexia apareciera ahora. Sentía que con la llegada de Martijn, la pelirroja se iba a distanciar más de ella o no sería la misma de siempre, esa chica de ideas inimaginables, dramática y soñadora.

-S-se me olvidaba que había quedado con una amiga. Tengo que irme -Alexia conectó las neuronas cuando vio a Leonor salir corriendo, y sentía la necesidad de explicarle y aclararle quién era Martijn para que no tuviera una imagen errónea.

Fue corriendo tras ella y al no encontrarla en el patio principal, fue directamente al trasero donde habían bancos con vistas al mar.

Al llegar vio la cabellera rubia de Leonor y se acercó silenciosamente, para después pegarle un susto. La española pegó un chillido y aprovechó para pegarle un guantazo en el hombro de Alexia como acción-reacción.

-¿Qué haces estúpida? -le volvió a dar un golpe algo más suave en el mismo brazo mientras Alexia se reía.

-No te había visto perder tanto los nervios desde que nos conocemos -la holandesa se sentó al lado de Leonor y se quedaron en silencio por unos minutos, hasta que la pelirroja decidió tomar la palabra-. Oye, te he visto antes afuera. El chico que estaba conmigo es Martijn, un gilipollas que conocí en la secundaria... Él... Él es mi primer crush, primer amor y primer desencanto.

A medida que Alexia hablaba, su voz se iba apagando y la tristeza iba poco a poco tomando control en ella. Leonor la escuchaba en silencio sin saber qué decir ya que no esperaba que fuera a contarle todo eso, comenzó a juguetear con sus dedos mientras pensaba qué debía decirle a Alexia tras esta confesión.

-No tienes porqué decirme nada, ni aclararme nada...

-Sólo no quiero malentendidos, ni que se me asocie con él. Martijn y yo no tenemos nada que ver. También quería preguntarte si querías decirme algo, supongo que fuiste hasta allí buscándome, ¿no?

Leonor miró a Alexia y le pilló en fuera de juego. Se suponía que iba a contarle su plan con respecto a Michael para conseguir la verdad, sin embargo, la llegada de Martijn cambió las cosas y decidió callarse. Prefería que las cosas se mantuvieran como estaban y ver cómo transcurría los acontecimientos.

-Quería decirte que pese a que seguiré en contacto con Michael, no quiero perder tu amistad, ni que tampoco me ignores o seas borde conmigo. No quiero perderte.

-No me vas a perder por un chico tonto, tranquila. Aunque no entiendo, pero respeto tu opinión, estaré aquí para ti, te lo prometo -Alexia le dedicó una débil sonrisa.

Leonor sintió cómo se quitaba un gran alivio del pecho y al instante, abrazó a Alexia y apoyó su cabeza en su hombro.

-Espero que lo digas en serio -Alexia le devolvió el abrazo, mientras le daba golpecitos en la espalda-. No me dejes sola como todos los demás, no me dejes de lado.

-No lo haré.

La española siempre se ha sentido algo sola porque pese a que tenía una familia que adoraba y unos amigos que siempre le sacaban una sonrisa, cuando le sucedía algo, notaba que no podía contar con nadie por unas circunstancias u otras. Pese a que estaba rodeada de gente, la soledad siempre estaba presente.

Este momento mágico fue interrumpido cuando escucharon una voz familiar acercarse. Las dos corrieron en dirección opuesta al ruido y se escondieron detrás de unos arbustos decorativos del patio.

-Alexia deberíamos irnos a la habitación, sea quien sea se va a dar cuenta de que-

La pelirroja conocía bastante bien esa voz y tapó la boca de Leonor con su mano para que se callara y poder escuchar mejor. Al estar agachadas, era muy incómodo y esperaban que la conversación no se alargase porque las piernas no iban a aguantar por mucho tiempo.

-Es mucho trabajo. No puedo hacerlo sólo, entiéndelo. Se va a dar cuenta, de hecho, estoy tomando muchos riesgos y espero que no sean en vano.

Era Michael en un llamada telefónica, lo cual captó la atención de las dos chicas al instante, pero Alexia mantuvo su mano en la boca de Leonor por si acaso. El muchacho se quedó en silencio un par de minutos y colgó con un profundo suspiro.

Cuando se fue, las dos volvieron a la Tierra y se percataron que estaban muy cerca la una de la otra. Se miraron fijamente a los ojos y sus corazones palpitaban con fuerza como patatas fritas. No eran necesarias las palabras, cuando sus ojos hablaban por sí solos.

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Creí que hoy era viernes perd0n :'V

Quería dar las gracias por apoyar esta historia y tener tanta paciencia, pese a que no respondo los comentarios, los leo todos y me alegra que os guste.

Es la primera historia que escribo por lo que acepto sugerencias y críticas para que también podáis participar en este relato.

Un abrazo y nos vemos la próxima semana!