Capítulo 35

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Leticia intentaba salir del shock de la noticia, su yerno perfecto ya era cosa del pasado. Felipe tomó un trago de vino y carraspeó para dar inicio al asalto de preguntas.

-¿Y eso? ¿Ha ocurrido algo? -su padre intentaba mantener la postura en todo momento y no presionarla para que contara lo sucedido.

-Hemos quedado en buenos términos, nos dimos cuenta de que no estábamos hechos el uno para el otro. Nos tratábamos más como amigos que como pareja, eso es todo.

Leticia no se tragaba esa excusa barata de Leonor y sentía que había algo más que estaba ocultando. Hubo un silencio sepulcral, sólo se podía escuchar el choque de los cubiertos con el plato de comida.

-Bueno, hablemos de otras cosas que sean más felices, sin tanto drama. Esto lo podemos hablar mañana -Sofía intervino para intentar quitarle el muerto a su hermana. Sabía que su madre le sacaría puntillita a todo lo que dijera Leonor si seguía hablando de la ruptura.

Felipe y Sofía eran los que intentaban crear temas de conversación, pero Leticia y Leonor continuaban manteniendo su silencio. Ninguna quería meter la pata y estropear la noche.

Una vez acabó la cena, la rubia se fue a paso ligero a su cuarto. Al llegar se tomó unos minutos para tirarse en su cama y simplemente cerrar los ojos. Después de relajarse lo suficiente, tomó su teléfono y llamó a Michael.

-¿Leonor? -le resultaba extraño volver a escuchar la voz de su "amigo" después de tanto tiempo-. Pensé que no me responderías.

-He tenido que cumplir con mis obligaciones monárquicas. ¿Qué es lo que tenías que decirme? -Leonor se hizo la desinteresada y como la que no sabía nada.

-No sé si ya te lo habrán contado... -con eso se refería a Alexia 100%-. El periódico en el que trabaja mi madre están barajando la posibilidad de que Martijn y tú hagáis una entrevista juntos...

Michael continuaba explicando lo mismo que ella ya sabía, por lo que lo cortó abruptamente para ahorrarse tiempo.

-No estoy interesada, Michael. No hay necesidad de hacer nada porque Martijn y yo ya no estamos juntos, no te esfuerces más.

-Tienes que hacerlo. ¿Sabes la de repercusión que tendría? Me debes esta exclusiva.

-¿Que te debo qué? ¿No te pareció suficiente que te vendiera la noticia de que Martijn y yo estábamos saliendo para salvarle el pellejo a tu madre?

-Me lo debes porque he estado callando tu gran secreto todo este tiempo. Crees que nadie tiene idea de nada. Sin embargo, estás más al borde del precipicio que nunca.

A Leonor se le estaba empezando a subir la tensión, y en ese punto se temía lo peor. Se levantó de la cama y comenzó a dar vueltas por la habitación.

-¿A qué te refieres?

-Tu relación con Alexia, es obvio. Ella fue corriendo a preguntarle a Lucy qué podría regalarte por tu cumpleaños, vuestras miradas cómplices en los almuerzos, vuestra portada cuando fuimos a Cardiff, y esas actividades raras que hacíais cada fin de semana. ¿Te parece poco? Lucy y yo sabíamos que lo tuyo con Martijn no era más que una tapadera. En un principio, yo te gustaba y nunca llegó a pasar nada, no creo que te hayas enamorado de ese holandés en las dos semanas en las que estuvo en clase.

La española tragó saliva. Como decía Michael, podría estar al borde del abismo y no había nada que ella pudiera hacer porque todo dependía de que Lucy y Michael guardaran silencio, y viendo lo visto, parecía algo complicado.

-Aunque tengo que decir que lo ocultáis bastante bien porque no tenemos pruebas sólidas que lo confirme. Esto sí sería un bombazo mundial, y no la basura de entrevista que te estoy ofreciendo.

-¿Michael nunca has tenido amigos? -Leonor estaba muy nerviosa, pero le sorprendió la seguridad con la que estaba hablando.

-¿Cómo? -Michael se quedó confuso, y al contrario que la española, su confianza en sí mismo ya no era tan notoria como antes.

-Has dicho que no tienes pruebas de nada. Entonces... ¿cómo sabes qué tipo de relación tengo con Alexia? Toda la lista que me has dicho con tus observaciones son cosas que hasta mis amigos de la secundaria han hecho por mí. ¿No te has parado a pensar que quizás tengamos que pasar tiempo juntas por nuestras posiciones de Estado, que tengamos que realizar proyectos juntas por ser de la realeza? Te reconozco que lo de Martijn sí fue una tapadera y esa tapadera salvó a tu madre del despido. No te pases de listo conmigo porque también te puedo acusar de chantaje.

La española no se reconocía, ni en 90 siglos se hubiera imaginado estar respondiendo de tal forma a alguien. Estaba orgullosa de sí misma, ya que sentía que nadie nunca más podría sobrepasar los límites.

Una cosa que le había encantado aprender de Alexia era esto, el poder responder con descaro, pero a la vez con elegancia y sin despeinarse. A la rubia siempre le habían dicho que había que mantener la compostura y dialogar tranquilamente, de forma diplomática, y básicamente callarse todo lo que querías decir con tal de no cagarla.

Alexia por el contrario, le estuvo enseñando que se puede decir todas las cosas que una piensa de una forma más informal, sin tantos formalismos, y conseguir el mismo efecto. Estuvo mostrándole sus trucos para verse confiada y no titubear. En estas ocasiones no estaba tan mal sentirte superior a la otra persona. En resumidas cuentas, ser una bad bitch.

Un silencio se formó, al otro de la línea sólo podía escuchar la respiración de Michael, la cual estaba algo agitada.

-Además, se me ha olvidado decirte una última cosa. No te dirijas más de esa forma a Martijn porque te da mil vueltas como persona. No me puedo creer que en algún punto de mi vida me llegaras a gustar -Leonor volvió a guardar silencio para ver si Michael tenía algo más que decirle, al ver que seguía igual, decidió concluir la conversación-. Si no tienes más amenazas o algo más que decirme, te voy a colgar con tu permiso -Michael no se esperó ni un segundo y colgó él, al parecer le había herido el orgullo.

"Martijn, ya terminamos esta falsa, ya no tenemos que seguir fingiendo. Espero que sigamos en contacto y gracias por todo. Mañana te lo contaré todo con más detalle."

Leonor le envió ese mensaje a Martijn para que estuviera al corriente de lo sucedido, y después fue a escribirle a Alexia.

"Pelirroja, solucioné el problema con Michael. No creo que nos vuelva a molestar más, pero hay que tener cuidado con él y tenemos que ser más precavidas. Por cierto, empleé tus técnicas de perra empoderada y han funcionado, mañana te cuento. Te quiero 💖"

Tras hacer todo lo que tenía que hacer, Leonor se puso el pijama y se disponía a dormir, pero antes de que conciliara el sueño recordó sus clases de oratoria con Alexia y no pudo evitar esbozar una sonrisa.

Semanas antes

-Vamos a ver, en primer lugar tienes que intentar poner una voz así grave, para crear más impresión -a medida que lo iba diciendo, Alexia iba poniendo su voz más grave y Leonor no podía contener la risa-. Oye, seriedad.

-Perdón, perdón.

-Segundo, no puedes titubear o mostrar indecisión en ningún momento. Mientras la otra persona esté hablando, ve pensando en tus argumentos para arrollarlo. Sin piedad. Tienes que decirlo a una velocidad normal e incluso despacio, depende del momento.

-De acuerdo.

-Tercero, si estás cara a cara, tienes que mostrarte expresiva. Levanta las cejas, haz muecas, pretende que no te importa o míralo como si estuviera diciendo la cosa más absurda del mundo.

-Okey, creo que lo tengo. Por hoy es suficiente, no tengo más ganas de clases.

-Mañana seguimos, eh. No te vas a escaquear tan fácilmente -Alexia comenzó a jugar con el pelo de Leonor y a hacerle pequeñas trenzas-. Si lo sabes usar bien, vas a ser la mejor reina del mundo.

-Me da igual ser la mejor reina del mundo -Alexia miró a Leonor con una ceja levantada, por la curiosidad, porque sabía que a continuación diría algo bonito-. Quiero ser la mejor reina para ti -y después de esto, Leonor le dio un beso a su pelirroja.

A Dos Coronas de TiWhere stories live. Discover now