A Dos Coronas de Ti

Capítulo 24

Había pasado una semana desde que Leonor y Alexia comenzaron su noviazgo secreto, aunque a veces cuando estaban en público se les hacía difícil disimular, lo estaban llevando bien. A los dos días de su charla con Lucy y Michael, se publicó el bombazo mediático sobre el romance de Martijn y Leonor.

Pese a que en el artículo nunca se mencionó el nombre del holandés, en la escuela todos sabían que se trataba de él por las descripciones que se habían dado. Debido a esto, Leonor y Martijn tenían que quedar de vez en cuando por el centro escolar en público para que la gente no sospechara de la farsa que se habían montado.

Michael le hizo saber a Leonor que el plan funcionó y que su madre pudo mantenerse en su puesto de trabajo, y quedaron en paz. Por otra parte, Martijn estaba algo incómodo porque fuera a donde fuera la gente murmuraba sobre él, cuando él solía tener la atención de la gente por motivos deportivos.

Leonor estaba muy feliz por el rumbo que estaban tomando los acontecimientos, lo único malo era que tenía que fingir ante todos que estaba con Martijn y era algo incómodo cuando en realidad estaba con Alexia. Sin mencionar que su madre desde que salió la noticia no paraba de llamarla y preguntarle sobre cómo iban las cosas entre el holandés y ella.

Para el grupo de amigos de Leonor todo esto le resultaba bastante raro porque en sus vidas habían visto interacción entre ellos, y ocurrió lo mismo como cuando Alexia y Leonor comenzaron a llevarse bien de la noche a la mañana.

Leonor y Alexia estaban en el cuarto, mientras Leonor hacía deberes, Alexia estaba tumbada mirando el móvil y leyendo la opinión de la gente sobre la noticia. Veía memes y se lo contaba a Leonor para que se riera con ella.

-Tus paisanos se siguen acordando de mí, qué monos.

-¿En serio? ¿Qué dicen? -se giró Leonor curiosa, dejó de hacer lo que estaba haciendo para acercarse a Alexia y ver la pantalla de su móvil.

-Mira, dicen que confiaban en que te liaras conmigo y que se sienten estafados. Otros exigen foto de Martijn para saber la gravedad del asunto -Leonor se tumbó al lado de la holandesa mientras soltaba una risa tímida por los comentarios, y como las camas no es que fueran muy anchas, tuvieron que apretujarse.

-Bueno, técnicamente aún no nos hemos liado.

-¿Estás insinuando algo Leonor de Todos los Santos de Borbón y Ortiz? -preguntó Alexia a la española, quien apoyaba su cabeza en el hombro de la pelirroja.

-¿Te has aprendido mi nombre completo?

-Ni que tuvieras 8 nombres y 4 apellidos diferentes, dentro de lo que cabe, es fácil. Ahora responde, no evites la pregunta.

-¿Yo? Yo no insinúo nada Alexia Juliana Marcela Laurentien de Orange-Nassau, sólo he dicho una verdad.

-Con que con esas estamos... -Alexia soltó el móvil y comenzó a hacer cosquillas a Leonor.

Leonor se incorporó rápidamente para huir del ataque repentino de Alexia e intentó cogerle de las muñecas para que parara. Tras un forcejeo Leonor finalmente consiguió su objetivo y acabó encima de Alexia, la española apretó ligeramente los labios por los nervios que sentía y Alexia miraba fijamente a Leonor mientras intentaba estabilizar su respiración.

-Ya que lo has mencionado antes... ¿No crees que este es el momento perfecto para liarnos? -dijo de forma no irónica la holandesa-. Así nos quitamos esta espinita.

Leonor tragó saliva y asimiló la pregunta que le acababa de hacer Alexia, ¿le estaba preguntando eso en serio? A veces, la pelirroja decía cosas en serio, pero que en realidad eran en broma y viceversa y Leonor en la mayoría de los casos no sabía qué hacer.

La rubia respiró hondo y se fue acercando lentamente a Alexia, ambas cerraron los ojos y esperaron el contacto de sus labios. Todo parecía que iba a cámara lenta y tanto Leonor como Alexia habían estado deseando que este momento llegara, puesto a que en esta semana las dos seguían algo tímidas con respecto a la otra, y sólo se habían llegado a dar besos sueltos.

Ya podían sentir sus respiraciones a escasos centímetros y cuando todo estaba por explotar, alguien comenzó a aporrear la puerta.

-No me lo puedo creer -murmuró Alexia.

Leonor se levantó a la velocidad de la luz para abrir la puerta, con las mejillas sonrojadas, y Alexia se incorporó en la cama y se puso bien los pelos. La holandesa ahora tenía cara de pocos amigos y miraba expectante a la puerta para ver quién fue la persona que decidió arruinar el momento.

Una vez que Leonor abrió la puerta, se encontró a Martijn, también con una cara de pocos amigos.

-Tu madre no para de mandarme mensajes o llamarme. Me está diciendo si quiero ir a España contigo en las próximas vacaciones que tengamos para que me enseñes el Palacio de la Zarzuela -dijo el holandés frustrado.

-Piénsalo Martijn, vacaciones gratis -contestó borde Alexia.

El pelinegro entró en la habitación y Leonor se disculpaba con él, a la vez que cerraba la puerta, por el comportamiento de su madre.

-Sé que ha pasado unos días, pero esta situación es insostenible. Mi madre me llamó también emocionada al saber que su hijo tenía una "relación" con una heredera al trono.

-Tu madre no se alegró tanto cuando supo que salíamos juntos -respondió Alexia cruzándose de brazos-. Además, hemos dicho que cuando pase alrededor de un mes podéis romper.

-¿Y por qué no antes? -intervino Leonor.

-Sería muy sospechoso, por no mencionar que la madre de Lucy y Michael no mejoraría su situación si vende una exclusiva y a la semana la exclusiva se va a la mierda. Chicos, hay que aguantar, supongo que al ser el principio habrá más revuelo y una vez que la gente se acostumbre a veros, os ignorarán y todo volverá a la normalidad.

-Espero que tengas razón -dijo Martijn-. Y habla con tu madre, por favor. Literalmente lleva todo el día preguntándome que qué tal estoy.

-Lo haré, no te preocupes -respondió la española.

Martijn se fue y cuando se volvieron a quedar solas, Leonor se veía algo decaída y Alexia le preguntó el porqué de su cambio de humor.

-Me he puesto a pensar en el futuro -suspiró-. Cuando termine el lío con Martijn, ¿qué pasará con nosotras? -Leonor se puso en frente de Alexia y puso sus brazos alrededor del cuello de la holandesa-. Mi madre no creo que apruebe lo nuestro.

-No pensemos en eso ahora -Alexia se tumbó e hizo que Leonor estuviera prácticamente en la misma posición que antes-. Y disfrutemos del momento.