Guerra de Elementos [#1]

Vuelta a casa (final)

La mañana siguiente al encuentro con Adira, Stevenson se encontraba en la biblioteca buscando soluciones, no podía pelear con Adira solo, tampoco podía llevar a los chicos. No se perdonaría otra pérdida.

Sus ojos sólo veían una solución, el último recurso.

“-Nuestro antiguo nombre era Guardián del mundo en los tiempos, y esta es la razón"

Dijo el padre de Stevenson hace años, él era pequeño y no lo entendía, pero ahora sí.

“-Siempre que nos quedemos sin tiempo,  podemos traerlo hacia nosotros, algo difícil y complicado.

-Pero posible- contestó el pequeño.”

Había una vía de escape, no una solución permanente, pero les daría tiempo.

Tenía que ponerlos a salvo, tenía que alejarlos de Adira y la única manera que había era alejándose él.

Cuando las personas desaparecieron fueron llevadas a una realidad espejo donde los desaparecidos eran los chicos; en ese momento la Tierra quedó estancada en el 2018. Stevenson sólo tenia que llevar a los chicos a su mundo y con ellos todas las personas.

El tiempo no habrá pasado para los demás habitantes, para ellos sí, pero todo será como un sueño, despertarán en casa con un posible sueño a su lado.

Estaba dispuesto a arriesgar todo para no perder a los chicos, para no perder a Peter, no de la manera permanente.

-Me va a odiar- se dijo a sí mismo.

En efecto no se confundía, lo abandonó cuando tenía cinco años y lo volvería a hacer ahora que tiene dieciocho; iba a romper su promesa para protegerlo.

¿Protegerlo como hace trece años atrás? lo reprochó una voz en su cabeza.

Se convenció de que ahora sería diferente, no lo dejaría para protegerlo de Adira, lo quería proteger de ese mundo entero.

Quiso abrir la puerta del territorio de agua pero no pudo, la puerta simplemente desapareció, al igual que las demás, excepto la puerta de fuego, ésta ya se había hecho cenizas antes. De ese modo se mostraba que ya no habían guerreros de fuego sobre la tierra y el poder cae sobre la misma porque Adira ya no era una guerrera.

Aún no amanecía, tenía tiempo para completar el hechizo. Porque a todos los guardianes se les da magia al nacer, y se les enseña un solo hechizo, toda su magia se desvanecerá con ese hechizo.

Stevenson nunca le enseñó eso a Peter, y aunque quisiera no podía porque no tenía una bruja para que le de un poco de su magia; claro, luego se enteró que era brujo así que no necesitaba a nadie más. De todos modos no le enseñó.

Antes de hacer nada se despidió de su hijo con un beso en la frente.

-Lo siento- susurró y se marchó.

Lanzó el hechizo.

La magia se extendía en toda la cabaña, cada puerta, cada ventana, cada madera, todo. Todo estaba lleno de magia, incluso las personas que ahora estaban plácidamente dormidas.

En una parte profunda de su mente sintió que la realidad espejo se vaciaba nuevamente y todos sus habitantes volvían a su realidad original.

Sintió el cambio del tiempo, el cambio del clima, pues ahora su mundo volvía a estar en marzo del 2018. El hechizo funcionó.

También sintió que el mundo de los guerreros ya no existía, no existían más territorios. Ya no.

La cabaña empezó a destruirse, hilos azules la rodeaban para desvanecer cada material de la misma hasta que sólo quedó el lugar vacío.