REFLEJO ➳ Kim Taehyung

• PARTE FINAL •

Hace algunos años conocí a una hermosa chica muy alegre, espontánea y algunas veces malcriada que me daba la espalda porque no tenía interés en el amor. A veces por tener inseguridades no fui capaz de acercarme a ella y poder declarar mi amor a ella… Perdí tiempo pero, cuando llego el día, pude decirle sobre de mis sentimientos, al principio ella me rechazó pero, tuve la oportunidad de demostrarle que fui capaz de hacer cualquier cosa para estar con ella.

Un día aceptó ser mi novia y seguido de eso aceptó casarse conmigo en un aventurero viaje a Japón. Los mejores días de mi maldita vida.
Sentí alegría, enojo, celos, dicha, placer, estrés y mucho amor por esa preciosa mujer. Soy un ganador en la vida porque logré hacerla mi esposa.

Soy el esposo de Kwon HannSwan, vaya jamás creí que lo conseguiría.

Me regaló tres hijos que adoro con toda mi vida, cada uno de ellos tienen algo de ella. Ella vive en la sonrisa de NaHaeun, en la inteligencia de Dae-hyun y en esa esperanza tan grande que tiene Yong en la vida.

Me casé con una mujer incansable, con una mujer que no he conocido más en alguien más. Con una fuerza y energía tan inagotable… pero ahora ella descansa. 

Me demostró en muchas ocasiones lo fuerte que era, lo independiente que era, siempre haciendo cosas dejando en claro al mundo que ella no necesita de nada para conquistar sus metas.
Sus metas jamás fueron personales, todo fue para proteger de los suyos. Yo fui uno de ellos.

No hay día que ni me acuerdo de ella y lo mucho que la amo,  admiro y respeto. Lucho todos los días para ser un gran padre para nuestros hijos, dejándola tranquila porque conmigo están bien.

No quiero recordar aquellos momentos donde la perdía porque me hacen recodar aquel día en el que…

La amo, la amaré siempre.

—Papá, se hace tarde… ¿podemos darnos prisa?

Mi hija tal como su madre, siempre puntual.

—Dae-hyun no quiere amarrar sus cordones, se va a tropezar.

Yong siempre tan protector como su madre.

—No puedo caerme porque caminaré con los pies abiertos, así que no me haré tropezar.

Dae apenas aprendió a hablar y es tan astuto, como su mamá.

Lo que más tenemos en común mis hijos y yo es ese amor inmenso a su madre, así como el esfuerzo que hacemos por ser mejores para ella.

Me he encargado de que no la olviden, todos los días antes de dormir cuento alguna de las anécdotas que tengo con Hann, ellos sonríen y yo vuelvo a vivir cada uno de los días valiosos con su madre.

Mi amada Hann.

—Esta vez escogeré las flores mamá. –NaHaeun sentenció a Yong.

—Tengo entendido que nací una hora antes que tú, tengo diez años y UNA hora.

—¿Eso qué tiene que ver?

—Las escogeré yo. –Yong dijo firme.

Los miro y aunque sea atrevido de mi parte, imagino a GD cuando iba a recoger a Hann al colegio y le reprochaba ser mayor que ella. Ella estaría alegre de ver este escena.

—Estoy listo. –Dae-hyun se unió a ellos esta vez con unas botas para lluvia.

Mis hijos al final optaron por comprar dos ramos de flores. Es un día especial e iríamos a llevarlas a su madre. Venimos todos los años.

Cruzamos el gran portón del lugar en el automóvil y a nuestro alrededor habían jardines y jardines de pasto hermoso, así como flores aún más hermosas.