Platónicos

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Vega pataleó en su cama frustrada, ella y Remus se habían quedado platicando hasta tarde y luego habían ido a dormir. Pero solo un par de horas después, ella había despertado y llevaba al menos cuarenta minutos intentando volver a dormir, no sabía si era el estrés porque la semana siguiente tenían el examen de aparición, el estrés por ganar la copa de quidditch en su último año, la presión de los E.X.T.A.S.I.S. o que cada día era un día menos antes de su graduación

Se levantó decidida a ir al cuarto de los merodeadores para meterse en la cama con Remus y aferrarse a él intentando dormir en sus brazos protectores

Cuando entró al cuarto vio que James Potter estaba despierto, viendo a la ventana

—Hola Cornamenta —Susurró ella

—Son las 5 de la mañana Lykos —Le dijo con una sonrisa— Y podría jurar que eran las 2 de la mañana cuando escuché que Lunático entraba

—Estás despierto desde las 2? —Le preguntó sentándose frente a él

—No, pero lo noté

—Mamá James —Dijo Vega recordando ese apodo que le pusieron en segundo año, la primera vez que recibieron un horario de James

—No puedes dormir? —Le preguntó, ella negó con la cabeza— Tienes tiempo para una charla?

—Con mi fantástico James Potter? Siempre

Tomaron el mapa del merodeador y salieron con dirección al patio, se recostaron en el pasto, bajo el árbol de siempre, mirando al lago negro

—Tengo mucho miedo —Confesó James— Se que nos tomaremos un sabático para vivir, pero me da miedo que la guerra este perdida antes de que regresemos

—No tienes que tomarte el sabático si no quieres —Dijo ella— Aún estamos a tiempo de enviar nuestras solicitudes a la oficina de aurores

—Quiero hacerlo. Solo que me da miedo que la guerra también consuma el mundo muggle, y mi Lily, Vega, no quiero perder a Lily

—Se a que te refieres —Le dijo ella con voz triste— Me siento de la misma manera con Remus, se que el que sea un hombre lobo lo vuelve un blanco fácil en ambos bandos

James notó que Vega tenía tanto terror como él y que también como él, lo había ocultado al grupo de amigos para no preocuparlos

—Vega —Llamó James— Podemos prometer algo?

—Claro

—Prometeme que siempre seremos amigos, y que cuando tengamos que mostrarnos fuertes frente al resto de los demás, siempre podremos ser vulnerables entre nosotros

—Te lo prometo. Pero también te prometo que cuando el momento de ser vulnerables frente a ellos llegué, cuando necesiten saber que tenemos tanto miedo dentro, también estaré ahí confesando el terror junto a ti

Se sonrieron con lágrimas en los ojos

—Sabes? —Comenzó James— Cuando le escribí a mi mamá la primera noche le conté de ti y de Canuto, ella dijo que sonaba a que haríamos una gran pareja, tú y yo, me dio escalofríos cuando lo leí, luego entendí que era porque sí te amo, pero te amo como si fueras de mi sangre. Vega, se que no eres mi hermana de sangre, pero eres la hermana que elegí y eso es aún más poderoso, como cuando Sirius y tú se volvieron a elegir como hermanos, o cuando Regulus los volvió a elegir como hermanos

—Te amo de la misma manera James —Dijo ella— Y nunca podré agradecerte lo suficiente por habernos encontrado, también eres mi hermano por elección, no se qué sería de mi vida sin ti

Se sonrieron y sintieron como su corazón latía en paz, sí. James Potter y Vega Black eran almas gemelas platónicas, siempre estarían ahí; ellos habían aprendido a jugar quidditch juntos y Vega le había confesado a James que le gustaba Robb Scamander en primer año, y James supo guardar el secreto hasta sexto año cuando Vega le contó a los demás. James le había confesado sus miedos en sexto año y Vega los había escuchado y lo había abrazado jurandole que todo estaría bien

—Amo mucho a Lily —Soltó de la nada James y Vega rió— Qué?

—Es que se nota, se ha notado los últimos siete años

Esta vez fue el turno de James de reír, y después se quedaron en silencio, mirando al lago negro

Las horas pasaron y cuando las siete de la mañana llegaron, unas cuántas niñas de sexto año se acercaron a ellos, lucían totalmente furiosas

—Los odiamos —Dijo la del medio. James y Vega la miraron confundidos— Siempre andan por ahí sonriendole a todo mundo y no se dan cuenta de que nos enamoramos

—Como quisiera que Sirius estuviera también aquí, porque él es igual de estúpido que ustedes —Agregó otra niña

—Y no solo van por la vida enamorando personas, si no que cuando lo hacen y nos intentamos acercar resulta que tienen pareja

James y Vega compartieron una mirada llena de diversión

—Bueno, perdón por ser amables —Dijo ella

—Y ser alegres —Continuó James— No nos disculparemos por se extremadamente geniales en todo lo que hacemos, pero lamentamos que se sientan de esa manera

Les dedicó otra sonrisa que las hizo soltar un grito frustrado, claramente esa era la sonrisa de la que se quejaban. Se alejaron furiosas y ellos comenzaron a carcajear

Vega siempre había admirado a James, porque aunque James Potter tenía uno de los mejores físicos de todo Hogwarts, el carismático muchacho se las arreglaba para que fuera en lo último que se fijaran de él, así que para cuando te dabas cuenta del físico de James, en realidad tú ya lo amabas

—A ver, entonces nos aman, pero nos odian —Dijo Vega entre risas

—Así solía amarme Lily —Dijo James también entre risas

—Crees que ya deberíamos ir a despertar a los chicos? —Cuestionó Vega parando de reír

—Obvio, además seguimos en pijama, tenemos que cambiarnos

James se levantó y estiró la mano para ayudar a Vega a hacer lo mismo, luego, le extendió su brazo para que se colgara

—Que caballeroso señor Potter —Bromeó ella— Pero cuidado que me enamoro

Con esa última broma y las risas que había provocado, el par de amigos se adentró al castillo. James pasó un brazo por los hombros de Vega y Vega abrazó a James por la cintura

Mientras algunos alumnos que se levantaban temprano ya paseaban por los corredores, a nadie le pareció particularmente raro que James y Vega se anduvieran paseando en pijama hasta la sala común de Gryffindor, susurrando cosas que se convertían en enormes carcajadas



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Sweet Eyes | Remus Lupin |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora