Harry James Potter

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31 de julio de 1980, todo parecía ir normal y parecía que el pequeño Potter resistiría hasta agosto, se salvarían de la profecía

Entonces cuando estaban terminando de almorzar se fueron a sentar a la sala a conversar. Marlenne les estaba contando que se había encontrado a Dorcas cuando esta acompañó a los papás de Mary a la Oficina de aurores para averiguar qué tal iba la investigación de su muerte

—Estuvo incómodo, vi que quería hablar, y yo quería hablar, pero justo cuando iba a acercarme —Le lanzó una mirada a Jon

—Perdón, okay Marlenne? —Comenzó— La siguiente vez no te avisaré cuando hayamos rescatado a un ADORABLE ocammy

—Avisame cuando te digan que te puedes quedar los cascarones —Le dijo ella

Compartieron una risa. Ninguno recordaba en qué momento Jon y Marlenne se habían convertido en mejores amigos, pero ahora parecía que eran básicamente hermanos

—Mierda —Dijo Lily, todos la miraron confundidos— Ya viene

—Qué?

—El bebé pedazos de idiotas, el bebé

Todos comenzaron a enloquecer, Sirius gritaba que Lily se había hecho pipí de la emoción. Remus golpeaba a Sirius y le explicaba que era su fuente que había reventado. Vega gritaba de emoción saltando junto a Jon. James se puso pálido y Marlenne corrió, tomó la maleta que habían preparado y se encargó de darle una cacheda a todos y cada uno ahí para regresarlos a la realidad

El grupo se fue por red flu hasta San Mungo. Todos quisieron entrar con Lily, pero solo dejaron entrar a James

—Cómo creen que le vaya a poner? —Cuestionó Sirius— Yo digo que le va a poner Bambi

—Wow, 10 de 10 Black —Se burló Jon— Me encanta ver que eres tan creativo

Sirius le sacó la lengua a su esposo pero luego le lanzó un beso. Vega jugaba con los dedos de Remus y Remus comía chocolate con su mano libre. Marlenne leía un libro y Peter se removía nervioso en su silla

Pasaron un par de horas y vieron a James salir llorando, todos se levantaron de sus asientos

—Ya nació —Les informó con una enorme sonrisa. Los primeros en abrazarlo fueron los Black

Entraron a la habitación después de limpiarse por completo para evitar pasarle algo al pequeño bebé. Ahí estaba Lily, lucía cansada pero feliz y en sus brazos estaba un pequeño bebé con el cabello idéntico al de James, cuando se acercaron notaron que tenía los ojos de Lily

—Cuál es su nombre? —Cuestionó Remus tomando con delicadeza la mano del bebé

—Harry James Potter —Contestó James

—Es muy lindo Cornamenta —Dijo Vega abrazándolo por un lado, Sirius lo abrazó por el otro

—Para mi siempre será bambi

—Vega, Sirius —Habló Lily— Queremos pedirles algo

—Lo que sea —Dijeron al unísono tan pronto como Lily terminó de hablar

—Queremos que sean los padrinos de Harry —Dijo James

Los gemelos no contestaron de inmediato, pero todos vieron como una sonrisa se postraba en su cara y como las lágrimas comenzaban a llenar sus ojos

—Me sentiría más tranquilo sabiendo que si algo nos pasa bambi los tendrá a ustedes —Agregó

Ellos asintieron y a pesar de que no pudieron decir nada lo dijeron todo con sus ojos. Todos sabían que probablemente tenían un nudo en la garganta

—Quieren cargarlo? —Preguntó Lily con una sonrisa maternal

Una sonrisa maternal, eso sorprendió a todos ahí, Lily Evans sonriendo maternalmente, no cabía duda de que sería una increíble mamá

Vega fue la primera en cargarlo

—Hola bambi —Susurró con la voz rota— Soy la tía Vega, pero me puedes decir como quieras —Lo apretó un poco a él— Te quiero mucho mucho mucho y siempre te voy a cuidar

Con mucho cuidado se lo pasó a Sirius, a quien le temblaban las manos, pero en cuanto el pequeño Harry estuvo en sus brazos, estos se pusieron firmes y alertas

—Vas a ser todo un desastre bambi —Le prometió— Tu mamá se va a volver loca y nos va a querer matar, pero vas a ser muy cool. Te adoro bambi

Se lo pasó a Remus y le sonrió con emoción al hacerlo, también le dio una mirada tranquilizadora, pues vio el miedo en sus ojos

—Hola Harry —Le dijo suavemente— Te espera una vida entera de esto, pero voy a ser el primero en decírtelo, eres idéntico a tu padre, excepto los ojos, tienes los de tu madre

Depositó un suave beso en su frente y se lo pasó a Jon

—Hola Harry —Le dijo con alegría— Soy tu tío Jon y te voy a consentir todo lo que quieras

Con cuidado se lo pasó a Marlenne, quién ya tenía lágrimas en los ojos

—Esperemos que no tengas la miopía de Potter —Le dijo con una risa— Pero sí su talento en quidditch, vas a ganar muchas copas

—Y si no le gusta el quidditch? —Cuestionó Lily con tono burlón

—No habrá ningún problema Lilyflor —Aseguró James— Harry tendrá toda la libertad para elegir si jugar quidditch o irse de la casa

Todos los presentes rieron. Peter cargó a Harry y lo veía con pena, pensando lo que nadie quiso pensar

Harry había nacido a finales de julio, era bastante probable que fuera el niño de la profecía y él tendría que hacer lo posible para sobrevivir a Voldemort

Lo que Peter también pensó fue que él como cercano a los merodeadores y un merodeador él mismo tendría que delatar la ubicación de los Potter si resultaba ser Harry

Él no quería hacerlo, pero quería sobrevivir. Aún así teniendo al pequeño Harry en sus brazos todo cambiaba, era un alma pura e inocente, se reprimió a sí mismo, si ya había matado a Mary, podría delatar a los Potter

—Perdoname —Le susurró a Harry antes de darle un beso en la cabeza y regresarselo a James

—Va a ser el niño más mimado del mundo —Aseguró James mirándolo con una sonrisa— Imagina todo lo que te espera mi niño. Haré todo lo que este en mi poder para protegerte








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Sweet Eyes | Remus Lupin |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora