Sweet Eyes | Remus Lupin |

A un aullido de distancia

Se encontraban en la casa de seguridad de la Orden, en su reunión de la semana, esta vez Dumbledore estaba ahí y tenía mucho que hacer y aunque no lo admitiría, estaba asustado de la reacción de los Merodeadores ante la nueva orden

—Para terminar por hoy —Dijo Dumbledore— Esta mañana recibí un patronus de Regulus Black

Paró un segundo para ver la reacción, los Merodeadores se veían aliviados de escuchar de Regulus

—Me informó que ya saben quién planea reclutar a los hombres lobo, es por eso que infiltraremos a un hombre con ellos, para intentar evitarlo y si no, controlarlo

—Es una locura —Dijo Edgar Bones— No conocemos a ningún hombre lobo

—Lo hacemos —Aseguró Dumbledore dirigiéndole una mirada a Remus

Remus quiso levantarse, pero se encontró con la mano de Vega aferrándose a su brazo, le dedicó una mirada tranquilizadora y se paró junto a Dumbledore

—Yo soy un hombre lobo —Dijo con la cabeza en alto, lo cuál enorgulleció a sus amigos, pero también los aterró. Remus volteó a ver a Dumbledore— Voy a hacerlo

Dumbledore le dedicó un asentimiento de cabeza y Remus regresó a su lugar, donde abrazó a Vega por el resto de la reunión, cuando casi todos se fueron, Dumbledore se acercó a ellos

—Dejará de trabajar en el Ministerio Señor Lupin —Comenzó— Necesitamos que este ahí al menos 3 ciclos

—Son tres meses —Se quejó Vega

Remus le dirigió una mirada y Vega se calló, pero también se apartó de él, recargándose en su hermano, quién la rodeó con un brazo y depositó un beso en su cabeza. Y ya no prestó atención, de la nada no oía nada, pero veía a todos ahí hablar con Dumbledore

Y entonces las lágrimas comenzaron a caer, silenciosamente y Remus lo notó, dio por terminada la conversación y abrazó a Vega para después aparecerse en el apartamento. Cuando llegaron, Vega se apartó de él con fuerza y Remus lo supo, estaba furiosa, y lo peor, estaba dolida

—Así que tú sí te puedes infiltrar con ellos —Soltó con coraje

—Ly —Comenzó con calma y dolor, el tono en su voz hizo que Vega parara la pelea

Ambos tomaron una respiración profunda

—Mira Moony, no quiero que hagas esto, no quiero que estés solo allá, en las lunas llenas, con el riesgo constante de que te descubran

—No lo harán —Aseguró Remus— Seré cuidadoso

Ambos guardaron silencio

—Ly, quieres que tengamos hijos y que ellos tengan una buena vida? Yo se que sí, porque lo hemos hablado. Esta es la manera, tenemos que hacer todo lo que esta en nuestro poder para salvar a tanta gente como podamos, para terminar esta guerra y poder vivir nuestra vida. Y no puedo hacer esto, no puedo irme tres meses sin saber que estarás bien, sin saber que me apoyas

—Quiero esa vida, enserio que sí, pero te quiero conmigo

—Te prometo que estaremos juntos, el destino nos hizo el uno para el otro, y así es como será

—Voy a extrañar esos ojos —Confesó viéndolo a los ojos— Siempre que me siento perdida solo necesito mirar tus ojos, y te juro que encuentro mucho más de lo que necesito

Se envolvieron en un abrazo

—Te prometo que volveré, y en caso de que alguna vez me necesites, siempre estaré a un aullido de distancia. Si me necesitas, dejaré todo y a todos para regresar a ti

—Te amo Remus Lupin

—Te amo Vega Black

Y así fue, Remus partió al día siguiente, al inicio todo había sido duro. Vega y Remus se abrazaron sin decir nada por al menos diez minutos. James y Sirius habían llorado deseándole la mejor suerte a Remus, y cuando cerró la puerta tras él, Vega se sintió morir, quiso ir tras él y abrazarlo, pedirle que huyeran a otra parte del mundo, pedirle que regresara, pero muy dentro de ella, sabía que era lo correcto

Las semanas pasaron, y esa noche sería la primer luna llena en años en la que Remus no estaría con sus amigos, en la que Remus no estaría con Vega, sin poder estar con su lado humano, le aterraba lo que podría pasar

Vega pasó todo el día con dolor en el pecho, le preocupaba el dolor que sabía que Remus iba a sufrir, le preocupaba que no tendría a nadie que lo llevara a la enfermería y se quedara con él toda la noche, cuidándolo, haciéndolo sentir mejor

Remus pasó todo el día aferrándose a su anillo de promesa y a su pulsera compartida con Vega, pasó todo el día recordando Your song, recordando cada pequeño detalle de Vega. Su sonrisa traviesa, la de felicidad, su risa, sus ojos, tanto como pudiera recordar de ella y de sus amigos

Y conforme la noche se acercaba, los amantes se recordaban, se extrañaban y deseaban que el tiempo pasara rápido, deseaban poder estar en los brazos del otro de nuevo

Deseaban poder tomar café juntos y preparar el desayuno, deseban comer chocolate en la tarde mientras veían algo en el televisor, leer al calor de la chimenea, planear bromas, hablar de libros y darse besos llenos de amor

Ninguno sabía que se podía extrañar tanto a alguien, pero ahí estaba ellos. Sintiéndose a morir por no estar en compañía del otro, pero firmes luchando esa guerra, decididos a conseguir la vida que querían, a conseguir su felices para siempre

Cuando la luna comenzó a notarse y Remus comenzó a sentir su corazón latir más rápido, miro directo a la luna, diciéndole que no le tenía miedo

—A un aullido de distancia Ly —Susurró antes de comenzar a sentir sus huesos romperse

Vega lloró toda la noche, como si sintiera el dolor físico de Remus, lloró toda la noche mirando a la luna, convertida en animaga, y de vez en cuando aullaba llenar de dolor, pero Remus nunca llegó

James y Sirius despiertos por el evidente dolor de Vega, también se hicieron animagos y se quedaron junto a Vega toda la noche, mirando a la luna

Hola!!! Espero que les este gustando. No olviden votar y comentar. Gracias por leer y nos vemos el viernes