ROMANCING, han seojun

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Fue incómodo. Miyeon se sentó frente a su padre, con los tobillos cruzados y las palmas de las manos apoyadas en su regazo. Sangwon estaba sentado detrás de su escritorio, sentado casi completamente derecho, inclinándose hacia adelante para tener sus manos sobre el escritorio.

Él la había saludado con un vigor vacilante, parecía como si quisiera abrazarla pero no lo hizo, en lugar de eso, le estrechó la mano con torpeza y la guió hacia su asiento designado con una mano sobre su hombro.

Apenas se había dicho nada desde su saludo, y parecía que Sangwon estaba esperando a que su hija iniciara la conversación. Ella había proclamado, en su intento de abrazarla, que ella estaba allí por una cierta razón, la cosa que el Sr. Hwang estaba esperando averiguar.

─Me he mudado casi por completo ─Miyeon comenzó lentamente, sus palabras calculadas─. Cuando salí de esa casa por primera vez y hasta ahora, me he quedado con un amigo. Pero después del tiempo que he estado con ellos, ya no me siento cómodo allí y me siento como si fuera imponente.

─Ya veo ─Sangwon respondió. Parecía como si estuviera ansioso por hacer más preguntas, estaba en su naturaleza como padre; ¿Con qué amiga se estaba quedando? ¿Como estaba ella? ¿Había tomado alguna decisión o elección que afectaría su vida? ¿Hubo algún contacto entre ella y su madre, a quien Sangwon no había visto desde que prácticamente la echó?

Miyeon asintió, se aclaró la garganta y no volvió a hablar mientras Sangwon le servía un vaso de agua.

─¿Has comido? ─preguntó, palabras rígidas pero llenas de preocupación paterna─. Puedo hacer que Daehee baje a la cafetería y pida algo de comida. ¿Estaría aquí en media hora? ─Sangwon ya estaba alcanzando el teléfono en su escritorio, pero su mano cayó cuando su hija negó con la cabeza.

─No estoy... no estoy aquí para una reunión familiar. Estoy aquí porque necesito ayuda. Ayuda financiera ─Miyeon admitió, y Sangwon se inclinó hacia adelante en su silla, la barbilla de la chica Hwang se inclinó hacia abajo mientras evitaba su mirada.

─¿Por qué? ¿Te has metido en algún problema? ¿La persona o personas con las que te estás quedando quieren alquilar? ─preguntó Sangwon, en realidad expresando algunas de sus preguntas.

─No, no, para nada, Suho ha sido una persona maravillosa con quien quedarse ─Miyeon rápidamente negó sus pensamientos─. He decidido que me gustaría comprar o alquilar un apartamento.

Sangwon miró a su hija por un momento, parpadeando con la boca abierta. Un golpe repentino interrumpió el silencio, y el padre y la hija Hwang se giraron hacia la puerta y vieron a su secretaria, la señora Song, entrar con una bandeja.

─¿No es un buen momento? ─preguntó, sintiendo claramente la vibra en la habitación y sin gustarle ni un poco, viéndose incómoda─. Señor Hwang, me disculpo por interrumpir, pero alguien de la cafetería mencionó su solicitud anterior ─explicó, y Miyeon miró a su padre, recordando su oferta de ir a dicha cafetería.

─Gracias, secretaria Song, solo colóquelo aquí, por favor. Y a partir de ahora, asegúrese de que no haya más interrupciones ─Sangwon asintió, mirando la bandeja frente a él mientras la Sra. Song salía corriendo.

Levantando la tapa del plato en la bandeja, reveló un plato de tonkatsu. Miyeon no estaba muy sorprendida: su padre compartía el mismo favorito que ella. Solían salir y comer juntos, sin siquiera molestarse con los platos de acompañamiento y tratando de llegar a casa antes que Yujin; ella todavía estaba activa en la industria de la moda en ese momento.

Toma un poco. Sangwon empujó el plato hacia ella, abrió un cajón y sacó un par de palillos en una bolsa de plástico. Miyeon vaciló antes de tomarlos y tomar un poco de tonkatsu.

─¿Estás planeando quedarte fuera de casa? ─Sangwon preguntó mientras comía─. Tu madre ya no vive allí, estoy en el proceso de averiguar la mejor manera de proceder con el divorcio.

─Ya veo... ─Miyeon se apagó, dejando que las palabras se asentaran─. Incluso si ese es el caso... ya no puedo quedarme en esa casa. Y quiero ser más independiente y tener mi propio espacio para hacer eso. Si te divorcias de ella, entonces estaré más que feliz de ir a verte allí cuando sea posible.

─Sería feliz si eso sucediera ─Sangwon asintió─. Ah, Miyeon, sé que ahora es demasiado tarde, pero me disculpo por traerte de vuelta. Realmente pensé que era lo correcto, lo cual no es excusa en absoluto. Y también me disculpo por dejar que tu madre te tratara así. No tenía idea de lo físicamente violenta que era hasta que lo presencié yo mismo. Siempre pensé que era dura y sobreprotectora.

─Yo... no acepto tus disculpas ─Miyeon tragó saliva─. Pero gracias, ¿y cómo lo presenciaste? Sé que solo Seojun y Eunjoo estaban allí cuando ocurrió el último incidente.

─¿Han Seojun? ¿Eres amigo de él otra vez? Bien... siempre parecías feliz con él ─Sangwon reflexionó, las luces fluorescentes los golpeaban cuando los ojos de Miyeon se abrieron como platos ante sus palabras: ella siempre pensó que su padre lo odiaba, pero estaba comenzando a ver que tal vez solo estaba siguiendo lo que su vida decía para una vida más fácil, o porque había sido manipulado para que pensara eso. Kwon Yujin tenía facilidad con las palabras─. En cuanto a cómo me enteré, bueno, comencé a sospechar que algo estaba pasando en mi propia casa después de la reunión con los inversores.

─Oh. Y luego viste que todo sucedió ─Miyeon observó cómo su padre asentía─. Ya veo..

─Sí, fue molesto ─Sangwon tragó saliva─. Y lo menos que puedo hacer es ayudarte con las finanzas. Realmente lo siento, Miyeon.

Volvió a quedar en silencio por unos momentos, antes de que se escuchara el clic de las teclas y Miyeon observó cómo Sangwon giraba el monitor de su computadora─. Ahora, ¿quieres mostrarme este apartamento que quieres? Puede que no pueda verlo en persona, pero al menos me gustaría ver la versión en línea

Miyeon estuvo de acuerdo, la felicidad burbujeaba en su estómago. No solo porque había logrado que su padre accediera a ayudarla a comprar un apartamento, sino también porque su relación estaba comenzando a repararse a lo que alguna vez fue.

Ella estaba contenta por eso.