(MTL) Te vas sin decir una palabra

Capitulo 24

"No tengo miedo de un caballero tan pequeño".

En cuanto se mencionó el nombre de Caín, los ojos de Juan se llenaron de hostilidad. Su rostro, distorsionado por la codicia y el deseo, estaba tan lleno de ira que ni siquiera podía abrir los ojos.

Las ropas raídas que llevaba mientras se hacía pasar por cochero olían a alcohol fuerte. John Calvino, que suele estar borracho, parece haber hecho esto de nuevo después de beber.

Había una luz roja en mi cabeza. Es imposible impedir que un hombre violento beba alcohol.

Me recordó la experiencia de años viendo el "Mangit" de John Calvino. Era imposible detener a John Calvino, que había bebido mucho.

La única forma de acabar con su mala racha era que apareciera Christian, que odiaba el ruido, para regañar a su hermano, o que apareciera Stella, preocupada por el cansancio de su hijo, y lo llevara al dormitorio.

Pensaba que no volvería a verla después de todas las burlas que había sufrido en la noche de su cumpleaños, pero la obsesión de John superó fácilmente sus expectativas.

Al no tener tiempo para pensar en el punto de contacto entre la Gran Guerra y el Conde Calvino, Agatha buscó rápidamente escapar de la situación.

¿Cómo puedo detener a John Calvino y salir de aquí? Intenté pensar rápidamente, pero mi mente ya estaba en blanco en una crisis tan inesperada.

"No digas su nombre delante de mí. ¿Entiendes, Agatha?"

"Despierta, John Calvino", si sigo pareciendo una princesa idiota a la que la Condesa le ha dado una paliza, tendré que cambiar de opinión".

"Eso es gracioso. El conductor se puso de su lado y pensó que eras algo, pero no eras nada. Agatha Christine".

"No, no soy yo, eres tú. Contrólate".

grité en voz alta, pero como él dijo, no parecía haber nadie aquí para ayudarla, y estaba en silencio. Ni siquiera sabía dónde estaba. Al mirar por la puerta, no pude ver nada en la oscuridad.

Ethan. Era Ethan quien tenía más posibilidades de ayudarla. El carruaje de los guardias estaba separado del que ella montaba, pero el sentido del caballero que había pasado por muchas guerras era mucho más agudo de lo que los prisioneros se atrevían a esperar.

Si había convivido con Caín como caballero durante mucho tiempo, tal vez se hubiera dado cuenta de lo que le había ocurrido a Ágata y estuviera corriendo hacia ella.

Si es así, sólo tiene que aguantar hasta que aparezcan los caballeros. Tenía que impedir que John se la llevara de alguna manera.

"¿Sabes lo que estás haciendo?"

"¿Es un pecado encontrar a una mujer para que sea mi novia?" Tú eres mía. Fue Caín quien me robó la mía".

El diálogo lógico ya es imposible. Agatha tragó saliva. Estaba preocupada por Rihanna fuera del vagón. Con qué violencia agitaba el puño parecía haber perdido la cabeza a golpe de Juan.

"Bueno, ya es suficiente. De todos modos, has vuelto a mí, y no te dejaré ir nunca más".

"¿Vas a secuestrarme?" ¿Quién será el marqués? Estás loco".

"No, tendrás el nombre de Calvino". Siendo mi esposa, calentando mi cama".

La cara de Jhon, que sonreía mientras hablaba, estaba horrorizada.

"Por mucho que anunciara que iba a ser el hombre de Christine, ¿querría casarse con una mujer que fuera abrazada por otro hombre?". Pues no lo creo".

"¿De qué estás hablando?"