(MTL) Te vas sin decir una palabra

Capitulo 108

Caín, que había terminado de excusarse por los errores del pasado hablando de su hermana, mantuvo la boca cerrada durante un rato y se concentró en frotarse las piernas.

"¿Cómo estás, no estás mejorando?"

No era una exageración decir que conocía bien la forma y el uso de los músculos trabajando con el cuerpo. Agatha miró sus piernas más claras. La mano de Charlotte frotando sus piernas todas las noches fue útil, pero nada comparado con la de Cain.

"... ... Sí."

"Afortunadamente, el. Puedo ayudarte con cualquier cosa.

¿Qué diablos está pensando este hombre? Agatha miró la cara de Cain, mirando la cara de Cain. A primera vista, la misteriosa expresión de su rostro parecía la de un esposo amoroso que frota con cuidado las piernas de su amada esposa. Resistí la risa.

Incluso si había alguna razón para su capricho desconocido, pensé que no tenía nada que ver conmigo. No importa qué excusas den, no serán una razón válida para las heridas que han sufrido.

Aún así, los dos duraron mucho tiempo.

Los párpados de Agatha, que habían estado aceptando en silencio el toque de Cain, se volvieron más pesados. No quería quedarme dormida con mi cuerpo confiado a él, así que apliqué fuerza en mis ojos un par de veces, pero no fue suficiente.

¿Mencioné que lo más pesado del mundo son los párpados? Finalmente, Agatha apoyó la cabeza contra el pilar de la cama y comenzó a quedarse dormida.

Al descubrir esto, Caín abrazó con cuidado a Agatha y la acostó en la cama.

No era la primera vez que tocaba su cuerpo dormido, así que tuve más cuidado. En el momento en que puse la almohada debajo de mi cabeza y la sostuve, recordé el pasado y mi corazón dolía por la culpa.

Incluso sentirse culpable era pecaminoso y vergonzoso. Aun así, sentí lástima por mí mismo que estaba tan feliz de haberla tocado.

Cain, que había colocado a Agatha en la cama de forma segura sin despertarlo, suspiró aliviado y se sentó en la silla junto a la cama.

Puso una manta sobre su barriga y colocó su mano nuevamente sobre sus piernas ligeramente expuestas. Era una mano mucho más suave que antes.

Todavía era delgada, pero sus piernas hinchadas daban pena porque había sido abusada durante el día.

Según Charlotte, el cuerpo de una mujer con hijos no era normal. En particular, una mujer, como Agatha, que originalmente era débil, dijo que era casi un milagro tener vida en su interior. Fue a Caín a quien se le entregó un cuenco de agua sin dudarlo y fue directamente a la habitación después de escuchar la explicación de que las piernas que soportaban la carga se hincharían por la noche porque se aferraba a una vida a la fuerza.

También estaba el significado de tener tiempo para hablar con ella a solas, pero más que eso, quería ayudarla un poco.

Cuando se despertó por la mañana, Cain presionó los dedos debajo de los pies de Agatha, con la esperanza de que no le dolieran más las piernas.

Mientras se sentaba incómoda y luego se movía a una posición cómoda, Agatha parecía haber caído en un sueño profundo. Después de mirarla a la cara mientras exhalaba coloridamente, Cain volvió a mirar hacia abajo. Se le ocurrió que nunca fue su trabajo espiar el rostro durmiente.

"... ... Cuando yo era muy joven, Agatha.

Caín comenzó su historia en voz baja. Aunque ya está dormida, no podrá oírlo.

"Mi madre a menudo me frotaba las piernas así. Las criadas cercanas a la madre intentaron persuadirla de que la reemplazarían, pero no pudieron vencer su sutil terquedad. Todavía recuerdo vívidamente el rostro benévolo de mi madre, que sonreía y me frotaba las piernas con las criadas indefensas detrás de ella".