Paraíso del Infinito Parte 2

222. La edad oscura. (2)

Paraíso del Infinito de FanHarem.
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"¡Aagh!" Aang dejó escapar un grito de sorpresa cuando la sustancia negra, sospechosamente pegajosa se aferró a él a pesar de su apariencia de niebla y lo cubrió por completo mientras su cuerpo permanecía atrapado contra el suelo. Trató de enroscar su cuerpo y respirar fuerte, pero el aire pasó a través de esta sustancia a pesar de su sensación física y una pizca de conmoción se instaló en su corazón. Esto no era Fuego Control y lo único que encajaba a la perfección era—Energía Control.

La risa de Ozai desde el otro lado sonaba amortiguada, pero cuando Aang comenzó a luchar solo por respirar, sintió que había escuchado a Sun, y en verdad, un joven de piel bronceada con ojos verdes hastiados que revelaba su sorpresa ante la vista corrió hacia la entrada y gruñó mientras solo vio un extremo del bastón de Aang sobresaliendo, "¡Déjalo ir!"

Los lados de los pasillos se convirtieron en lava mientras Ozai fruncía el ceño y retrocedía a grandes zancadas mientras le lanzaba a Sun una mirada amenazadora, pero la niebla oscura que brotaba de él no parecía afectada por la lava.

"¿De verdad quieres lastimar a tu propio aliado, maestro lava?"

"Entonces, ¿por qué te retiraste?" Sun sonrió, tomó una postura amplia e instantáneamente lanzó golpes que causaron que ráfagas de lava volaran hacia Ozai, quien esquivó con su expresión cambiando constantemente.

"¡Estás siendo una terrible distracción y debo pedirte que pierdas tu vida!" Ozai resopló y Sun reveló una expresión de incredulidad.

"¿Crees que hablar me detendría?" Sun cuestionó.

"No, pero debería distraerte". Ozai sonrió cuando un repentino y poderoso estallido de energía eliminó la pegajosa 'niebla' con Aang flotando rápidamente en el aire, sus ojos y tatuajes brillando en un azul exasperantemente brillante con su mirada fija en Ozai, cuya esclerótica se volvió completamente negra una vez más.

"Muy amable de tu parte mostrarte también, Raava". Ozai sonrió pero se veía claramente diferente. Menos... real y estoico.

Sin embargo, la expresión de Aang se volvió de sorpresa cuando miró hacia atrás para encontrar a Sun de rodillas con el pecho atravesado por un brazo delgado unido a una mujer de piel oscura que luchaba y cuyos ojos azules se llenaban de lágrimas.

El brillo en los ojos de Aang se desvaneció cuando cayó al suelo, sus labios entreabiertos por la sorpresa y sus ojos muy abiertos también.

"Rena..."

Aang murmuró cuando apenas un gemido escapó de los labios de Rena antes de dejar que sus labios se estiraran en una sonrisa fea e inquietante mientras su propia mano cortaba su cuello con la misma niebla negra cubriendo su palma.

"¿Q-Qué? ¡Oye! ¡Sun! ¡Rena!"

Aang gritó y corrió hacia ellos, con su bastón de lado y sus ojos muy abiertos por el horror.

"Aang, ¿qué está pasando aquí?" Una voz algo infantil sacó a Aang de su aturdimiento y conmoción cuando miró hacia arriba y le gritó a Tom-Tom: "¡No, huye de aquí! ¡Ahora!"

"¿Qué?" Tom-Tom corrió hacia Aang con una sonrisa, "¿Parece que viste un fantasma? Oh, ¿o tal vez yo muriendo?"

Con una dulce sonrisa, Tom-Tom apuñaló una de sus cuchillas debajo de sus mandíbulas. Sus labios se abrieron lentamente cuando el chico de ojos ónix susurró: "Perdiste, Avatar... nos has decepcionado por última vez".

Como si esto no fuera suficiente, Katara alegremente 'sonriente' pero con lágrimas en los ojos corrió hacia el pasillo con un Sokka sangrando, "¡Mira! ¡Maté al único miembro de mi familia! ¡Pfft, jajaja! Yo-yo, s-salva…..- Oh , espíritu sorprendentemente resistente", se recuperó rápidamente cuando 'Katara' descargó a Sokka cerca de Rena y se rió, "Oh, Aang, parece que viste un espíritu".