Paraíso del Infinito Parte 2

225. La edad oscura. (5)

Paraíso del Infinito de FanHarem.
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El sonido de pasos apresurados resonó dentro de la línea de alcantarillado de ciudad fénix cuando un anciano corpulento trotaba apenas junto a un niño calvo y tatuado que tenía los ojos "pegados" por un material oscuro. Resoplando y sudando constantemente debido al esfuerzo físico mientras sentía que su corazón casi saltaba de su pecho en una rebelión abierta, el anciano jadeó: "Aang, déjame en paz. Recuérdame no como el anciano que no podía correr, sino como el apasionado creador de té que era amado por todos... bueno, mi hermano no, obviamente..."

El chico de repente se dio la vuelta y arrastró el extremo de su bastón a través de la pared de piedra mientras una sección de ella se arrancaba, lo que provocó que muchos soldados chocaran contra la repisa de la pared y cayeran hacia atrás con gemidos de dolor mientras Aang movía torpemente su cuerpo para crear una marea de lodo que instantáneamente ahogó a los guardias y los congeló.

"Nunca supe que Toph lo tenía tan difícil sin ojos, pero estoy seguro de que ella consideraría esto como un buen entrenamiento para mí", eligió Aang para mencionar el aspecto positivo de su situación antes de mirar a Iroh con una sonrisa burlona. “Iroh, yo, el Avatar, también he dominado el Lodo Control. Un antiguo arte perdido en las mareas del tiempo".

Inclinado sobre sus rodillas y todavía resoplando, Iroh negó con la cabeza, "Nik contó una historia en la que hizo lo mismo hace meses... domina el agacharse para orinar y te las arreglarás para derribarlo".

La sonrisa de Aang se congeló por un segundo antes de reírse y comenzar a trotar, "Deberíamos irnos. Otros vendrán por nosotros muy pronto y todavía no hemos pensado en una manera de salvarlos".

Iroh resopló y asintió. En lugar de trotar, optó por una caminata vigorosa que no hiciera que su barriga se moviera hacia arriba y hacia abajo.

El dúo continuó a la deriva a través de las líneas de alcantarillado de la ciudad con un solo objetivo: esconderse el tiempo suficiente hasta que formularon un plan lo suficientemente bueno en sus libros para salvar a sus amigos y familiares.

Pero sus caminos nómadas se vieron interrumpidos rápidamente cuando Iroh y Aang tropezaron con un par de individuos con capas rojas parados frente a sus caminos por un tiempo desconocido. Al detenerse y prepararse rápidamente para la batalla, el dúo seguramente fue golpeado de costado por el giro de los acontecimientos cuando los individuos encapuchados se arrodillaron en el sucio borde empedrado de la alcantarilla y susurraron: "Anhelábamos verte, Avatar". uno de ellos habló con una voz suave y femenina mientras las cejas de Iroh se contraían al ver a estas dos figuras misteriosas. Incluso Aang frunció el ceño ya que solo podía sentir a los dos individuos arrodillados retirarse la capucha de sus capas MUY suavemente... era como si casi no tuvieran peso a pesar de estar sentados.

Algo que Toph estaba molesto por Aang y, a cambio, Aang estaba molesto por el dúo.

"Aang…" Iroh jadeó suavemente mientras la realización golpeaba al chico también.

'pies ligeros...' Aang recordó el apodo que Toph le dio y se quedó un poco boquiabierto. No necesitaba ver a los individuos masculino y femenino arrodillados frente a él. Con el joven varón calvo luciendo un tatuaje rojo en forma de flecha sobre su frente que se extendía más allá de su cuello, y la adolescente femenina con su cabello castaño atado y revelando igualmente un tatuaje en forma de flecha en el centro de la frente todavía arrodillados y mirando mirando a Aang con una expresión casi reverente, el chico no pudo evitar tragar saliva.

"Maestro Iroh... Siento que uno de ellos es calvo... y el otro no... espera, una de sus cabezas tampoco tiene pelo, pero el calvo tiene el pelo largo..." Aang frunció el ceño y Iroh resistió el impulso de comentar. Estaba claro que un Saqueador Mesías rompe tuvo demasiada influencia en el joven Avatar mientras el dúo arrodillado se miraba y decidió ignorar el comentario en un acuerdo silencioso dado que el Avatar era funcionalmente ciego. Pero un destello algo molesto pasó por los ojos de la mujer cuando sus mejillas blancas se pusieron rojizas.