|Mitad mentira, mitad verdad| Christopher Vélez

Capítulo 43

___'s POV.
Una vez que el juez dictó sentencia para Richard, yo sentí que el alma me había vuelto al cuerpo, al fin, finalmente estaría donde debe estar.
Solté un suspiro y agradecí a los abogados.

- Tendrá largos años para reflexionar, felicidades ___, fuiste muy valiente - Le dijo Diego.
- Nada hubiera sido posible sin ustedes, de verdad gracias - Les respondí agradecida.

Comencé a despedirme de ellos hasta que finalmente me quedé de frente con Christopher.

- Gracias - Dije con una pequeña sonrisa.
- ¿Gracias por qué? El que tiene que agradecerte soy yo - Mencionó.
- Bueno, ya hiciste lo correcto, sinceramente acabas de darme tranquilidad y paz, además, el hecho de que tomaras mi mano sirvió muchísimo, así que, gracias Christopher - Reitere.
- Es que no mereces menos, te juro que de haber sabido lo que pasaría, ésto habría ocurrido desde hace mucho, ahora solo, ¿Puedo darte un abrazo? - Preguntó sin despegar su mirada de la mía, esa mirada que me está matando.

Sin poderme negar asentí, y entonces sentí que mi corazón volvía a latir por sentirlo tan cerquita, por tenerlo pegado a mi pecho, porque no voy a negar algo que es muy evidente, Christopher sigue siendo el dueño de mi amor.

- Quiero soltarte, quiero dejarte ir pero te amo, siento que han pasado mil años, no puedo resignarme y aceptar que te perdí, sé que mereces un amor a tu altura, pero me equivoqué y lo único que puedo ofrecerte es algo que no debes aceptar, y me rompe el alma entera, pero mereces más mi bonita, mucho más - Comenzó a decir.
- No Chris - Pedi con la voz cortada.

Maldita sea, lo amo con cada parte de mi ser, me duele tanto verlo así, sus palabras penetran mi alma y siento que en cualquier momento voy a romperme frente a él.

- Es mejor que me vaya - Aseguré.

Me separé de él y dejé un beso en su mejilla, tengo que salir ya de aquí.

- Gracias por estar aquí y ser parte del proceso - Mencioné en dirección a mi familia y la de Christopher.
- Eres mi hija, no puedo hacer menos por ti - Comentó mi papá.
- No tienes que agradecernos, te amamos ___ - Dijo mi mamá.
- Ya se te ha hecho justicia, no había menos - Mencionó la señora Yenny.
- Al fin ___ - Completo el señor Leonardo.
- De verdad se los agradezco, ya debo irme, hasta luego - Mencioné.

Le di la mano a cada uno, Alex hizo lo mismo y sin más salimos de ahí.
En cuanto subimos al auto, Alex como piloto y yo a su lado, me puse las manos en el rostro y me solté a llorar.

- Lo sé, lo sé pequeña, déjalo salir - Dijo acariciando mi espalda mientras me abrazaba.
- Está claro que no voy a poder Alex, no quiero olvidarlo, no quiero dejar de amarlo, Christopher es el hombre que amo y no sé cómo arrancarle la memoria a mi corazón, te juro que me vuelvo sensible cerca de él, no sé que hacer - Dije.
- Una herida superficial necesita bastante tiempo para poder sanar, la piel debe regenerarse, el tiempo que una herida interna necesita es muchísimo más, porque implica más que la regeneración de la piel, más que cualquier otra cosa, dale tiempo al tiempo, poco a poco te darás cuenta de que, o su destino es estar juntos, o con otras personas, no lo hagas por impulso, no te aferres a una idea, no lo odies por impulso, no lo ames ni perdones por impulso, hasta que sientas que estás completamente lista, hasta ese día será el momento exacto -.
- Ay Alex, gracias de verdad, gracias por estar conmigo -.
- Eso jamás va a cambiar, te lo prometo pequeña - Afirmó.

|Un mes después|

- Mira, ¿Qué crees que falte? - Preguntó Santi mostrándome uno de los vestidos de mi nueva colección.
- Creo que podríamos ponerle brillos por aquí, y con una cinta como accesorio incluido definitivamente vamos a lograr que estilice la figura de una forma increíble - Mencioné.
- ¿Los brillos los agregamos en esta parte o puede ser solo aquí? - Inquirió.
- Hazlo solo ahí, menos es más y se verá increíble, seguramente vamos a -.
- ___, lo siento, lamento mucho interrumpir pero te trajeron ésto -.

Mi mirada se dirigió a Ximena y entonces mis latidos comenzaron a acelerarse, en sus manos se encontraba un gran arreglo de flores, mis favoritas.

- ¿Y quién las mandó? - Pregunté acercándome a ella.
- No lo sé preciosa, el repartidor solo me dijo que quién las envió también dejó una nota - Me informó.
- Ponlas ahí por favor - Pedí señalando dónde podía dejarlas.
- Ay Dios mío, me voy a morir con semejante detalle, ve ya de quien son mujer - Dijo Santiago emocionado.

¿Alex me mandaría flores? Definitivamente no estoy saliendo con alguien y tampoco tengo intensiones de hacerlo, tampoco conozco a alguien que sepa de mis gustos florales exactos, no quiero adelantarme a sacar conclusiones, así que me acerque a las flores y tomé la nota.

Ya sé que debo esperar, debo ser paciente y comprender que una mentira duele cuando viene de la persona que amas.
El amor no se puede negar y mucho menos ocultar, y dentro de mí todavía hay mucho que darte, aún no te muestro ese lado bonito del amor, aún no hemos tenido suficiente tiempo.
Te amo, eso jamás va a cambiar, pero justo porque te amo es que te voy a esperar y voy a luchar por ti y tu perdón, eres lo mejor de mi vida y de eso no tengo dudas, jamás las tendré.

Christopher Vélez... Te amo bonita...

Solamente podía sentir como las piernas me temblaban, como mi corazón latía a mil por minuto al leer aquello, al saber que de su puño y letra vienen estas palabras, esa forma que tiene de hacer la letra v, y esa letra a tan rara que hace, esta nota me gusta mucho más que las mismas flores, y no es que estén feas, pero escribió algo para mí, algo que quiero creer que salió del fondo de su corazón, algo que estoy sintiendo muy dentro del mío.
Quiero creer en él, quiero deshacerme de este vacío tan horrible que siento dentro de mí, quiero dejar que mi corazón ame a quien tenga que amar, quiero solo salir de esta amargura que apachurra mi corazón, quiero perdonar pero sé que me va a costar mucho trabajo, recuperar la confianza es algo con lo que suele llevarse mucho tiempo, y me asusta todo lo que pueda pasar en ese lapso.
Creo que no puedo seguir negándome a acudir a la terapia, tengo que soltar lo que traigo adentro, necesito escuchar a una persona ajena a mí, necesito que me ayuden a decidir, a saber cómo actuar de forma correcta, ya sé que todos estamos muy dolidos, pero ahora quiero enfocarme en mí para poder saber que hacer con los demás.

- ¿Y? ¿Podemos saber quién las envió? - Preguntó Santi mirándome con emoción.
- ¿No te lo imaginas? - Lo miré.
- Bueno, son tan bonitas que creo saberlo, pero no voy a decir nada que pueda afectarte, así que adelante cariño, confirmalo tú -.

Sonreí y guardé la nota.

- Las envió Christopher, estas flores tan bonitas las envió Chris - Dije aún con esa sonrisa.

¿A quién engaño? No puedo decir que no me gustaron, aunque lo que más me gustaría recibir son hechos, acciones que me dejen saber que voy a elegir el camino correcto.