Capítulo 19: Sorpresas inesperadas

174 23 0
                                    

Aylen

—Mañana habrá una fiesta en casa de un amigo de Aidan.

—Ni siquiera preguntaré cómo lo sabes de primera —le digo a Ellie mientras me atraganto de papas fritas. Podría vivir con eso el resto de mi vida y sería feliz.

—No empieces —me arroja un pedazo de la pieza de su pocho. Logro atraparla con la boca y ella solo rueda los ojos a la vez que yo sonrío triunfante —. ¿Vas a ir?

—Es martes.

—¿Y qué me importa?

Ruedo los ojos y le doy un sorbo a mi batida de sandía.

—Bueno, no estoy muy segura.

—Adrien irá.

Sube y baja las cejas y yo evito tirarle de mi comida, pero no, está muy buena como para desperdiciarla. Además, las personas a nuestro alrededor pensarán que somos dos niñas.

Aunque tampoco es que me importe mucho, eh.

—Ya veremos —respondo.

Aunque mi respuesta es un claro que sí, pero simplemente no quiero darle una oportunidad de burlarse de mí y por la sonrisa que emboza sé que ella sabe.

La ignoro y sigo comiendo, cuando ambas terminamos pagamos entre las dos y luego empezamos a caminar por el parque.

Ellie mueve sus dedos nerviosa y solo estoy esperando que lo suelte y ya, porque sé que algo me va a decir pero no sabe cómo empezar.

Por lo que, al cabo de unos quince minutos en los que solo caminamos, me giro hacia ella.

—¿Me dirás que te tiene tan nerviosa o tengo que sacártelo yo mismo? —me cruzo de brazos.

—¡Así no te voy a decir nada!

Miro al cielo y luego tomo aire.

—Ven, sentémonos aquí.

Tiro de ella para tumbarnos debajo de un árbol luego de asegurarme que no haya ninguna mierda de animal... o de persona, uno nunca está seguro.

Aquí tenemos privacidad, cada quien está enfrascado en lo suyo alejados de los demás.

—A ver, ¿por dónde voy a empezar?

—¿Por el principio? —pregunto obvia y me gano una mirada mortal de su parte que me dice que me mantenga en silencio, por lo que carraspeo y levanto las manos — Vale, me callo.

Asiente varias veces.

—Anoche pasó algo...

Se queda en silencio unos segundos y me mira significativamente.

—¿Qué?

—¡Tienes que preguntarme qué es para hacerlo más emocionante, tonta!

Es que no la entiendo.

—¿Y qué pasó anoche, Ellie? —le pregunto despacio.

Carraspea.

—Eh... no podía dormir bien anoche que digamos —empieza a contar mientras evita verme a los ojos. Ay no, ya me puedo hacer una idea por dónde va —. Entonces fui a la cocina, Aidan estaba ahí, tomándose un vaso de jugo porque al igual que yo tampoco podía dormir. Empezamos a hablar muchas cosas y hasta me enteré de algunas que no sabía. Por cierto, me dijo que no le gusta ir al cine. ¿Puedes creer eso?

—Hey, céntrate en lo que estabas diciendo —chasqueo los dedos frente a ella.

—Ah, sí, sí, tienes razón. Bueno, una cosa llevó a la otra y nos acercamos y... yo lo besé —me tapo la boca para no chillar —. No es la primera vez que lo hago, que digamos, pero esta vez...

Conquistándolo [Libro 1 & 2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora