Capítulo 35: ¿Qué es lo que quieres, Hübsch?

192 24 2
                                    

Lean la notita al final plis

Aylen

Llegamos a la mansión cerca de las tres de la madrugada.

Audrey es sostenida por Cameron y Ellie permanece plácidamente dormida sobre los brazos de mi hermano. Max se tambalea así que alcanzo a pasar su brazo por mi hombro y conducirlo por las escaleras.

Emery y Adrien de quedan en la sala de estar.

Casi a rastras ayudo a Max a subir y entrar a la habitación en la que se queda, lo acuesto sobre su cama y luego procedo a quitarle los zapatos.

—¿Sabes? Desde la noche que los vi juntos en casa de Nick supe que ustedes tenían algo —dice con los ojos cerrados.

—¿De quién hablas?

—Adrien —responde obvio.

—Ah.

Busco el cobertor y tapo su cuerpo.

—¿Te gusta? Que tonto, si la forma en la que lo miras te delata.

—¿Qué forma?

Muy pocas veces he visto a Max borracho, pero siempre que pasa se torna algo... hablador.

—Te brillan los ojos. Ni siquiera a mí me observabas así.

Respiro.

—Max...

Medio abre los ojos.

—Está bien, a veces pienso que nunca debimos cruzar la línea de amistad. Quizás... —su voz se va apagando, el sueño venciéndolo — quizás si no lo hubiéramos hecho seguiríamos siendo amigos.

Toco su frente y aplano mis labios en una línea.

—Siempre puedes contar conmigo, Max —le digo en un susurro —. Sigo siendo tu amiga.

—¿Aún con lo que hice?

Apago la luces.

—Descansa.

Empiezo a caminar hacia la puerta cuando las palabras que salen de su boca me detienen.

—Lo siento mucho, Aylen —su voz se rompe —. Yo nunca quince hacerte daño... mucho menos con ella. No debimos hacerlo.

Por unos cuantos segundos me quedo en silencio, asimilando lo que acaba de decir.

—¿Ella? —pregunto volviendo sobre mis pasos — ¿Quién es ella, Max?

Pero él ya está dormido.

Mi cabeza empieza a buscar respuestas, rostros, pero nada. Es obvio que hablaba de la chica con la que me engañó. ¿Pero quién es ella?

Voy a la habitación y me quito el vestido, cubriendo después mi cuerpo con una sudadera desgastada que me llega hasta los muslos. Mientras estoy en el baño desmaquillándome las palabras de Max no abandonan mi mente, una vez le pregunté quién era ella, pero no quiso decirme. No insistí más porque sabía que me iba a romper si la viera.

¿Pero ahora? Ahora sí quiero saberlo, hablaré con Hazel para saber lo que ha indagado estos días, pretender que Max me dirá si le vuelvo a preguntar es un caso perdido. Lo conozco y sé que no cederá.

Ellie descansa en la habitación de mi hermano, yo no tengo sueño y mi cuerpo pide comida, por lo que bajo a la cocina.

Las luces están apagadas, lo único que medio ilumina la sala en este momento son las luces del exterior.

—¿A dónde vas?

—Joder.

Cierro mis ojos con fuerza al escuchar la voz de Adrien a mi espalda. ¿Y Emery? Se nota que no está cerca.

Conquistándolo [Libro 1 & 2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora