Capitulo 10

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Tal y como había propuesto Maria, el sábado siguiente quedaron para ir de compras. Pero antes de eso Alba y Natalia se vieron varios días, entre ellos el día siguiente a la comida. No es que hicieran algo especial, simplemente pasar la tarde juntas e intentar conocerse un poco mejor.

Esa tarde habían quedado en una de las zonas comerciales de Berlín después de comer. Llevaban más de una hora y Maria ya se había comprado dos modelitos para estrenar en la playa y Julia uno. Lo que faltaba era lo más importante, según Natalia, los trajes de baño. Por fin entraron una tienda que vendía precisamente eso. Enseguida todas se pusieron a mirar, pero Natalia se encontró un poco perdida, no sabía que tenía que comprarse, nunca había necesitado uno, los había de colores varios, más tapados, menos tapados...

- Cuanta más tela más difícil nadar. - Le informó Alba a Natalia que estaba mirando precisamente los trajes de baño más recatados.

Y sin decir nada más cogió la mano de Natalia y tiró de ella hasta el otro lado de la tienda donde estaban los bañadores más modernos, no es que hubiera mucha diferencia, pero al menos no tenían tanta ropa innecesaria.

- Mejor uno de estos. - Dijo Alba al llegar al lugar.

Natalia se sonrojó mirando esos modelos, enseñaban demasiado para su gusto, ella era demasiado pudorosa para ello.

- ¿Qué? - Preguntó Alba pese a saber por dónde iban los tiros.

- En... enseñan mu... mucho. - Tartamudeó Natalia.

- De aquí unos años esto. - Dijo Alba señalando los trajes de baño que tenían delante. - Será ir muy tapado. - Le informó a Natalia.

- Yo... yo prefiero aquellos. - Dijo señalando hacia la otra punta de la tienda.

- Sabes que la ropa mojada pesa más ¿no?

- Si... - Dijo Natalia sin saber por dónde saldría la rubia.

- ¿Con cuál te crees que sería más fácil nadar? - Le preguntó señalando los dos tipos de traje.

Natalia no tuvo más remedio que señalar el que tenía enfrente.

- ¿Y qué vamos a hacer en la playa? - Preguntó Alba.

- ¿Tomar el sol? - Probó suerte Natalia.

- ¿Y con cual te va a dar más el sol?

Natalia volvió a señalar los que tenía enfrente, sin duda Alba estaba ganando esa batalla.

- Pruébate alguno a ver cómo te ves con él puesto. - Propuso Alba mientras cogía uno negro. - Este hace juego con tus ojos. - Dijo tendiéndole el traje de baño que había seleccionado.

A Natalia no le quedó más remedio que ir a probarse el traje. Cuando lo tuvo puesto se quedó un buen rato mirándose en el espejo sin creerse lo que veía.

- ¿Ya estás? - Le preguntó Alba desde fuera.

- Si... - Murmuró Natalia por lo bajo.

- ¿A ver? - Pidió Alba.

- No. - Negó Natalia con la cara como un tomate, dando gracias a que Alba no la podía ver, cosa que agradecía mucho en esos momentos.

- Vamos... Pero si en la playa te voy a ver... - Pidió Alba sabiendo que en esos momentos la morena debía tener uno de sus ataques de timidez.

Natalia maldijo en su interior y terminó saliendo para que Alba la viera.

- Preciosa... - Susurró. - Te queda perfecto Natalia. - Dijo Alba con sinceridad consiguiendo que Natalia se pusiera completamente roja.

Serendipia (Albalia)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora