Punto pequeño

*Capítulo 40* (Último capítulo)

El siguiente día nada empeoró en la vida de Janet, ni siquiera le importaba tanto levantarse temprano, porque ya lo había estado, pues solo quiso saber como resolver esos ejercicios, tratando de pensar y pensar, para así no olvidarse de nada.

Su mamá la llevó directamente al colegio, antes le compró algunas cosas para que pudiera comer. Le compró unas dos galletas y una bebida enlatada.

—Este va a ser tu último año en este colegio, por eso necesitas estar muy firme, aprovechar este año.

—Eso mismo diría cuando me encuentre en el último año de secundaria, todo en mí se va a romper demasiado, aunque prefiero no mencionar ese tema.

—Te han puesto notas, a pesar de que no hayas estado presente en el colegio.

—¡Sí lo estuve mamá! Solo que estuve participando virtualmente para que al menos me pudieran considerar —le aclaró Janet en voz alta.

—Mmm, quiero también decirte que he visto tus notas más recientes y como ibas en la tabla, y me he topado con la sorpresa de que estás muy bien, tanto que podría felicitarte por tus logros.

—Quisiera que me compraras el libro que necesito y siempre necesité, es algo muy personal que necesito.

—Mmm, ¿dónde es Janet? Porque yo solo estoy algunas casas.

—¡No mamá! No es una casa, es una tienda de libros —le informó Janet

—Aya, pero que ciega soy, no me he puesto a ver que en realidad era una tienda —le dio la razón su mamá—. Te lo voy a comprar si llegas a tener buena nota en algunas de las pruebas.

Janet salió corriendo para entrar al colegio, pues se hacía tarde y ya estaban a punto de cerrar la puerta.

A la única chica que vio parada a fuera del salón fue a Vania, que esta vez se disculpó con ella.

—¡Janet! Lo siento, lo siento, ¿podemos volver a ser amigas como siempre? Ya no voy a dejarme influenciar por las otras personas, solo voy a prestarte atención a ti.

—Eh, sí, no te preocupes además que yo también he cometido muchos errores, pero, tengo una pregunta —le contestó Janet.

—Puedes decírmela con gusto —dijo.

—¿Por qué estás acá esperando parada? 

—Eso también buscaba decírtelo, mira, me he cambiado a tu salón para que podamos estar juntas.

—La verdad no le veo necesario, es decir, me agrada estar contigo, pero ¿y tus otros compañeros? ¿Qué acaso no están tristes de que te hayas ido? —preguntaba Janet.

—Ellos solían molestarme bastante, tanto así que no pude con todo el dolor, debido a esto mi mamá habló con el director para que pudieran apuntarme en otro salón, y justo fue en tu salón.

Ellas entraron al fin y se sentaron juntas, y en los primeros asientos, que casualmente no estaban ocupados. La primera clase no dieron ninguna prueba, solamente eran cosas para hacer del cuaderno, aparte de la teoría.

La gente más le hablaba a Vania, por ser una persona nueva y porque pensaban que era interesante...

Sin embargo, ella nunca se salió del lado de Janet, mas la seguía a donde fuera.

Janet estaba en la cama de su amiga, junto a ella, viendo una revista vieja, de esas mismas que su mamá solía comprar en tiendas de segunda mano. Janet se imaginó sobre la vida de Cristina, así que se asomó a la ventana, con la idea de que Cristina estuviera ahí, pero todo era una alucinación.

—¿Cuándo vas a retomar ese grupo? —le preguntó Vania.

—¿Qué? ¿Cuál grupo? —le contestó Janet desconociendo del tema.

—Te acuerdas cuando hiciste un grupo en el que todos estaríamos apoyándonos, o al menos en el que podamos hablar el uno al otro, ¿si te acuerdas? 

—Ah, eso, creo que ya no nos vamos a reunir, además los chicos se encuentran muy ocupados con sus propias cosas, que no me interesan —le explicaba Janet—. A pesar de todo, no sé si me han invitado a una reunión, la última reunión donde cada uno debía de traer algo para comer.

—¡Suena increíble! ¿Para cuándo será ese día?

—Ay Vania, ¿cómo puedes decir eso cuando ni siquiera sé tanto del tema? No quiero saber de ellos.

—Voy a planear traer algo para comer y que juntas podamos estar.

—Suena bien.

Debido a que hubo una lluvia inmensa, Janet tuvo que irse a su casa, pues su mamá ya no quería a ninguna persona invitada; esto provocó en Janet algo que le hartaba: Estar mojada en la lluvia.

Llegaba el momento en el que las mismas gotas de lluvia entraban en su misma piel, a pesar de tener ropa. Llegó a la casa, pero con su mamá en algunas conversaciones por teléfono, según ella, para poder definir el cómo sería la promoción, a pesar de que el año aún no terminara.

—Mamá, no busco interrumpirte ni nada de eso pero...

—Hija, te tengo una nueva noticia, resulta que todas las personas van a pasar de año incluyendo tú misma.

—No hay nada que me sorprenda, ni siquiera algo en lo que pueda sentirme orgullosa, ya que hasta pasar de año es algo fácil —repuso Janet.

—Todo va a salir bien, además aún queda algo por hacer...

—¿Qué cosa?

—El director dijo que se le va a premiar a los 3 primeros puestos, y yo creo que tú vas a estar.

Janet se quedó en su cuarto, viendo algunos videos y decoraciones que le podrían servir para su cuaderno. Su rostro no lloró ese día, es más, se sintió bonita, más guapa de lo normal.

Al día siguiente, Janet se puso a estudiar para algunos cursos, saliendo siempre bien. De las 7 pruebas de hoy, todas habían salido bien.

Ella siguió así hasta un punto en el que nadie la podía parar. Casi siempre apagaba su celular después de irse al colegio, y solo lo usaba para poder hablarse con Vania.

En el último mes de las clases, Janet logró el puntaje total requerido para pasar de año, y no solo de eso, sino también para ser el 1.er lugar, intentando competir con algunas secciones, de las cuales ella posteriormente salió ganadora.

Hubo mucho desgaste para Janet, pues le cansaba tener que estudiar a cada momento, sin descansar.

Cuando las clases terminaron ya se tenía decidido cómo sería la fiesta de promoción, aunque debido a la economía se tuvo que hacer en la casa de una compañera, en una casa que parecía una mansión, o un local donde te hacían tu fiesta de 15 años.

Janet se puso a pensar: ¿realmente esto le pasaba en su vida? Quería despertarse si en caso todo esto era un sueño; sin embargo, no lo había sido, no, no.

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Data:

Punto pequeño

Capítulo 40

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Publicado el: 26-03-2024