A veces eres realmente molesto

Capítulo 23: El Balón y... ¿Un Plan?

Heechul posaba su mirada en Donghae y luego en Eunhyuk, intercalándolas para encontrar la más mínima señal de nerviosismo en ambos, algo que le dijera que iba por el camino correcto en la situación.

-HyukJae, aún tengo una duda que me carcome el cerebro- dijo de pronto con la mirada perdida –Cuando dos mejores amigos empiezan a tener problemas de comunicación también tienen discusiones, y cuando ninguno de los dos está dispuesto la amistad se destroza...- Todos miraban a Heechul atentamente a la espera de que revelara a que iba con esa explicación, pero no tardó mucho en darla. –Lo que quiero decir es que no es su situación. Donghae está intentando hacer algo para resolverlo, incluso está dispuesto a cambiar como quieras; y cuando uno de esos mejores amigos decide hacer todo por regresar a los buenos tiempos, el otro también lo intenta porque valora en algo esa amistad ¿no es así?

-¿Qué quieres decir?- pregunto Eunhyuk viéndolo mal por lo que creía que insinuaba, y Heechul también lo miro, esta vez con una sonrisa pintada en el rostro.

-Que tú no la valoras.

El silencio se volvió incómodo, totalmente lleno de un aura oscura donde las mentes de algunos estaban nubladas y las de otros revueltas en más de mil pensamientos. Todo eso termino cuando Donghae abrió la boca.

-Es... es eso ¿cierto?- dijo dirigiéndose a HyukJae que tenía la cabeza retenida entre ambas manos y su espalda encorvada. El menor se mordió el labio y se levantó rápidamente del suelo para irse dignamente, pero antes sintió que Heechul lo retenía.

-Tú tampoco la valoras si sales huyendo con esta afirmación. Si enserio quieres resolverlo volverás a poner tu trasero en el cojín.

-Pero... ¡Si él no quiere que volvamos a ser amigo COMO PUEDO YO OBLIGARLO!

-Él aún no ha respondido- musito Heechul sin despegar el ojo de Eunhyuk –Además, yo creo que si puedes hacerlo.

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-¡Ah HeeChul! No creo que sea buena idea- susurraba Leeteuk jugueteando con sus manos mientras caminaban ellos dos por la empresa sin tener agendas. Era un día muy extraño para el líder, sobre todo porque irían a ver a Lee Soo Man por puro capricho de su compañero, y no estaba seguro de porque lo estaba acompañando a hacer tal locura.

-Ya te dije Leeteuk que esto saldrá perfecto, después de todo queremos que esos dos vuelvan a ser amigos ¿no?

-Si pero... Aish yo no quería meterme, debemos dejarlos hacerlo solos.- insistía el mayor despelucándose un poco con las manos por su repentino nerviosismo. Ya estaban a un paso de la oficina. -¿Cómo se lo dirás al jefe?

-Ya veraz- ambos desaparecieron adentro de la oficina y fue ahí donde empezó la larga travesía que se había dibujado mentalmente Heechul, además de con un gran título esa aventura: "Regresando a la normalidad a los idiotas"

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En las habitaciones

HyukJae buscaba por todas partes el par de su zapato que llevaba horas buscando, incluso había removido las cajas llenas de basura inservible de cuando era apenas un adolescente, y nada de que apareciera. Estaba cansado y comenzaba a molestarse por lo que se dejó caer a un lado de la cama e hizo ejercicios de respiración para relajarse, era lo que mejor le funcionaba.

De repente la puerta se abrió de par en par y esa figura ya conocida entro como trueno dirigido al enorme almario. Donghae comenzó a buscar entre las cosas y salió con una caja mediana llena hasta el tope de objetos y ropa vieja; al pasar a un lado de Hyuk le dedico una pequeña sonrisa y sin esperar respuesta desapareció atropelladamente de la habitación.