A veces eres realmente molesto

Capítulo 28: Pelea por presumir, guerra por no tener...

Eunhyuk entro en la habitación antes que Donghae y se recostó en su enorme cama, estaba callado pensando en las circunstancias a las que se había enfrentado apenas hace unos minutos hasta que llego a su cabeza una loca idea infantil.

Donghae iba entrado cerrando la puerta por detrás para luego dirigirse al centro de la estancia donde se encontraba una mesa de centro, dos sofás de piel negros, una lámpara larga y brillante, y en otro extremo un enrome ventanal que dejaba a la vista un paisaje de ensueño sobre las edificaciones de la ciudad, aunque con algo más agregado....

-¿Qué haces?- pregunto el menor dejando su chaqueta sobre el respaldo del sofá y comenzando a desabotonarse la camisa.

-Mido la distancia- respondió apenas Eunhyuk sin despegarse de los cristales y asomando la cabeza por fuera de una de las tantas ventanas; tanto se inclinaba que Donghae ya sentía los temblores de su cuerpo y los impulsos de alejarlo sin que este pudiera percatarse.

-¿A-acaso... pi-piensas lanzarte?- su voz sonó con juego, aunque por dentro ya se estaba preparando para ir a detener al mayor, incluso su mente ya estaba planteado explicaciones que no venía nada al caso. Pero para su fortuna Eunhyuk se alejó en ese momento justo.

-Quisiera hacerlo- susurro apenas audible ya yendo de regreso a la comodidad del colchón. Donghae no puedo escucharlo.

El silencio era algo que se volvía últimamente solitario, triste e incluso frio al tacto, y para evitarlo Donghae comenzó a quitar de sus hombros aquella molesta camisa.

-¿Te ducharas?

-Si- suspiro cansado sin darle una mirada al semidesnudo menor –Necesito con urgencia esa agua caliente.

-Genial. Pero prométeme una cosa... ¿Usaras una bata esta vez?- Eunhyuk se incorporó al instante y poso su mirada en el formado cuerpo de Donghae, y entonces frunció el entrecejo lanzo una almohada con perversidad a su hombro. – ¡Yah Lee Donghae! Sabes que es una costumbre, no puedo evitarlo...

Donghae lo miro asombrado, ¿Acaso sus ojos y oídos seguían funcionando? Puesto que el puchero en sus labios y el tono que había usado para quejarse era el mismo de hace unos meses, aquellos donde todavía eran buenos amigos y se molestaban mutuamente, ¿Tal vez, era su señal para avanzar? Lo tomo como una afirmación.

-¿De verdad?... Tienes muy extrañas costumbres Hyuk-ah- decreto Donghae demasiado sonriente, tanteando terreno en lo desconocido y hablando con afán de molestar -Quien no te conociera diría que eres bastante suspicaz con tus cosas, pero... igual te paseas desnudo...

-¿Qué quieres decir con eso?- se alertó HyukJae notando las intenciones malévolas de su compañero, ¿cómo no conocerlo para saberlo?

-Que comienzo a pensar que lo haces a propósito...- Donghae se acercaba cual tigre al asecho hacia la cama que le pertenecía, se ondeaba dando la imagen de un chico malo, que no era.

-¿A-a pro-proposit-to?

-Sí, porque casi siempre estoy ahí cuando lo haces ¿Acaso no, Hyuk-ah?

Eunhyuk tembló por unos escasos segundos en su lugar, pocas veces veía a su amigo, a Lee Donghae haciendo aquello... y casi siempre le asustaba de esa manera. Ahora el aludido se había sentando en la orilla de su cama con ambas manos recargadas en sus costados y la espalda bien erguida, mientras también lo veía por el rabillo del ojo con ambos entrecerrados. Fue así como HyukJae reacciono.

-Aish tu babbo, ¡Es porque vivimos juntos! ¡Y-y no lo haría si no fuera algo que siempre he hecho!

-Mhum pero cuando están los chicos pasar rápido y más sin en cambio cuando estamos tu y yo pasas cual modelo contoneándote ¡¿ACOSA QUIERES PRESUMIR?!- hay iban de nuevo las peleas comunes, porque por más que Donghae lo intentara estaba tan acostumbrado a hacerlo ladrar.

-¿Presumir? Si tal vez lo hago, aunque no soy el único que parece tener ese complejo.

-¿¡A no!?

Eunhyuk le lanzo una mira delatora que iba paseándose desde su cadera hasta su rostro, por lo que Donghae como acto reflejo se cubrió con ambos brazos apenas lo que podía del pecho –Yaaah pero no pasa de sacarme la camisa, ¡es que tu sales DESNUDO!

-Yo creo que es solo eso porque es lo único que quieres/tienes para presumirme- canturreó el mayor sobrepasándose con sus palabras y causando un sonrojo intenso en el menor, pero esta vez no era vergüenza.

-¿Ah, así que eso tienes? Pues bien, entonces tú también deberías ir optando por usar una toalla para cubrirte algo, desde la cintura.... ¡Abajo!

-¿¡Qué quieres decir Lee Donghae!? ¿¡Y a dónde vas!?

-¡A DUCHARME! Idiota...

-¡No me dejes así! ¡AFRONTAME!- gritaba Eunhyuk parándose sobre la cama y dando pequeños saltos mientras lanzaba almohadas atrás de Donghae, este solo las esquivaba y seguía dirigiéndose al cuarto de baño con esa aura de indignación. –¡¡Dooonghaeee!!

-¡VE A VER A YESUNG!

-¿Yesung?- pregunto descolocado viendo como el menor se detenía a mirarle. –Si YESUNG, ve y pregúntale sus secretos... ¡PARA CRECER!

Por unos minutos se quedó ahí pensando en lo que le había dicho antes de cerrarle la puerta de un golpe estruendoso, hasta que recordó un pequeño GRAN detalle en la anatomía de su compañero Yesung y se sonrojo de solo imaginarlo. Y tanto pensaba la gente que Lee Donghae era un hombre inocente, cuando con él era otro ser inimaginable. Solo Eunhyuk conocía facetas de enojo, descontrol, tristeza y pesimismo del pequeño HaeHae, porque de una manera u otra además de ser su amigo, él había sido el causante de todas esas emociones en varios momentos.

Hola a las personas que leen esto...

Solo dejo este comentario porque me he estado preguntando ¿si no vamos muy lento? Como advertí al principio esta es una historia laaarga pero tampoco quiero que se aburran, entonces eso es todo, si pueden háganme saber su opinión. Gracias! *-* 

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