A veces eres realmente molesto

Capítulo 38: Es un desastre... celoso

-Hola chicos ¿qué tal su día?- saludo Sungmin viendo entrar a dos jóvenes muchachos al departamento con dos rostros totalmente diferentes uno del otro. Eunhyuk tenía esa sonrisa de encías bien marcada en el rostro, casi imborrable; y Donghae... bueno, había una mancha oscura enorme en la camisa y sus labios eran una delgada línea inexpresiva, pero lo más impresionante en su apariencia eran sus ojos cansados y con un brillo demasiado notoria, lo que le hizo pensar a Sungmin que había lagrimas luchando en ellos.

Eunhyuk le abrazo de pronto y con un asentimiento se fue en saltitos hasta su habitación, dejando a Sungmin atónito porque desde que tenía memoria Hyuk no era tan efusivo. Luego miro a Donghae.

El castaño apretó la mandíbula y los puños hasta dejarlos rojos y causar comezón en su palma. ¿Su día? Vaya era como un mal cuento en el que el protagonista muerte y el malo gana, en resumen las cosas habían pasado de esta manera:

Hyuk se encontró con "JunJi" en una cafetería en quién sabe dónde y fue como si se olvidara de su presencia, ni siquiera lo dejo saludar a la chica, aunque realmente no le importaba. Luego estaba el hecho de que lo envió a sentarse tres mesa más alejada de ellos y tuvo que pagarse su propio desayuno. Después fueron a la montaña rusa, donde "la chica" torpemente llevaba su café aun en la mano y apenas arranco el juego todo el líquido voló a su camisa blanca, era de esperarse que al bajar el siguiera sintiendo todo su cuerpo empapado y la enorme mancha café marcara su costosa prenda. Lo demás era historia, toda la cita amielada la tuvo que pagar Donghae con destellos de mala suerte. Al final Eunhyuk de despidió de Junjin con un inocente beso en la mejilla, pero sospechaba que solo era por su casi invisible presencia.

Donghae no dijo nada, no hacía falta pues que Sungmin con solo verlo se dio cuenta que no había sido uno de sus mejores momentos por lo que se acercó al muchacho y le coloco una mano sobre su hombro a forma de apoyo, diciéndole en un susurro -Todo estará bien Hae, la vida podrá ser cruel pero algo dulce se le escapa a la mierda.

El menor se alejó arrastrando los pies hasta la habitación, sintiendo que en cualquier instaste colapsaría de cansancio, su mente dejaría de funcionar por la guerra que tenía consigo mismo y era poco tener que sentir esa sensación de angustia y derrota en el pecho. Sus ojos se humedecían.

-¡Hola HaeHae!- apenas entro y un cuerpo se le lanzo a los adoloridos músculos que no pudo evitar quejarse un poco -Eres el mejor amigo, de todos los mejores amigos que existen pececito.

-Hum- fue su respuesta, para luego separarse e irse a tirar al colchón.

-¿Estás cansado?

-. . .- no hubo contestación esta vez, ni un ruido.

-Bueno, creo que lo estas. Gracias por lo de hoy, eres el mejor fish- Eunhyuk abandono la alcoba dejándolo hundido en un silencio perturbador, uno que no dejaba de recordarle aquel diminutivo usado: ¿Pececito? Por primera vez lo siento un alago y algo muy importante, pero a la vez tan indiferente.

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Heechul, Shindong, Kyuhyun y Donghae veían todos pegados unos a otros algo interesante en el portátil, parecía que veían una película pero en realidad eran varios tráiler de estrenos próximos.

-¡Esa suena genial! Se ven tan bien los efectos especiales que seguro será un éxito en 3D- anuncio con emoción Donghae, levantando sus piernas hasta tocar su pecho, los ojos le brillaban y su sonrisa era igual a la de un niño. En cambio los otros tres solo veían el corto con soñolencia.

-No inventes Donghae, que esa película es para críos- le dijo Shindong cruzándose de brazos -Incluso ahí lo dice: Edad recomendada es para niños de 7 a 13 años ¿Cómo puede eso ser impactante?