MAÑANA ES PARA SIEMPRE II, El regreso de Bárbara.

Capitulo 109

Bárbara: que pasa? Por qué se detiene?

Eduardo: no lo sé.

Eduardo intento abrir la puerta de ascensor pero no pudo.

Eduardo: seguro se trabó.

Bárbara: entonces estamos encerrados?

Eduardo: me temo que si mi vida.

Bárbara estaba realmente asustada, el haber estado encerrada en la cárcel y luego en una clínica logro sembrarle pánico a lugares cerrados, Eduardo la observo aterrada y la abrazo.

Eduardo: no te preocupes nos sacaran, ya active la alarma de emergencia.

Bárbara: no me agradan los lugares encerrados.

Eduardo: tranquilízate no estaremos mucho tiempo aquí.

Eduardo sentía el corazón de Bárbara latir a toda prisa, estaba realmente asustada, la besó para tranquilizarla un poco.

Eduardo: estas bien?

Bárbara estaba inmóvil y Eduardo empezaba a preocuparse, puso sus manos sobre sus hombros.

Eduardo: estoy contigo y a mi lado nada malo te pasará.

Bárbara: eso lo tengo muy claro.

Bárbara volteo y lo miro de tal manera que Eduardo entendio que algo planeaba.

Eduardo: que estas pensando?

Bárbara: es aburrido estar aquí sin hacer nada esperando que nos rescaten.

Eduardo:que propones?

Bárbara: vamos a aprovechar muy bien el tiempo.

Bárbara se acercó y beso su cuello, luego los labios, las bolsas que traían cayeron al suelo, mientras ellos se concentraron en un profundo y apasionado beso, él la rodeaba con sus brazos por la espalda y ella tenía sus inofensivos brazos apoyados en su cuello, Bárbara lo mordió en el cuello con lo que Eduardo quedo fascinado y excitado, Bárbara podía sentir su erección sobre su cuerpo, siguieron besándose ,él la subió sobre sus caderas y la azoto contra una de las paredes del ascensor, mientras la besaba acariciaba sus largas y hermosas piernas, ella acariciaba sus espalda, el ascensor empezó a abrir lentamente pero ellos estaban tan concentrados que no se dieron cuenta, las respiraciones de ambos estaban aceleradas, sus corazones latían a un mismo ritmo, la puerta se abrió y allí estaban, contra una de las paredes, las personas que esperaban el ascensor se quedaron boquiabiertas al verlos, los observaron unos segundos sin decir nada, Bárbara y Eduardo seguían sin darse cuenta de lo que pasaba a su alrededor, pero fue cuando uno de los visitantes del hotel hablo.

_Sería mejor que lo hicieran en una habitación y no en un lugar público..

Bárbara y Eduardo abrieron los ojos al mismo tiempo y sonrieron a las demás personas que los miraban aterrados, Eduardo bajo a Bárbara de sus caderas,se acomodaron la ropa, Bárbara lo tomo de la mano y los dos salieron, pero alcanzaron a escuchar comentarios.

_ si hubieran abierto la puerta 5 minutos más tarde los habríamos encontrado desnudos, se ve que son una pareja muy apasionada.

Bárbara moría de vergüenza, subieron al auto, ella prefirió conducir, a medio camino soltó la carcajada al ver a Eduardo que todavía parecía estar excitado.

Eduardo: de que te ries?

Bárbara: de lo que acabó de pasar, escuchaste lo que decía esa gente?

Eduardo: por supuesto, deben de pensar que somos unos degenerados.

Bárbara: no tienen por qué pensarlo, somos una pareja y algo teníamos que hacer mientras arreglaban el ascensor.