EN TODO ESTARÉ

10. ENTRE CORONAS, FIESTAS Y COPAS (PARTE III)

CAPÍTULO 10: ENTRE CORONAS, FIESTAS Y COPAS

POV PEETA

-PARTE III-

...

Estamos sentados uno en frente del otro, Katniss divide las porciones en el segundo plato vacio que trajo y me lo pasa. Lo que no nos gusta se lo damos al otro para no desperdiciar la comida, como vemos que hacen muchos en la fiesta. Comemos todo, pero acabamos tan llenos que entre el alcohol y la comida no nos entra nada más. Empezamos a sentirnos mareados. No puedo contar la cantidad de copas que tomamos cada uno para pasar la comida, porque las mías y las de Katniss están todas mezcladas sobre la bandeja. Habían doce copas únicamente cuatro quedaron intactas.

Justo entonces llega hasta nosotros el equipo de preparación de Katniss. Actuan casi incoherentes entre el alcohol que han consumido y su éxtasis por estar en un evento tan importante.

-¿Por qué no están comiendo? -Pregunta Octavia.

-Lo he hecho, pero no puedo aguantar otro bocado. –Dice Katniss, a quien empiezo a ver borrosa.

Ellos se ríen como si fuera la cosa más tonta que han oído nunca.

-¡Nadie deja que eso los detenga! –Dice Flavius.  Nos señala otra mesa más alejada con vinos que no habíamos visto hasta el momento. Venia va a buscarnos dos vasos y las recibimos.

Estamos a punto de probar el contenido, cuando Octavia nos grita:

-¡No aquí!

-Tienen que hacerlo en el baño. –Dice Venia, señalando dentro. – ¡O lo echarán todo por el suelo!

Miro el vaso de sustancia roja y lo relaciono todo.

-¿Quieren decir que esto nos hará vomitar?

-Por supuesto, para que puedan seguir comiendo. Todas las bebidas en vasos son para eso. Ya he estado allí dos veces, el efecto es inmediato. Todos lo hacen, o si no ¿cómo nos vamos a divertir en un festín? –Chilla Octavia emocionada.

De repente me dan arcadas, aunque no por el alcohol y la comida ingerida, si no por lo asqueroso que es lo que insinúan.

Comer, vomitar y seguir comiendo.

Mientras los distritos nos morimos de hambre, ellos comen en exceso gracias a este medio.

-¿Te encuentras bien, Peeta? –Pregunta Katniss preocupada.

-Yo… tranquila, no es nada.

Ella ha dejado el pequeño vaso en la mesa y yo la imito. Definitivamente no quiero beber esa cosa.

-Gracias, tal vez después. –Les digo.

Ellos se van dentro nuevamente para seguir bailando, comiendo y vomitando, o tal vez todo.

-Vas por ahí, pensando que puedes lidiar con ello, pensando que tal vez no sean tan malos, y después te salen con esto.

-Peeta, nos traen aquí para luchar a muerte por su entretenimiento. De verdad, esto no es nada en comparación.

-Lo sé. Es que a veces no puedo sobrellevarlo. Hasta el punto en que… no estoy seguro de qué haré. –Confieso.

Katniss medio tambaleante posa su mano sobre la mía.

Creo que nos pasamos de copas.

-Debemos acostumbrarnos a esta nueva vida. –Me recomienda. –Podremos ayudar a la gente de nuestro distrito ahora. ¿Sabes la cantidad de personas que atiende mi madre con desnutrición? Yo ya perdí la cuenta, son demasiadas para recordarlas. La mayoría de los enfermos acaban bajo tierra porque no tienen los medios para recuperarse de su enfermedad cuando la alimentación básica les falta y no tienen dinero.