Hay que hacer un cierre para luego iniciar

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Entré al auditorio dónde pasaría clases y caminé hasta mi habitual asiento. Al llegar, nuevamente había una pequeña carta sobre el escritorio y al lado de esta había una rosa roja.

Colgué mi bolso en el respaldar de la silla y luego tomé el sobre que decía ''Día 9'' para abrirlo y a continuación leer su contenido:

''Skylar: No sabes cuanto quisiera seguir a tu lado para darte floras todos los días y que tú las aceptes con una sonrisa. Eres hermosa. William''

Esto definitivamente tiene que parar. No puedo seguir aceptando regalos de su parte que lo único que hacen es confundirme y darle falsas esperanzas. Él me dijo que este era su plan para reconquistarme, y no me puedo permitir dejar que eso pase. No puedo caer tan fácil, no solo porque con cosas materiales y regalos no se arreglan las cosas, sino también porque ahora ya estoy con alguien que me hace feliz, y no quiero estar con otra persona.

Guardo las cosas en mi bolso y vuelvo mi atención a la clase que acaba de comenzar. Durante todas las clases de toda la mañana tomo apuntes ya que los exámenes se acercan y quiero tener una buena base de la cual estudiar. Los libros también ayudan, pero estudiar de cosas que yo he escrito se me hace mucho más fácil.

Acaba la última clase y abro mi bolso para guardar mis libros y cuadernos y salir de ahí. Al hacerlo veo la rosa y luego de pensar un momento decido sacarla para tenerla en mi mano y devolvérsela a William ahora que vaya a buscarlo a la cafetería. Lo hago y luego salgo del auditorio, despidiéndome de mi grupo de amigas de la Universidad y comenzando a caminar hacia el comedor.

Hablando de mis amigos, el día de hoy nos juntaríamos todos después de la escuela en uno de los parques cerca del centro de la ciudad, para comer algo y ponernos al día. No nos veíamos hace mucho, y la verdad es que ya nos extrañábamos. Éramos tan unidos en la escuela que pasar de vernos todos los días a casi no vernos era difícil.

Las puertas del gran comedor se hacen visibles frente a mí una vez que doblo la esquina. Camino recto en dirección a estas y cuando lo hago las abro para después pasar. No estoy segura de si William está comiendo acá, ya que desde que nos separámos y luego comencé a salir con Andrew no me he quedado a comer acá, ya que casi siempre salgo a comer con él.

Lo busco con la mirada entre todos los estudiantes en diferentes mesas hasta que finalmente lo diviso sentado junto a otros cuatro chicos alrededor de una mesa ubicada en una esquina del lugar. Me armo de valor y emprendo mi recorrido hacia su dirección. Es el momento de enfrentarlo y ponerle un alto a esto. 

Una vez llego al lado de su mesa, todos los chicos siguen charlando ya que aparentemente no se han percatado de mi presencia. William se encuentra de espaldas a mí, por lo que no estoy en su rango de visión. Toso levemente para llamar su atención y uno de los chicos de la mesa dirige su atención a mí, llamando la atención de los demás, quienes lentamente hacen silencio y me miran sin saber quién soy ni que es lo que hago ahí, esperando a que se los diga. William es el último en darse la vuelta, y cuando me ve abre los ojos en sorpresa.

-Skylar, hola...Que haces aquí?- pregunta aún sorprendido.

-Hola William, podemos hablar?- digo tratando de sonar lo más seria posible.

Los chicos se miran entre si y luego hacen un sonoro ''Uhh'', molestando a William por haberse metido en ''problemas''.

-Claro- dice William, dejando su comida para luego tomar su mochila y levantarse.

Se para en frente mío y yo me doy la vuelta, comenzando a caminar en dirección hacia la puerta, esperando a que William me siga. Miro disimuladamente por sobre mi hombro y veo que efectivamente así es, William está caminando detrás mío sin siguiera haber preguntado a dónde íbamos. Solo espero que no piense que voy a perdonarlo o algo por el estilo, ya que no deja de mirar la rosa que tengo en mi mano.

Salimos de la cafetería y ya una vez en el pasillo me detengo y William hace lo mismo. Estamos frente a frente, y nos quedamos en silencio un breve momento, simplemente mirándonos el uno al otro. Sus hermosos ojos verdes miraban a los míos expectantes. Pienso un momento que decir antes de hablar, hasta que termino de organizar mis ideas y finalmente comienzo:

-Bueno William, la razón por la que quería hablar contigo hoy es por que quiero que dejes de mandarme todas estas notas y regalos.- digo de golpe y de la manera más directa que puedo.

-Porque?- me pregunta. En serio me está preguntando eso?

-Porque? Pues por varias razones- digo y comienzo a enumerar con los dedos a la vez que voy hablando- Primero, porque tengo novio, y no creo que te gustaría que un chico le mandara regalos a tu novia verdad? Segundo, porque creo que tú crees que yo al aceptar tus regalos y no decirte nada significa que te voy a perdonar y vamos a volver a estar juntos, pero no es así- Él está por decir algo pero lo interrumpo y detengo, ya que yo sé que si lo dejo hablar no voy a poder continuar- Y tercero, porque no me hace bien seguir leyendo las cosas que me escribes...Entendiste?

William cierra los ojos un momento como si estuviera pensando y luego de suspirar los abre y me mira fijamente, para luego comenzar a hablar:

-Yo sé que tienes novio, pero eso no significa nada.- dice y yo estoy por replicar, pero el me calla como yo lo hice y sigue hablando.- Sé que aún sientes lo que yo siento por ti, solo que no quieres aceptarlo. También sé que no con regalos te voy a recuperar, pero siento que eso es lo mínimo que puedo hacer para que me perdones después de lo que yo te hice sufrir... Y tercero, porque no te hace bien seguir leyendo mis cartas?

-Porque...- tartamudeo.- Porque me confundes si?

William me dedica una sonrisa de suficiencia cuando termino de decir eso, y entiendo porque lo hace, por que acabo de admitir que todavía tiene la capacidad de confundirme. 

-Sólo por favor déjame en paz si?- digo y le pongo la rosa en el pecho para que la agarre, lo cual hace mientras la mira con tristeza.- Podemos ser amigos, pero deja de mandarme regalos y de insistir. Por favor.

-Está bien- dice después de suspirar- Dejaré de mandarte cosas.

-Gracias- digo sincera y después me doy la vuelta.

Comienzo a alejarme y ya luego de que avanzo un rato, pero al escuchar su voz nuevamente me detengo:

-Siempre te voy a amar, solo quiero que lo sepas Skylar.

Me quedo quieta al escuchar sus palabras. El tono en el que las dice y la forma en que sus ojos me miran cuando lo hace causa que mi corazón lata con fuerza y sienta como un nudo se forma en mi garganta.  Simplemente le sonrío y me doy la vuelta para seguir caminando.

Esto se sintió como un cierre para los dos, y aunque me cause tristeza, sé que era para lo mejor. Ahora, el chico con el que me estoy dando la oportunidad de ser feliz, se encuentra afuera esperándome para salir junto con nuestros amigos. Es el inicio de una nueva etapa en mi vida, el inicio de una nueva Skylar, y el inicio de una nueva felicidad.







Sin vuelta atrásWhere stories live. Discover now