Sin vuelta atrás

Perdonar y olvidar

(-Narra Skylar-)

Luego de irnos de la heladería, Ian y yo decidimos pasar el resto de la mañana simplemente paseando por los diferentes parques de la ciudad conversando y disfrutando de la compañía del otro, sin pensar en nada más ni en ninguno de nuestros problemas, simplemente gozar del momento.

Ian se encargó de hacerme reír y hacerme olvidar la tristeza que siento dentro debido a mi ruptura con William, y aunque no se lo haya dicho, le estoy tremendamente agradecida. Sé que él en realidad se siente culpable por todo esto, pero cómo ya se lo dije antes no debería hacerlo. La culpa no es de nadie más que mía por mentir y ocultarle cosas, y por más que me duele tengo que aceptarlo.

Ya es la hora de almuerzo y en vez de buscar un lugar para comer, ya que honestamente tengo mucha hambre, decidimos que vamos a ir en busca de William para que Ian le explique absolutamente todo y arregle este malentendido. Obviamente yo volvía decirle a Ian que no era necesario que hiciera eso, que yo iba a arreglarlo por mi cuenta y que no tenía porque preocuparse, pero el insistió y no me quedó otra que aceptar.

Es por eso que ahora mismo mismo nos encontramos en mi auto con Ian al volante en camino al gimnasio al que William suele ir después de la universidad. Cómo sé que va a estar ahí con seguridad y no se iba a ir a otro lado? Porque va ahí todos los días sin falta y se queda por lo menos dos horas entrenando. Digo, no por nada tiene el cuerpo que tiene no? 

Luego de indicarle la calle en la que se encuentra el gimnasio del que William es miembro, él conduce en esa dirección con mucha tranquilidad y a una velocidad moderada mientras yo me recuesto lo más que puedo el el asiento y pongo mis pies sobre el salpicadero del auto, cerrando mis ojos para descansar un poco escuchando la música que suena por la radio aunque sin prestarle realmente atención, sumiéndome en mis pensamientos.

Qué pasa si él decide no creerme ni a mi ni a Ian? Qué pasa si piensa que en realidad sí lo estuve engañando todo este tiempo? Si no me perdona? Si no quiere volver conmigo? No sé que voy a hacer sin él. Todas éstas preguntas van a tener respuesta en el caso de que él efectivamente se encuentre ahí y quiera escucharnos... Conociéndolo eso va a ser muy difícil.

No tengo idea de cuánto tiempo habrá pasado, solamente siento cómo el auto se detiene y la mano de Ian se posa sobre mi hombro para sacudirme suavemente mientras escucho que me dice que ya hemos llegado. Seguramente piensa que me dormí durante todo el camino, cuando en realidad es todo lo contrario. Estuve pensando y pensando en el momento y la situación que prontamente vamos a tener que enfrentar, es imposible que me haya quedado dormida. Simplemente no me dí cuenta de la distancia recorrida ni el tiempo que hicimos en el auto. 

-Estás segura que es aquí?- me pregunta Ian señalando el gimnasio que se encuentra frente nuestro.

-Estoy segura- contesto observando el lugar sólo para cerciorarme de que estamos en el gimnasio correcto.

-Y ahora qué hacemos? Entro a buscarlo y a decirle que quiero hablar con él?

-No, si te ve entrar va a querer irse y no va a querer escucharte- le digo negando con la cabeza.- Tenemos que esperar a que él salga y ya en la acera lo detenemos y lo obligamos a que nos escuche.

-Skylar, suena cómo un mal plan- habla inseguro mientras pasa una mano por su cabello.- No crees que se va a ir apenas nos vea? Y quién dice que acorralándolo vamos a lograr que escuche?

-Primero que nada, tú fuiste el que insistió en hablar con él para explicarle todo- hablo yo ésta vez y él asiente dándome la razón.- Y segundo, yo sé que el plan de acorralarlo fue mío pero es la única manera. Si intento organizar una reunión civilizada, no va a contestar ninguna de mis llamadas ni mensajes, así que no hay otra forma.